Parallel Verses
Spanish: Reina Valera Gómez
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
La Biblia de las Américas
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del pecado y de la muerte.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo, Jesús, me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
Reina Valera 1909
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del pecado y de la muerte.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Porque la ley del Espíritu de vida en el Ungido, Jesús, me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
New American Standard Bible
For the law of the Spirit of life in Christ Jesus has set you free from the law of sin and of death.
Artículos
Referencias Cruzadas
1 Corintios 15:45
Y así está escrito: El primer hombre Adán fue hecho un alma viviente; el postrer Adán, un espíritu vivificante.
Romanos 6:18
y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.
Juan 8:32
y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Juan 8:36
Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Romanos 7:4
Así también vosotros mis hermanos, habéis muerto a la ley por el cuerpo de Cristo; para que seáis de otro, de Aquél que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.
2 Corintios 3:6
el cual también nos ha hecho ministros suficientes del nuevo testamento; no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.
Salmos 51:12
Vuélveme el gozo de tu salvación; y el espíritu libre me sustente.
Juan 4:10
Respondió Jesús y le dijo: Si conocieses el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le pedirías a Él, y Él te daría agua viva.
Juan 4:14
pero el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.
Juan 6:63
El Espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Juan 7:38-39
El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
Romanos 3:27
¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿De las obras? No, sino por la ley de la fe.
Romanos 5:21
para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna, por Jesucristo, nuestro Señor.
Romanos 6:14
Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.
Romanos 6:22
Mas ahora, libertados del pecado, y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santidad, y por fin la vida eterna.
Romanos 7:21
Hallo, pues, esta ley, que cuando quiero hacer el bien, el mal está en mí.
Romanos 7:24-25
¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?
Romanos 8:10-11
Y si Cristo está en vosotros, el cuerpo a la verdad está muerto a causa del pecado, pero el Espíritu vive a causa de la justicia.
2 Corintios 3:17
Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Gálatas 2:19
Porque yo por la ley soy muerto a la ley, a fin de que viva para Dios.
Gálatas 5:1
Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres; y no os sujetéis de nuevo al yugo de esclavitud.
Apocalipsis 11:11
Y después de tres días y medio el Espíritu de vida enviado de Dios, entró en ellos, y se alzaron sobre sus pies, y vino gran temor sobre los que los vieron.
Apocalipsis 22:1
Y me mostró un río puro de agua de vida, límpido como el cristal, que provenía del trono de Dios y del Cordero.
Información sobre el Versículo
Lecturas contextuales
1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. 3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne;