45 Versículo de la Biblia sobre Los milagros de Cristo
Versículos Más Relevantes
Y había allí seis tinajas de piedra, puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los Judíos; en cada una cabían dos o tres cántaros (unos 100 litros). Jesús les dijo: ``Llenen de agua las tinajas." Y las llenaron hasta el borde. Entonces les dijo: ``Saquen ahora {un poco} y llévenlo al mayordomo." Y {se} lo llevaron.Leer más.
El mayordomo probó el agua convertida en vino, sin saber de dónde era, pero los que servían, que habían sacado el agua, lo sabían. Entonces el mayordomo llamó al novio, y le dijo: ``Todo hombre sirve primero el vino bueno, y cuando ya han tomado bastante, {entonces} el inferior; {pero} tú has guardado hasta ahora el vino bueno."
Entonces vino otra vez Jesús a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y había {allí} cierto oficial del rey cuyo hijo estaba enfermo en Capernaúm. Cuando él oyó que Jesús había venido de Judea a Galilea, fue a Su encuentro y {Le} suplicaba que bajara y sanara a su hijo, porque estaba al borde de la muerte. Jesús entonces le dijo: ``Si ustedes no ven señales (milagros) y prodigios, no creerán."Leer más.
El oficial del rey Le dijo: ``Señor, baja antes de que mi hijo muera." ``Puedes irte, tu hijo vive," le dijo Jesús. Y el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue. Y mientras bajaba a su casa, sus siervos le salieron al encuentro y le dijeron que su hijo vivía. Entonces les preguntó a qué hora había empezado a mejorar. Y le respondieron: ``Ayer a la una de la tarde (la hora séptima) se le quitó la fiebre." El padre entonces se dio cuenta que {fue} a la hora en que Jesús le dijo: ``Tu hijo vive." Y creyó él con toda su casa.
Al entrar Jesús en Capernaúm, se acercó un centurión y Le suplicó: ``Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, sufriendo mucho." Y Jesús le dijo: ``Yo iré y lo sanaré."Leer más.
Pero el centurión respondió: ``Señor, no soy digno de que Tú entres bajo mi techo; solamente di la palabra y mi criado quedará sano. "Porque yo también soy hombre bajo autoridad, con soldados a mis órdenes; y digo a éste: `Ve,' y va; y al otro: `Ven,' y viene; y a mi siervo: `Haz esto,' y {lo} hace." Al oír{lo} Jesús, se maravilló y dijo a los que {Lo} seguían: ``En verdad les digo que en Israel no he hallado en nadie una fe tan grande. "Y les digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán {a la mesa} con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos. "Pero los hijos del reino serán arrojados a las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes." Entonces Jesús dijo al centurión: ``Vete; así como has creído, te sea hecho." Y el criado fue sanado en esa {misma} hora.
Al terminar de hablar, dijo a Simón: ``Sal a la parte más profunda y echen sus redes para pescar." Simón Le contestó: ``Maestro, hemos estado trabajando toda la noche y no hemos pescado nada, pero porque Tú lo pides (a Tu palabra), echaré las redes." Cuando lo hicieron, encerraron una gran cantidad de peces, de modo que sus redes se rompían.
Y El les dijo: ``Echen la red al lado derecho de la barca y hallarán {pesca."} Entonces la echaron, y no podían sacarla por la gran cantidad de peces.
Al llegar Jesús al otro lado, a la tierra de los Gadarenos, fueron a Su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, violentos en extremo, de manera que nadie podía pasar por aquel camino. Y gritaron: `` ¿Qué {hay} entre Tú y nosotros, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí para atormentarnos antes del tiempo (designado para el juicio)?" A cierta distancia de ellos estaba paciendo una manada de muchos cerdos;Leer más.
y los demonios Le rogaban: ``Si vas a echarnos fuera, mándanos a la manada de cerdos." `` ¡Vayan!" les dijo Jesús. Y ellos salieron y entraron en los cerdos; y la manada entera se precipitó por un despeñadero al mar, y perecieron en las aguas.
