67 Versículos de la Biblia sobre Jerusalén, Historia de

Versículos Más Relevantes

Jueces 19:9-12

Cuando el hombre se levantó para irse con su concubina y su criado, su suegro, el padre de la joven, le dijo: He aquí, ya ha declinado el día; te ruego que pases la noche. Mira, el día llega a su fin; pasa la noche aquí para que se alegre tu corazón. Y mañana os levantaréis temprano para vuestro viaje y te irás a tu casa. Pero el hombre no quiso pasar la noche, así que se levantó y partió, y fue hasta {un lugar} frente a Jebús, es decir, Jerusalén. Y estaban con él un par de asnos aparejados; también con él estaba su concubina. Cuando {estaban} cerca de Jebús, el día casi había declinado; y el criado dijo a su señor: Te ruego que vengas, nos desviemos, y entremos en esta ciudad de los jebuseos y pasemos la noche en ella.Leer más.
Pero su señor le dijo: No nos desviaremos para entrar en la ciudad de extranjeros que no son de los hijos de Israel, sino que iremos hasta Guibeá.

Génesis 10:15-16

Canaán engendró a Sidón su primogénito, y a Het, y al jebuseo, al amorreo, al gergeseo,

Génesis 15:18-21

En aquel día el SEÑOR hizo un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia he dado esta tierra, desde el río de Egipto hasta el río grande, el río Eufrates: los ceneos, los cenezeos, los cadmoneos, los hititas, los ferezeos, los refaítas,Leer más.
los amorreos, los cananeos, los gergeseos y los jebuseos.

Éxodo 3:7-8

Y el SEÑOR dijo: Ciertamente he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he escuchado su clamor a causa de sus capataces, pues estoy consciente de sus sufrimientos. Y he descendido para librarlos de mano de los egipcios, y para sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel, al lugar de los cananeos, de los hititas, de los amorreos, de los ferezeos, de los heveos y de los jebuseos.

Éxodo 23:23

Pues mi ángel irá delante de ti y te llevará a {la tierra del} amorreo, del hitita, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo; y los destruiré por completo.

Éxodo 34:11

Observa lo que te mando hoy: he aquí, yo echo de delante de ti al amorreo, al cananeo, al hitita, al ferezeo, al heveo y al jebuseo.

Números 13:29

Amalec habita en la tierra del Neguev, y los hititas, los jebuseos y los amorreos habitan en la región montañosa, y los cananeos habitan junto al mar y a la ribera del Jordán.

Deuteronomio 7:1-2

Cuando el SEÑOR tu Dios te haya introducido en la tierra donde vas a entrar para poseerla y haya echado de delante de ti a muchas naciones: los hititas, los gergeseos, los amorreos, los cananeos, los ferezeos, los heveos y los jebuseos, siete naciones más grandes y más poderosas que tú, y cuando el SEÑOR tu Dios los haya entregado delante de ti, y los hayas derrotado, los destruirás por completo. No harás alianza con ellos ni te apiadarás de ellos.

Josué 3:10

Y Josué añadió: En esto conoceréis que el Dios vivo está entre vosotros, y que ciertamente expulsará de delante de vosotros a los cananeos, a los hititas, a los heveos, a los ferezeos, a los gergeseos, a los amorreos y a los jebuseos.

Josué 9:1-2

Y aconteció que cuando se enteraron todos los reyes que {estaban} al otro lado del Jordán, en los montes, en los valles y en toda la costa del mar Grande hacia el Líbano, {los reyes} de los hititas, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos, a una se reunieron y se pusieron de acuerdo para pelear contra Josué y contra Israel.

Josué 10:1-7

Y sucedió que cuando Adonisedec, rey de Jerusalén, oyó que Josué había capturado a Hai y que la había destruido por completo (como había hecho con Jericó y con su rey, así había hecho con Hai y con su rey), y que los habitantes de Gabaón habían concertado la paz con Israel y estaban dentro de su tierra, tuvo gran temor, porque Gabaón {era} una gran ciudad, como una de las ciudades reales, y porque era más grande que Hai, y todos sus hombres {eran} valientes. Por tanto, Adonisedec, rey de Jerusalén, envió {mensaje} a Hoham, rey de Hebrón, a Piream, rey de Jarmut, a Jafía, rey de Laquis y a Debir, rey de Eglón, diciendo:Leer más.
Subid a mí y ayudadme, y ataquemos a Gabaón, porque ha hecho paz con Josué y con los hijos de Israel. Se reunieron, pues, los cinco reyes de los amorreos, el rey de Jerusalén, el rey de Hebrón, el rey de Jarmut, el rey de Laquis {y} el rey de Eglón, y subieron ellos con todos sus ejércitos, y acamparon junto a Gabaón y lucharon contra ella. Entonces los hombres de Gabaón enviaron {mensaje} a Josué al campamento de Gilgal, diciendo: No abandones a tus siervos; sube rápidamente a nosotros, sálvanos y ayúdanos, porque todos los reyes de los amorreos que habitan en los montes se han reunido contra nosotros. Y Josué subió de Gilgal, él y toda la gente de guerra con él, y todos los valientes guerreros.

