30 Versículos de la Biblia sobre la actividad del padre en relación a Dios
Versículos Más Relevantes
Y nosotros hemos visto, y testificamos que el Padre ha enviado a su Hijo para ser Salvador del mundo.
Como me envió el Padre Viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí.
¿a quien el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?
YO SOY el que doy testimonio de mí mismo, y da testimonio de mí el que me envió, el Padre.
Porque yo no he hablado de mí mismo; mas el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar.
Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés pan del cielo; mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.
Respondió Jesús: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria es nada; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios;
Porque él había recibido de Dios el Padre honra y gloria, cuando una tal voz fue a él enviada de la magnífica gloria: Este es el amado Hijo mío, en el cual yo me he agradado.
Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.
Estas cosas habló Jesús, y levantados los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora viene; clarifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te clarifique a ti;
Nadie me la quita, mas yo la pongo de mí mismo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.
y los regirá con vara de hierro, y serán quebrantados como vaso de alfarero, como también yo la he recibido de mi Padre;
sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había salido de Dios, y a Dios iba,
Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que éstas le mostrará; que vosotros os maravillaréis.
Todas las cosas me son entregadas de mi Padre; y nadie conoció al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoció alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar.
Todas las cosas me son entregadas de mi Padre; y nadie sabe quién sea el Hijo sino el Padre; ni quién sea el Padre, sino el Hijo, y a quien el Hijo lo quisiere revelar.
Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así dio también al Hijo que tuviese vida en sí mismo;
Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
Y decía: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado de mi Padre.
Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados de Dios. Así que, todo aquel que oyó del Padre, y aprendió, viene a mí.
Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada de sí mismo, sino lo que viere hacer al Padre; porque todo lo que él hace, esto también hace el Hijo juntamente.
diciendo: Padre, si quieres, pasa este vaso de mí; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.
¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y él me daría más de doce legiones de ángeles?
Entonces quitaron la piedra de donde el muerto había sido puesto. Y Jesús, alzando los ojos arriba, dijo: Padre, gracias te doy que me has oído.
Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? Padre, sálvame de esta hora; mas por esto he venido en esta hora.