Al salir ellos de allí, Le trajeron un mudo endemoniado. Después que el demonio había sido expulsado, el mudo habló; y las multitudes se maravillaban, y decían: ``Jamás se ha visto cosa igual en Israel."
Entonces una mujer Cananea que había salido de aquella región, comenzó a gritar: ``Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí; mi hija está terriblemente endemoniada." Pero El no le contestó nada. Y acercándose Sus discípulos, Le rogaban: ``Atiéndela, pues viene gritando tras nosotros." Y Jesús respondió: ``No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel."Leer más.
Pero acercándose ella, se postró ante El, diciendo: `` ¡Señor, ayúdame!" Y El le dijo: ``No está bien tomar el pan de los hijos, y echár{selo} a los perrillos." Ella respondió: ``Sí, Señor; pero también los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos." Entonces Jesús le dijo: ``Oh mujer, grande es tu fe; que te suceda como deseas." Y su hija quedó sana desde aquel momento.
Cuando llegaron a la multitud, se acercó a Jesús un hombre, que arrodillándose delante de El, dijo: ``Señor, ten misericordia de mi hijo, porque es epiléptico y sufre terriblemente, porque muchas veces cae en el fuego y muchas en el agua. "Lo traje a Tus discípulos y ellos no pudieron curarlo."Leer más.
Jesús respondió: `` ¡Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganmelo acá." Jesús lo reprendió y el demonio salió de él, y el muchacho quedó curado desde aquel momento.
Cuando Jesús llegó a casa de Pedro, vio a la suegra de éste que estaba en cama con fiebre. Le tocó la mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó y Le servía.
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: ``Quiero; sé limpio." Y al instante quedó limpio de su lepra.
Cuando El los vio, les dijo: ``Vayan y muéstrense a los sacerdotes." Y sucedió que mientras iban, quedaron limpios.
Entonces vinieron y Le trajeron un paralítico llevado entre cuatro {hombres.} Como no pudieron acercarse a Jesús a causa de la multitud, levantaron el techo {encima} de donde El estaba; y cuando habían hecho una abertura, bajaron la camilla en que estaba acostado el paralítico. Viendo Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: ``Hijo, tus pecados te son perdonados."Leer más.
Pero estaban allí sentados algunos de los escribas, los cuales pensaban en sus corazones: `` ¿Por qué habla Este así? Está blasfemando; ¿quién puede perdonar pecados, sino sólo Dios?" Al instante Jesús, conociendo en Su espíritu que pensaban de esa manera dentro de sí mismos, les dijo: `` ¿Por qué piensan estas cosas en sus corazones? " ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: `Tus pecados te son perdonados,' o decir{le:} `Levántate, toma tu camilla y anda'? "Pues para que sepan que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados," dijo al paralítico: ``A ti te digo: levántate, toma tu camilla y vete a tu casa." Y él se levantó, y tomando al instante la camilla, salió a la vista de todos, de manera que todos estaban asombrados, y glorificaban a Dios, diciendo: ``Jamás hemos visto cosa semejante."
Y {allí estaba} un hombre que tenía una mano seca (paralizada). Y para poder acusar a Jesús, le preguntaron: `` ¿Es lícito sanar en el día de reposo?" Y El les respondió: `` ¿Qué hombre habrá de ustedes que tenga una sola oveja, si ésta se le cae en un hoyo en el día de reposo, no le echa mano y la saca? "Pues, ¡cuánto más vale un hombre que una oveja! Por tanto, es lícito hacer bien en el día de reposo."Leer más.
Entonces Jesús dijo al hombre: ``Extiende tu mano." Y él la extendió, y le fue restaurada, sana como la otra.
Estaba allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Cuando Jesús lo vio acostado {allí} y supo que ya llevaba mucho tiempo {en aquella condición,} le dijo: `` ¿Quieres ser sano?" El enfermo Le respondió: ``Señor, no tengo a nadie que me meta en el estanque cuando el agua es agitada; y mientras yo llego, otro baja antes que yo."Leer más.
Jesús le dijo: ``Levántate, toma tu camilla y anda." Al instante el hombre quedó sano, y tomó su camilla y comenzó a andar. Pero aquel día era día de reposo.