Josué 15:7-8

Y el límite subía hasta Debir desde el valle de Acor, y volvía hacia el norte, hacia Gilgal que está frente a la subida de Adumín, al sur del valle, y seguía hasta las aguas de En-semes y terminaba en En-rogel. Después el límite subía por el valle de Ben-hinom hasta la ladera del jebuseo al sur, es decir, Jerusalén, y subía hasta la cumbre del monte que está frente al valle de Hinom hacia el occidente, que está al extremo del valle de Refaim hacia el norte.

Josué 18:28

Zela, Elef, Jebús, es decir, Jerusalén, Guibeá y Quiriat; catorce ciudades con sus aldeas. Esta {fue} la heredad de los hijos de Benjamín conforme a sus familias.

Josué 15:63

Mas a los jebuseos, habitantes de Jerusalén, los hijos de Judá no pudieron expulsarlos; por tanto, los jebuseos habitan hasta hoy en Jerusalén con los hijos de Judá.

Jueces 1:4-8

Subió Judá, y el SEÑOR entregó en sus manos a los cananeos y a los ferezeos, y derrotaron a diez mil hombres en Bezec. Hallaron a Adoni-bezec en Bezec y pelearon contra él, y derrotaron a los cananeos y a los ferezeos. Huyó Adoni-bezec, pero lo persiguieron, lo prendieron y le cortaron los pulgares de las manos y de los pies.Leer más.
Y Adoni-bezec dijo: Setenta reyes, con los pulgares de sus manos y de sus pies cortados, recogían {migajas} debajo de mi mesa; como yo he hecho, así me ha pagado Dios. Lo llevaron a Jerusalén, y allí murió. Y pelearon los hijos de Judá contra Jerusalén y la tomaron, la pasaron a filo de espada y prendieron fuego a la ciudad.

Jueces 1:21

Pero los hijos de Benjamín no expulsaron a los jebuseos que vivían en Jerusalén; así que los jebuseos han vivido con los hijos de Benjamín en Jerusalén hasta el día de hoy.

1 Crónicas 11:4-9

Entonces fue David con todo Israel a Jerusalén, es decir, Jebús, y estaban allí los jebuseos, habitantes de la tierra. Y los habitantes de Jebús dijeron a David: No entrarás aquí. Pero David capturó la fortaleza de Sion, es decir, la ciudad de David. Y David había dicho: El que primero hiera a un jebuseo será jefe y comandante. Y Joab, hijo de Sarvia, subió primero, y fue hecho jefe.Leer más.
David habitó en la fortaleza; por tanto fue llamada la ciudad de David. Y edificó la ciudad alrededor, desde el Milo hasta la {muralla} circundante; y Joab reparó el resto de la ciudad. David se engrandecía cada vez más, y el SEÑOR de los ejércitos {estaba} con él.

2 Samuel 5:6-10

Y el rey y sus hombres fueron a Jerusalén contra los jebuseos, los habitantes de la tierra, y éstos dijeron a David: No entrarás aquí; aun los ciegos y los cojos te rechazarán; pues pensaban: David no puede entrar aquí. No obstante, David conquistó la fortaleza de Sion, es decir, la ciudad de David. Y dijo David aquel día: Todo el que quiera herir a los jebuseos, que suba por el túnel del agua y llegue a los cojos y a los ciegos, a los cuales el alma de David aborrece. Por eso se dice: Ni los ciegos ni los cojos entrarán en la casa.Leer más.
David habitó en la fortaleza, y la llamó la ciudad de David. Y edificó David {la muralla} en derredor desde el Milo hacia adentro. David se engrandecía cada vez más, porque el SEÑOR, Dios de los ejércitos, {estaba} con él.

2 Samuel 6:12-19

Y se dio aviso al rey David, diciéndo{le:} El SEÑOR ha bendecido la casa de Obed-edom y todo lo que le pertenece a causa del arca de Dios. Entonces David fue, y con alegría hizo subir el arca de Dios de la casa de Obed-edom a la ciudad de David. Y sucedió que cuando los portadores del arca del SEÑOR habían andado seis pasos, él sacrificó un buey y un carnero cebado. David danzaba con toda {su} fuerza delante del SEÑOR, y estaba vestido con un efod de lino.Leer más.
David y toda la casa de Israel hacían subir el arca del SEÑOR con aclamación y sonido de trompeta. Sucedió que cuando el arca del SEÑOR entraba a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, miró desde la ventana y vio al rey David saltando y danzando delante del SEÑOR, y lo menospreció en su corazón. Metieron el arca del SEÑOR y la colocaron en su lugar dentro de la tienda que David había levantado para ella, y David ofreció holocaustos y ofrendas de paz delante del SEÑOR. Cuando David terminó de ofrecer el holocausto y las ofrendas de paz, bendijo al pueblo en el nombre del SEÑOR de los ejércitos. Después repartió a todo el pueblo, a toda la multitud de Israel, tanto a hombres como a mujeres, una torta de pan, una de dátiles y una de pasas a cada uno. Entonces todo el pueblo se fue, cada uno a su casa.

2 Samuel 5:4-5

Treinta años {tenía} David cuando llegó a ser rey, {y} reinó cuarenta años. En Hebrón reinó sobre Judá siete años y seis meses, y en Jerusalén reinó treinta y tres años sobre todo Israel y Judá.

2 Samuel 9:13

pero Mefiboset moraba en Jerusalén, porque siempre comía a la mesa del rey. Estaba lisiado de ambos pies.

2 Samuel 11:1

Aconteció que en la primavera, en el tiempo cuando los reyes salen {a la batalla,} David envió a Joab y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los hijos de Amón y sitiaron a Rabá. Pero David permaneció en Jerusalén.

2 Samuel 12:29-31

Reunió David a todo el pueblo y fue a Rabá, y peleó contra ella y la tomó. Quitó la corona de la cabeza de su rey, la cual pesaba un talento de oro y {tenía} una piedra preciosa, y fue puesta sobre la cabeza de David. Y él sacó botín de la ciudad en grandes cantidades. Y la gente que {había} en ella, la sacó y la puso {a trabajar} con sierras, con trillos de hierro y con hachas de hierro, también la puso a trabajar en los hornos de ladrillos. Así hizo a todas las ciudades de los hijos de Amón. Entonces regresó David con todo el pueblo {a} Jerusalén.

1 Crónicas 20:1-3

Y aconteció que en la primavera, en el tiempo en que los reyes salen {a la guerra,} Joab sacó el ejército y devastó la tierra de los hijos de Amón, y fue y puso sitio a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén. Y Joab hirió a Rabá y la destruyó. David tomó la corona de la cabeza de su rey, y halló que pesaba un talento de oro y que tenía en ella una piedra preciosa; y fue puesta sobre la cabeza de David. Sacó además una gran cantidad de botín de la ciudad. Y a la gente que {había} en ella, {la} sacó y {la} puso {a trabajar} con sierras, con trillos de hierro y con hachas. Y así hizo David a todas las ciudades de los hijos de Amón. Entonces regresó David con todo el pueblo {a} Jerusalén.

2 Samuel 14:23-24

Joab se levantó, fue a Gesur y trajo a Absalón a Jerusalén. Pero el rey dijo: Que vuelva a su casa y no vea mi rostro. Y Absalón volvió a su casa, y no vio el rostro del rey.

2 Samuel 15:13-14

Entonces un mensajero vino a David, diciendo: El corazón de los hombres de Israel está con Absalón. Y David dijo a todos sus siervos que {estaban} con él en Jerusalén: Levantaos y huyamos, porque {si no,} ninguno de nosotros escapará de Absalón. Id de prisa, no sea que nos alcance pronto, traiga desgracia sobre nosotros y hiera la ciudad a filo de espada.

1 Reyes 2:10-12

Y durmió David con sus padres y fue sepultado en la ciudad de David. Los días que David reinó sobre Israel {fueron} cuarenta años: siete años reinó en Hebrón, y treinta y tres años reinó en Jerusalén. Salomón se sentó en el trono de David su padre y su reino se afianzó en gran manera.

1 Reyes 3:1

Salomón se emparentó con Faraón, rey de Egipto, pues tomó la hija de Faraón y la trajo a la ciudad de David mientras acababa de edificar su casa, la casa del SEÑOR y la muralla alrededor de Jerusalén.

1 Reyes 8:1

Entonces Salomón reunió a los ancianos de Israel, a todos los jefes de las tribus {y} a los principales de las casas paternas de los hijos de Israel ante él en Jerusalén, para hacer subir el arca del pacto del SEÑOR de la ciudad de David, la cual es Sion.

1 Reyes 10:1-5

Cuando la reina de Sabá oyó de la fama de Salomón, por causa del nombre del SEÑOR, vino a probarle con preguntas difíciles. Y vino a Jerusalén con un séquito muy grande, con camellos cargados de especias, y gran cantidad de oro y piedras preciosas. Cuando vino a Salomón, habló con él de todo lo que tenía en su corazón. Y Salomón contestó todas sus preguntas; no hubo nada tan oscuro que el rey no pudiera explicárselo.Leer más.
Cuando la reina de Sabá vio toda la sabiduría de Salomón, la casa que él había edificado, los manjares de su mesa, las habitaciones de sus siervos, el porte de sus ministros y sus vestiduras, sus coperos, y la escalinata por la cual él subía a la casa del SEÑOR, se quedó asombrada.

1 Reyes 11:41-43

Los demás hechos de Salomón, todo lo que hizo y su sabiduría, ¿no están escritos en el libro de los hechos de Salomón? El tiempo que Salomón reinó en Jerusalén sobre todo Israel {fue de} cuarenta años. Y durmió Salomón con sus padres, y fue sepultado en la ciudad de su padre David; y su hijo Roboam reinó en su lugar.

1 Reyes 14:21

Y Roboam, hijo de Salomón, reinó en Judá. Roboam {tenía} cuarenta y un años cuando comenzó a reinar, y reinó diecisiete años en Jerusalén, la ciudad que el SEÑOR había escogido de entre todas las tribus de Israel para poner allí su nombre. El nombre de su madre {era} Naama, amonita.

1 Reyes 12:16-19

Cuando todo Israel {vio} que el rey no les escuchaba, el pueblo respondió al rey, diciendo: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? No {tenemos} herencia con el hijo de Isaí. ¿A tus tiendas, Israel! ¿Mira ahora por tu casa, David! Y todo Israel se fue a sus tiendas. Pero en cuanto a los hijos de Israel que habitaban en las ciudades de Judá, Roboam reinó sobre ellos. Entonces el rey Roboam envió a Adoram, que {estaba} a cargo de los trabajos forzados, pero todo Israel lo mató a pedradas; y el rey Roboam se apresuró a subir a {su} carro para huir a Jerusalén.Leer más.
Así Israel ha estado en rebeldía contra la casa de David hasta hoy.