Mientras Jesús les decía estas cosas, vino un oficial {de la sinagoga} y se postró delante de El, diciendo: ``Mi hija acaba de morir; pero ven y pon Tu mano sobre ella, y vivirá." Levantándose Jesús, lo siguió, {y también} Sus discípulos.
Y cuando se acercaba a la puerta de la ciudad, sacaban fuera a un muerto, hijo único de su madre, y ella era viuda; y un grupo numeroso de la ciudad estaba con ella. Al verla, el Señor tuvo compasión de ella, y le dijo: ``No llores." Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y Jesús dijo: ``Joven, a ti te digo: ¡Levántate!"Leer más.
El que había muerto se incorporó y comenzó a hablar, y Jesús se lo entregó a su madre.
Dijo esto, y después añadió: ``Nuestro amigo Lázaro se ha dormido; pero voy a despertarlo." Los discípulos entonces Le dijeron: ``Señor, si se ha dormido, se recuperará". Jesús había hablado de la muerte de Lázaro, pero ellos creyeron que hablaba literalmente del sueño.Leer más.
Entonces Jesús, por eso, les dijo claramente: ``Lázaro ha muerto; y por causa de ustedes me alegro de no haber estado allí, para que crean; pero vamos a {donde está} él." Tomás, llamado el Dídimo (el Gemelo), dijo entonces a {sus} condiscípulos: ``Vamos nosotros también para morir con El." Llegó, pues, Jesús y halló que ya hacía cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro. Betania estaba cerca de Jerusalén, como a tres kilómetros; y muchos de los Judíos habían venido a {la casa de} Marta y María, para consolarlas por {la muerte de su} hermano. Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, Lo fue a recibir, pero María se quedó sentada en casa. Y Marta dijo a Jesús: ``Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. "Aun ahora, yo sé que todo lo que pidas a Dios, Dios Te lo concederá." ``Tu hermano resucitará," le dijo Jesús. Marta Le contestó: ``Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día final." Jesús le contestó: ``Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en Mí, aunque muera, vivirá, y todo el que vive y cree en Mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?" Ella Le dijo: ``Sí, Señor; yo he creído que Tú eres el Cristo (el Mesías), el Hijo de Dios, {o sea,} el que viene al mundo." Habiendo dicho esto, Marta se fue y llamó a su hermana María, diciéndole en secreto: ``El Maestro está aquí, y te llama." Tan pronto como ella {lo} oyó, se levantó rápidamente y fue hacia El. Porque Jesús aún no había entrado en la aldea, sino que todavía estaba en el lugar donde Marta Lo había encontrado. Entonces los Judíos que estaban con ella en la casa consolándola, cuando vieron que María se levantó de prisa y salió, la siguieron, suponiendo que iba al sepulcro a llorar allí. Al llegar María adonde estaba Jesús, cuando Lo vio, se arrojó a Sus pies, diciendo: ``Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto." Y cuando Jesús la vio llorando, y a los Judíos que vinieron con ella llorando también, se conmovió profundamente en el espíritu, y se entristeció. `` ¿Dónde lo pusieron?" preguntó Jesús. ``Señor, ven y ve," Le dijeron. Jesús lloró. Por eso los Judíos decían: ``Miren, cómo lo amaba." Pero algunos de ellos dijeron: `` ¿No podía Este, que abrió los ojos del ciego, haber evitado también que {Lázaro} muriera?" Entonces Jesús, de nuevo profundamente conmovido, fue al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta sobre ella. ``Quiten la piedra," dijo Jesús. Marta, hermana del que había muerto, Le dijo: ``Señor, ya huele mal, porque hace cuatro días {que murió."} Jesús le dijo: `` ¿No te dije que si crees, verás la gloria de Dios?" Entonces quitaron la piedra. Jesús alzó los ojos, y dijo: ``Padre, Te doy gracias porque Me has oído. "Yo sabía que siempre Me oyes; pero Lo dije por causa de la multitud que {Me} rodea, para que crean que Tú Me has enviado." Habiendo dicho esto, gritó con fuerte voz: `` ¡Lázaro, sal fuera!" Y el que había muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: ``Desátenlo, y déjenlo ir."