2 Crónicas 10:16-19

Cuando todo Israel {vio} que el rey no los escuchaba, el pueblo respondió al rey, diciendo: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? No {tenemos} herencia con el hijo de Isaí. ¿Cada uno a su tienda, Israel! ¿Mira ahora por tu casa, David! Y todo Israel se fue a sus tiendas. Pero en cuanto a los hijos de Israel que habitaban en las ciudades de Judá, Roboam reinó sobre ellos. Entonces el rey Roboam envió a Adoram, que {estaba} a cargo de los trabajos forzados, pero los hijos de Israel lo mataron a pedradas; y el rey Roboam se apresuró a subir a {su} carro para huir a Jerusalén.Leer más.
Así Israel ha estado en rebeldía contra la casa de David hasta hoy.

1 Reyes 12:25-27

Entonces Jeroboam edificó Siquem en la región montañosa de Efraín, y habitó allí. De allí salió y edificó Penuel. Y Jeroboam se dijo en su corazón: Ahora el reino volverá a la casa de David si este pueblo continúa subiendo a ofrecer sacrificios en la casa del SEÑOR en Jerusalén, porque el corazón de este pueblo se volverá a su señor, {es decir} a Roboam, rey de Judá, y me matarán y volverán a Roboam, rey de Judá.

1 Reyes 15:9-10

En el año veinte de Jeroboam, rey de Israel, Asa comenzó a reinar sobre Judá. Reinó cuarenta y un años en Jerusalén; y el nombre de su madre {era} Maaca, hija de Abisalom.

1 Reyes 22:42

Josafat {tenía} treinta y cinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veinticinco años en Jerusalén. Y el nombre de su madre {era} Azuba, hija de Silhi.

2 Crónicas 20:31

Y reinó Josafat sobre Judá. Tenía treinta y cinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veinticinco años en Jerusalén. Y el nombre de su madre {era} Azuba, hija de Silhi.

2 Reyes 8:16-17

En el año quinto de Joram, hijo de Acab, rey de Israel, siendo Josafat rey de Judá, comenzó a reinar Joram, hijo de Josafat, rey de Judá. Tenía treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén.

2 Crónicas 21:5

Joram {tenía} treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén.

2 Reyes 12:1

En el séptimo año de Jehú, Joás comenzó a reinar, y reinó cuarenta años en Jerusalén; y el nombre de su madre {era} Sibia de Beerseba.

2 Crónicas 24:1

Joás {tenía} siete años cuando comenzó a reinar, y reinó cuarenta años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Sibia de Beerseba.

2 Reyes 15:1-2

En el año veintisiete de Jeroboam, rey de Israel, comenzó a reinar Azarías, hijo de Amasías, rey de Judá. Tenía dieciséis años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y dos años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Jecolía, de Jerusalén.

2 Crónicas 26:3

Uzías {tenía} dieciséis años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y dos años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Jecolías, de Jerusalén.

2 Reyes 18:1-2

Y aconteció que en el año tercero de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías, hijo de Acaz, rey de Judá. Tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veintinueve años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Abi, hija de Zacarías.

2 Crónicas 29:1

Ezequías comenzó a reinar {cuando tenía} veinticinco años, y reinó veintinueve años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Abías, hija de Zacarías.

2 Reyes 18:13-35

Y en el año catorce del rey Ezequías, subió Senaquerib, rey de Asiria, contra todas las ciudades fortificadas de Judá, y las tomó. Entonces Ezequías, rey de Judá, envió a decir al rey de Asiria en Laquis: He hecho lo malo. Retírate de mí; lo que me impongas, aceptaré. Y el rey de Asiria impuso a Ezequías, rey de Judá, trescientos talentos de plata y treinta talentos de oro. Y Ezequías {le} dio toda la plata que se hallaba en la casa del SEÑOR y en los tesoros de la casa del rey.Leer más.
En aquel tiempo Ezequías quitó {el oro de} las puertas del templo del SEÑOR, y {de} los postes {de las puertas} que {el mismo} Ezequías, rey de Judá, había revestido {de oro,} y lo entregó al rey de Asiria. Entonces el rey de Asiria envió, desde Laquis a Jerusalén, al Tartán, al Rabsaris y al Rabsaces con un gran ejército contra el rey Ezequías. Y subieron y llegaron a Jerusalén. Y cuando subieron, llegaron y se colocaron junto al acueducto del estanque superior que está en la calzada del campo del Batanero. Llamaron al rey, y salió a ellos Eliaquim, hijo de Hilcías, que era mayordomo, con el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf. Y el Rabsaces les dijo: Decid ahora a Ezequías: ``Así dice el gran rey, el rey de Asiria: ` ¿Qué confianza es ésta que tú tienes? `Tú dices (pero sólo {son} palabras vanas): ``{Tengo} consejo y poder para la guerra." {Mas} ahora, ¿en quién confías que te has rebelado contra mí? `He aquí, tú confías en el báculo de esta caña quebrada, {es decir,} en Egipto, en el cual, si un hombre se apoya, penetrará en su mano y la traspasará. Así es Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él. `Pero si me decís: ``Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios," ¿no es El aquel cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: ``Adoraréis delante de este altar en Jerusalén"? `Ahora pues, te ruego que llegues a un acuerdo con mi señor el rey de Asiria, y yo te daré dos mil caballos, si por tu parte puedes poner jinetes sobre ellos. ` ¿Cómo, pues, puedes rechazar a un oficial de los menores de los siervos de mi señor, y confiar en Egipto para {tener} carros y hombres de a caballo? ` ¿He subido ahora sin el {consentimiento del} SEÑOR contra este lugar para destruirlo? El SEÑOR me dijo: ``Sube contra esta tierra y destrúyela.'" Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, Sebna y Joa dijeron al Rabsaces: Te rogamos que hables a tus siervos en arameo, porque nosotros {lo} entendemos, y no nos hables en la lengua de Judá a oídos del pueblo que está sobre la muralla. Pero el Rabsaces les dijo: ¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {sólo} a tu señor y a ti, y no a los hombres que están sentados en la muralla, {condenados} a comer sus propios excrementos y beber su propia orina con vosotros? El Rabsaces se puso en pie, gritó a gran voz en la lengua de Judá, y dijo: Escuchad la palabra del gran rey, el rey de Asiria. Así dice el rey: ``Que no os engañe Ezequías, porque él no os podrá librar de mi mano; ni que Ezequías os haga confiar en el SEÑOR, diciendo: `Ciertamente el SEÑOR nos librará, y esta ciudad no será entregada en manos del rey de Asiria.' ``No escuchéis a Ezequías, porque así dice el rey de Asiria: `Haced la paz conmigo y salid a mí, y coma cada uno de su vid y cada uno de su higuera, y beba cada cual de las aguas de su cisterna, hasta que yo venga y os lleve a una tierra como vuestra tierra, tierra de grano y de mosto, tierra de pan y de viñas, tierra de olivos y de miel, para que viváis y no muráis.' Pero no escuchéis a Ezequías porque os engaña, diciendo: `El SEÑOR nos librará.' `` ¿Acaso alguno de los dioses de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria? `` ¿Dónde están los dioses de Hamat y de Arfad? ¿Dónde están los dioses de Sefarvaim, de Hena y de Iva? ¿Cuándo han librado ellos a Samaria de mi mano? `` ¿Quiénes de entre todos los dioses de estas tierras han librado su tierra de mi mano, para que el SEÑOR libre a Jerusalén de mi mano?"

2 Crónicas 32:9-19

Después de esto, Senaquerib, rey de Asiria, mientras {estaba} sitiando Laquis con todas sus fuerzas, envió a sus siervos a Jerusalén, a Ezequías, rey de Judá, y a todos los de Judá que estaban en Jerusalén, diciendo: Así dice Senaquerib, rey de Asiria, `` ¿En qué estáis confiando para que permanezcáis bajo sitio en Jerusalén? `` ¿No os engaña Ezequías para entregaros a morir de hambre y de sed, diciendo: `El SEÑOR nuestro Dios nos librará de la mano del rey de Asiria'?Leer más.
`` ¿Acaso no es el mismo Ezequías el que ha quitado sus lugares altos y sus altares, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: `Delante de un solo altar adoraréis, y sobre él quemaréis incienso'? `` ¿No sabéis lo que yo y mis padres hemos hecho a todos los pueblos de estas tierras? ¿Pudieron los dioses de las naciones de las tierras librar su tierra de mi mano? `` ¿Quién de entre todos los dioses de aquellas naciones que mis padres destruyeron completamente pudo librar a su pueblo de mi mano, para que vuestro Dios pueda libraros de mi mano? ``Ahora pues, no dejéis que Ezequías os engañe y os extravíe en esta forma, y no creáis en él, porque ningún dios de ninguna nación ni reino pudo librar a su pueblo de mi mano ni de la mano de mis padres. ¡Mucho menos os librará de mi mano vuestro Dios!" Y sus siervos hablaron aún más contra el SEÑOR Dios y contra su siervo Ezequías. También escribió cartas para insultar al SEÑOR, Dios de Israel, y para hablar contra El, diciendo: Como los dioses de las naciones de las tierras no han librado a sus pueblos de mi mano, así el Dios de Ezequías no librará a su pueblo de mi mano. Y proclamaron esto a gran voz en la lengua de Judá al pueblo de Jerusalén que {estaba} sobre la muralla, para espantarlos y aterrorizarlos, para así poder tomar la ciudad. Y hablaron del Dios de Jerusalén como de los dioses de los pueblos de la tierra, obra de manos de hombres.