Y una mujer que había estado sufriendo de flujo de sangre por doce años, se Le acercó por detrás y tocó el borde de Su manto; pues decía para sí: ``Si tan sólo toco Su manto, sanaré." Pero Jesús, volviéndose y viéndola, dijo: ``Hija, ten ánimo, tu fe te ha sanado." Y al instante la mujer quedó sana.
Al irse Jesús de allí, dos ciegos Lo siguieron, gritando: `` ¡Hijo de David, ten misericordia de nosotros!"
Llegaron a Betsaida, y trajeron a Jesús un ciego y Le rogaron que lo tocara. Tomando al ciego de la mano, lo sacó fuera de la aldea; y después de escupir en sus ojos y de poner las manos sobre él, le preguntó: `` ¿Ves algo?" Y levantando la vista, dijo: ``Veo a los hombres, pero {los} veo como árboles que caminan."Leer más.
Entonces Jesús puso otra vez las manos sobre sus ojos, y él miró fijamente y fue restaurado; y veía todo con claridad.
Al pasar Jesús, vio a un hombre ciego de nacimiento. Y Sus discípulos Le preguntaron: ``Rabí (Maestro), ¿quién pecó, éste o sus padres, para que naciera ciego?" Jesús respondió: ``Ni éste pecó, ni sus padres; sino {que está ciego} para que las obras de Dios se manifiesten en él.Leer más.
"Nosotros debemos hacer las obras del que Me envió mientras es de día; la noche viene cuando nadie puede trabajar. "Mientras estoy en el mundo, Yo soy la Luz del mundo." Habiendo dicho esto, escupió en tierra, e hizo barro con la saliva y le untó el barro en los ojos al ciego, y le dijo: ``Ve {y} lávate en el estanque de Siloé" (que quiere decir Enviado). El ciego fue, pues, y se lavó y regresó viendo.
Y Le trajeron a uno que era sordo y tartamudo, y Le rogaron que pusiera la mano sobre él. Entonces Jesús, tomándolo aparte de la multitud, a solas, le metió los dedos en los oídos, y escupiendo, le tocó la lengua {con la saliva;} y levantando los ojos al cielo, suspiró profundamente y le dijo: `` ¡Effatá!" esto es, `` ¡Abrete!"Leer más.
Al instante se abrieron sus oídos, y desapareció el impedimento de su lengua, y hablaba con claridad.
Al atardecer se acercaron los discípulos, diciendo: ``El lugar está desierto y la hora ya es avanzada; despide, pues, a las multitudes para que vayan a las aldeas y se compren alimentos." Pero Jesús les dijo: ``No hay necesidad de que se vayan; denles ustedes de comer." Entonces ellos dijeron: ``No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces."Leer más.
``Traigan acá los panes y los peces," les dijo. Y ordenando a la muchedumbre que se sentara sobre la hierba, Jesús tomó los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo {los alimentos}. Después partió los panes y se los dio a los discípulos y los discípulos a la multitud. Todos comieron y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos: doce cestas llenas. Y los que comieron fueron unos 5,000 hombres, sin {contar} las mujeres y los niños.
Entonces Jesús, llamando junto a El a Sus discípulos, {les} dijo: ``Tengo compasión de la multitud, porque ya hace tres días que están aquí y no tienen qué comer; y no quiero despedirlos sin comer, no sea que desfallezcan en el camino." Y los discípulos Le dijeron: `` ¿Dónde podríamos conseguir en el desierto tantos panes para saciar a una multitud tan grande?" `` ¿Cuántos panes tienen?" les preguntó Jesús. Ellos respondieron: ``Siete, y unos pocos pececillos."Leer más.
Y El mandó a la multitud que se sentara en el suelo; tomó los siete panes y los peces, y después de dar gracias, {los} partió y empezó a dar{los} a los discípulos, y los discípulos a las multitudes. Comieron todos y se saciaron; y recogieron de lo que sobró de los pedazos, siete canastas llenas. Los que comieron fueron 4,000 hombres, sin {contar} las mujeres y los niños.