Isaías 36:1-22

Y aconteció que en el año catorce del rey Ezequías, subió Senaquerib, rey de Asiria, contra todas las ciudades fortificadas de Judá, y las tomó. Y el rey de Asiria envió desde Laquis a Jerusalén, al Rabsaces con un gran ejército, contra el rey Ezequías. Y se colocó junto al acueducto del estanque superior {que está} en la calzada del campo del Batanero. Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, mayordomo de la casa real, el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, salieron a él.Leer más.
Y el Rabsaces les dijo: Decid ahora a Ezequías: ``Así dice el gran rey, el rey de Asiria: ` ¿Qué confianza es ésta que tú tienes? `Yo digo: ``{Tu} consejo y poderío para la guerra sólo son palabras vacías." Ahora pues, ¿en quién confías que te has rebelado contra mí? `He aquí, tú confías en el báculo de esta caña quebrada, {es decir,} en Egipto, en el cual, si un hombre se apoya, penetrará en su mano y la traspasará. Así es Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él. `Pero si me decís: ``Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios," ¿no es El aquel cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: ``Adoraréis delante de este altar"? `Ahora pues, te ruego que llegues a un acuerdo con mi señor el rey de Asiria, y yo te daré dos mil caballos, si por tu parte puedes poner jinetes sobre ellos. ` ¿Cómo, pues, puedes rechazar a un oficial de los menores de los siervos de mi señor, y confiar en Egipto para {tener} carros y hombres de a caballo? ` ¿He subido ahora sin el {consentimiento} del SEÑOR contra esta tierra para destruirla? El SEÑOR me dijo: ``Sube contra esta tierra y destrúyela."'" Entonces Eliaquim, Sebna y Joa dijeron al Rabsaces: Te rogamos que hables a tus siervos en arameo porque nosotros {lo} entendemos, y no nos hables en la lengua de Judá a oídos del pueblo que está sobre la muralla. Pero el Rabsaces dijo: ¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {sólo} a tu señor y a ti, {y} no a los hombres que están sentados en la muralla, {condenados} a comer sus propios excrementos y a beber su propia orina con vosotros? El Rabsaces se puso en pie, gritó a gran voz en la lengua de Judá, y dijo: Escuchad las palabras del gran rey, el rey de Asiria. Así dice el rey: ``Que no os engañe Ezequías, porque él no os podrá librar; ni que Ezequías os haga confiar en el SEÑOR, diciendo: `Ciertamente el SEÑOR nos librará, y esta ciudad no será entregada en manos del rey de Asiria.' ``No escuchéis a Ezequías, porque así dice el rey de Asiria: `Haced la paz conmigo y salid a mí, y coma cada uno de su vid y cada uno de su higuera, y beba cada cual de las aguas de su cisterna, hasta que yo venga y os lleve a una tierra como vuestra tierra, tierra de grano y de mosto, tierra de pan y de viñas.' ``{Cuidado,} no sea que Ezequías os engañe, diciendo: `El SEÑOR nos librará.' ¿Acaso alguno de los dioses de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria? `` ¿Dónde están los dioses de Hamat y de Arfad? ¿Dónde están los dioses de Sefarvaim? ¿Cuándo han librado ellos a Samaria de mi mano? `` ¿Quiénes de entre todos los dioses de estas tierras han librado su tierra de mi mano, para que el SEÑOR libre a Jerusalén de mi mano?" Pero ellos se quedaron callados y no le respondieron palabra alguna; porque el rey había dado un mandato, diciendo: No le respondáis. Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, mayordomo de la casa {real,} el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, fueron a Ezequías con sus vestidos rasgados, y le relataron las palabras del Rabsaces.

2 Reyes 21:1

Manasés {tenía} doce años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y cinco años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Hepsiba.

2 Crónicas 33:1

Manasés {tenía} doce años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y cinco años en Jerusalén.

2 Reyes 23:31-33

Joacaz {tenía} veintitrés años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Hamutal, hija de Jeremías, de Libna. E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, conforme a todo lo que habían hecho sus padres. Y Faraón Necao lo puso en prisión en Ribla, en la tierra de Hamat, para que no reinara en Jerusalén; e impuso una multa sobre la tierra de cien talentos de plata y un talento de oro.

2 Crónicas 36:2-3

Joacaz {tenía} veintitrés años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén. Entonces el rey de Egipto lo destituyó en Jerusalén, e impuso a la tierra una multa de cien talentos de plata y un talento de oro.

2 Reyes 24:18-25

Sedequías {tenía} veintiún años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Hamutal, hija de Jeremías, de Libna. E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, conforme a todo lo que había hecho Joacim. Por causa de la ira del SEÑOR sucedió {esto} en Jerusalén y en Judea, hasta que los echó de su presencia. Y Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia.Leer más.
Y aconteció que en el noveno año de su reinado, en el décimo mes, el {día} diez del mes, vino Nabucodonosor, rey de Babilonia, él y todo su ejército contra Jerusalén, acampó contra ella y construyó un muro de asedio alrededor de ella. Y la ciudad estuvo sitiada hasta el undécimo año del rey Sedequías. A los nueve {días} del mes {cuarto} el hambre era tan grande en la ciudad que no había alimento para el pueblo de la tierra. Y al ser abierta una brecha en la ciudad, todos los hombres de guerra {huyeron} de noche por el camino de la puerta entre las dos murallas, junto al jardín del rey, estando los caldeos alrededor de la ciudad, y se fueron por el camino del Arabá. Pero el ejército de los caldeos persiguió al rey y lo alcanzó en los llanos de Jericó, y todo su ejército se dispersó de su lado.