A la cuarta vigilia de la noche (3 a 6 a.m.), Jesús vino a ellos andando sobre el mar. Y los discípulos, al ver a Jesús andar sobre el mar, se turbaron, y decían: `` ¡Es un fantasma!" Y de miedo, se pusieron a gritar. Pero enseguida Jesús les dijo: ``Tengan ánimo, soy Yo; no teman."
``Ven," le dijo Jesús. Y descendiendo Pedro de la barca, caminó sobre las aguas, y fue hacia Jesús.
" ¡Fariseo ciego! Limpia primero lo de adentro del vaso y del plato, para que lo de afuera también quede limpio.
Entonces ellos querían recibir a Jesús en la barca, pero la barca llegó enseguida a la tierra adonde iban.
"Sin embargo, para que no los escandalicemos, ve al mar, echa el anzuelo, y toma el primer pez que salga; y cuando le abras la boca hallarás un siclo (salario de cuatro días); tómalo y dáselo por ti y por Mí."
y había {allí} una mujer que durante dieciocho años había tenido una enfermedad causada por un espíritu; estaba encorvada, y de ninguna manera se podía enderezar. Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: ``Mujer, has quedado libre de tu enfermedad." Y puso las manos sobre ella, y al instante se enderezó y glorificaba a Dios.
Y allí, frente a El, estaba un hombre hidrópico. Dirigiéndose Jesús a los intérpretes de la Ley (expertos en la Ley de Moisés) y a los Fariseos, {les} dijo: `` ¿Es lícito sanar en el día de reposo, o no?" Pero ellos guardaron silencio. Y El, tomando al hombre {de la mano,} lo sanó y lo despidió.
Y al ver una higuera junto al camino, se acercó a ella, pero no halló nada en ella sino sólo hojas, y le dijo: ``Nunca jamás brote fruto de ti." Y al instante se secó la higuera.
Y uno de ellos hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús dijo: `` ¡Deténganse! Basta de esto." Y tocando la oreja {al siervo,} lo sanó.
En esa misma hora curó a muchos de enfermedades, aflicciones y malos espíritus, y a muchos ciegos les dio la vista. Entonces El les respondió: ``Vayan y cuenten a Juan lo que han visto y oído: los CIEGOS RECIBEN LA VISTA, los cojos andan, los leprosos quedan limpios y los sordos oyen, los muertos son resucitados {y a} los POBRES SE LES ANUNCIA EL EVANGELIO.
Y Jesús iba por toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio (las buenas nuevas) del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Se extendió Su fama por toda Siria; y traían a El todos los que estaban enfermos, afectados con diversas enfermedades y dolores, los endemoniados, epilépticos y paralíticos, y El los sanaba.
Cuando Jesús desembarcó, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos y sanó a sus enfermos.
Y vinieron a El grandes multitudes trayendo consigo cojos, lisiados, ciegos, mudos y muchos otros {enfermos} y los pusieron a Sus pies y El los sanó;
Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y expulsó muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque ellos sabían quién era El.
Descendió con ellos y se detuvo en un lugar llano. {Había} una gran multitud de Sus discípulos y una gran muchedumbre del pueblo, de toda Judea, de Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón, que habían ido para oír a Jesús y para ser sanados de sus enfermedades; y los que eran atormentados por espíritus inmundos eran curados. Y toda la multitud procuraba tocar a Jesús, porque de El salía un poder que a todos sanaba.
"No está aquí, sino que ha resucitado. Acuérdense cómo les habló cuando estaba aún en Galilea,
"Nadie Me la quita, sino que Yo la doy de Mi propia voluntad. Tengo autoridad para darla, y tengo autoridad para tomarla de nuevo. Este mandamiento recibí de Mi Padre."
Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, y estando cerradas las puertas {del lugar} donde los discípulos se encontraban por miedo a los Judíos, Jesús vino y se puso en medio de ellos, y les dijo: ``Paz a ustedes."
Tópicos sobre Los milagros de Cristo
El asombro, de los milagros de Cristo
Mateo 15:31de modo que la muchedumbre se maravilló al ver que los mudos hablaban, los lisiados quedaban restaurados, los cojos caminaban y los ciegos veían; y glorificaron al Dios de Israel.