2 Crónicas 36:11-20

Sedequías {tenía} veintiún años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén. E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR su Dios; y no se humilló delante del profeta Jeremías que le hablaba por boca del SEÑOR. También se rebeló contra el rey Nabucodonosor que le había hecho jurar {fidelidad} por Dios. Pero endureció su cerviz y obstinó su corazón {en vez} de volverse al SEÑOR, Dios de Israel.Leer más.
Asimismo todos los jefes de los sacerdotes y el pueblo fueron infieles en gran manera, {y siguieron} todas las abominaciones de las naciones, y profanaron la casa del SEÑOR que El había consagrado en Jerusalén. Y el SEÑOR, Dios de sus padres, les envió {palabra} repetidas veces por sus mensajeros, porque El tenía compasión de su pueblo y de su morada; pero ellos {continuamente} se burlaban de los mensajeros de Dios, despreciaban sus palabras y se mofaban de sus profetas, hasta que subió el furor del SEÑOR contra su pueblo, y ya no hubo remedio. Entonces El hizo subir contra ellos al rey de los caldeos, que mató a espada a sus jóvenes en la casa de su santuario, y no tuvo compasión del joven ni de la virgen, del viejo ni del débil; a todos ellos {los} entregó en su mano. Y todos los objetos de la casa de Dios, grandes y pequeños, los tesoros de la casa del SEÑOR y los tesoros del rey y de sus oficiales, todo {lo} llevó a Babilonia. Y quemaron la casa de Dios, derribaron la muralla de Jerusalén, prendieron fuego a todos sus palacios y destruyeron todos sus objetos valiosos. Y a los que habían escapado de la espada los llevó a Babilonia; y fueron siervos de él y de sus hijos hasta el dominio del reino de Persia,

Jeremías 39:1-10

Y aconteció que Jerusalén fue tomada en el año noveno de Sedequías, rey de Judá, en el décimo mes, cuando vino Nabucodonosor, rey de Babilonia, con todo su ejército contra Jerusalén, y la sitiaron. En el año undécimo de Sedequías, en el mes cuarto, a los nueve {días} del mes, se abrió brecha {en el muro} de la ciudad. Y entraron todos los oficiales del rey de Babilonia y se sentaron en la puerta Central: Nergal-sarezer, Samgar-nebo, Sarse-quim el Rabsaris, Nergal-sarezer el Rabmag y todos los demás oficiales del rey de Babilonia.Leer más.
Y sucedió que cuando los vieron Sedequías, rey de Judá, y todos los hombres de guerra, huyeron y salieron de la ciudad de noche por el camino del jardín del rey, por la puerta entre los dos muros; y se fueron por el camino del Arabá. Pero el ejército de los caldeos los persiguió, y alcanzaron a Sedequías en los llanos de Jericó; lo apresaron y lo llevaron a Ribla en la tierra de Hamat, donde Nabucodonosor, rey de Babilonia, dictó sentencia contra él. Entonces el rey de Babilonia degolló a los hijos de Sedequías ante sus ojos en Ribla; también el rey de Babilonia degolló a todos los nobles de Judá. Después sacó los ojos a Sedequías y lo ató con grillos de bronce para llevarlo a Babilonia. Y los caldeos prendieron fuego al palacio del rey y a las casas del pueblo y derribaron los muros de Jerusalén. Y en cuanto al resto del pueblo que quedaba en la ciudad, a los desertores que se habían pasado a él, y los demás del pueblo que quedaban, Nabuzaradán, capitán de la guardia, {los} llevó cautivos a Babilonia. Pero a algunos de los más pobres del pueblo que no tenían nada, Nabuzaradán, capitán de la guardia, los dejó en la tierra de Judá, y aquel día les dio viñas y campos.

Jeremías 52:1-16

Sedequías {tenía} veintiún años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén. El nombre de su madre {era} Hamutal, hija de Jeremías, de Libna. El hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR conforme a todo lo que había hecho Joacim. Por causa de la ira del SEÑOR sucedió {esto} en Jerusalén y en Judá, hasta que El los echó de su presencia. Y Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia.Leer más.
Y aconteció que en el año noveno de su reinado, en el mes décimo, a los diez {días} del mes, vino Nabucodonosor, rey de Babilonia, él y todo su ejército, contra Jerusalén y acamparon contra ella, y edificaron un muro de asedio alrededor de ella. Y la ciudad estuvo bajo sitio hasta el año once del rey Sedequías. En el mes cuarto, a los nueve {días} del mes, cuando se agravó el hambre en la ciudad y no había alimento para el pueblo, se abrió brecha en la ciudad, y todos los hombres de guerra huyeron y salieron de la ciudad de noche por el camino de la puerta entre los dos muros que {había} junto al jardín del rey, a pesar de que los caldeos {estaban} alrededor de la ciudad, y se fueron por el camino del Arabá. Pero el ejército de los caldeos persiguió al rey y alcanzó a Sedequías en los llanos de Jericó, y todo su ejército se dispersó de su lado. Entonces capturaron al rey y lo trajeron al rey de Babilonia en Ribla en la tierra de Hamat, y allí él lo sentenció. Y el rey de Babilonia degolló a los hijos de Sedequías ante sus ojos y también degolló a todos los príncipes de Judá en Ribla. Después sacó los ojos a Sedequías, y el rey de Babilonia lo ató con grillos de bronce y lo llevó a Babilonia y lo puso en prisión hasta el día de su muerte. Y en el mes quinto, a los diez {días} del mes, siendo el año diecinueve del rey Nabucodonosor, rey de Babilonia, vino a Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia, que estaba al servicio del rey de Babilonia. Y quemó la casa del SEÑOR, la casa del rey y todas las casas de Jerusalén; prendió fuego a toda casa grande. Y todo el ejército de los caldeos que {estaba} con el capitán de la guardia derribó todas las murallas alrededor de Jerusalén. Entonces Nabuzaradán, capitán de la guardia, llevó al destierro a algunos de los más pobres del pueblo, al resto del pueblo que había quedado en la ciudad, a los desertores que se habían pasado al rey de Babilonia, y al resto de los artesanos. Pero Nabuzaradán, capitán de la guardia, dejó a algunos de los más pobres de la tierra para {que fueran} viñadores y labradores.

2 Crónicas 36:23

Así dice Ciro, rey de Persia: ``El SEÑOR, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha designado para que yo le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá. Quien de entre vosotros sea de su pueblo, el SEÑOR su Dios sea con él, y suba."

Esdras 1:1-4

En el primer año de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la palabra del SEÑOR por boca de Jeremías, el SEÑOR movió el espíritu de Ciro, rey de Persia, y {éste} hizo proclamar por todo su reino y también por escrito, diciendo: Así dice Ciro, rey de Persia: ``El SEÑOR, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y El me ha designado para que le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá. ``El que de entre todos vosotros {pertenezca} a su pueblo, sea su Dios con él. Que suba a Jerusalén, que está en Judá, y edifique la casa del SEÑOR, Dios de Israel; El es el Dios que está en Jerusalén.Leer más.
``Y a todo sobreviviente, en cualquier lugar que habite, que los hombres de aquel lugar lo ayuden con plata y oro, con bienes y ganado, junto con una ofrenda voluntaria para la casa de Dios que está en Jerusalén."

Nehemías 2:1-6

Aconteció que en el mes de Nisán, en el año veinte del rey Artajerjes, {estando ya} el vino delante de él, tomé el vino y se lo di al rey. Yo nunca había estado triste en su presencia, y el rey me dijo: ¿Por qué está triste tu rostro? Tú no estás enfermo; eso no es más que tristeza de corazón. Entonces tuve mucho temor, y dije al rey: Viva para siempre el rey. ¿Cómo no ha de estar triste mi rostro cuando la ciudad, lugar de los sepulcros de mis padres, está desolada y sus puertas han sido consumidas por el fuego?Leer más.
El rey me dijo: ¿Qué es lo que pides? Entonces oré al Dios del cielo, y respondí al rey: Si le place al rey, y si tu siervo ha hallado gracia delante de ti, envíame a Judá, a la ciudad de los sepulcros de mis padres, para que yo la reedifique. Entonces el rey me dijo, estando la reina sentada junto a él: ¿Cuánto durará tu viaje, y cuándo volverás? Y le agradó al rey enviarme, y yo le di un plazo fijo.

Nehemías 1:1-3

Palabras de Nehemías, hijo de Hacalías. Aconteció que en el mes de Quisleu, en el año veinte, estando yo en la fortaleza de Susa, vino Hananí, uno de mis hermanos, con {algunos} hombres de Judá, y les pregunté por los judíos, los que habían escapado {y} habían sobrevivido a la cautividad, y por Jerusalén. Y me dijeron: El remanente, los que sobrevivieron a la cautividad allí en la provincia, están en gran aflicción y oprobio, y la muralla de Jerusalén está derribada y sus puertas quemadas a fuego.

Esdras 3:1

Cuando llegó el mes séptimo, y los hijos de Israel {estaban ya} en las ciudades, el pueblo se reunió como un solo hombre en Jerusalén.

Esdras 4:4-6

Entonces el pueblo de aquella tierra se puso a desanimar al pueblo de Judá, y a atemorizarlos para que dejaran de edificar; y tomaron a sueldo contra ellos consejeros para frustrar sus propósitos, todos los días de Ciro, rey de Persia, hasta el reinado de Darío, rey de Persia. En el reinado de Asuero, al principio de su reinado, escribieron una acusación contra los habitantes de Judá y de Jerusalén.

Esdras 10:7

E hicieron una proclama en Judá y Jerusalén a todos los desterrados para que se reunieran en Jerusalén,

Nehemías 13:6-7

Pero durante todo este {tiempo} yo no estaba en Jerusalén, porque en el año treinta y dos de Artajerjes, rey de Babilonia, yo había ido al rey; pero después de algún tiempo, pedí permiso al rey, y vine a Jerusalén y me enteré del mal que Eliasib había hecho por {favorecer a} Tobías, al prepararle un aposento en los atrios de la casa de Dios.

Mateo 2:1-3

Después de nacer Jesús en Belén de Judea, en tiempos del rey Herodes, he aquí, unos magos del oriente llegaron a Jerusalén, diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle. Cuando {lo} oyó el rey Herodes, se turbó, y toda Jerusalén con él.

Mateo 3:1-6

En aquellos días llegó* Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Porque este es aquel a quien se refirió el profeta Isaías, diciendo: VOZ DEL QUE CLAMA EN EL DESIERTO: ``PREPARAD EL CAMINO DEL SEÑOR, HACED DERECHAS SUS SENDAS."Leer más.
Y él, Juan, tenía un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero a la cintura; y su comida era de langostas y miel silvestre. Acudía entonces a él Jerusalén, toda Judea y toda la región alrededor del Jordán; y confesando sus pecados, eran bautizados por él en el río Jordán.

Never miss a post

Las citas Bíblicas son tomadas de La Biblia de las Américas © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso