17 casos

'Hileras' en la Biblia

y lo llenarás de pedrería con cuatro hileras de piedras. La primera hilera de una piedra sárdica, un topacio y un carbunclo; esta será la primera hilera.

Y engastaron en él cuatro hileras de piedras. La primera hilera era un sardio, un topacio, y un carbunclo; ésta era la primera hilera.

Y las pondrás en dos hileras, seis en cada hilera, sobre la mesa limpia delante de Jehová.

Y edificó el atrio interior de tres hileras de piedras labradas, y de una hilera de vigas de cedro.

Asimismo edificó la casa del bosque del Líbano, la cual tenía cien codos de longitud, y cincuenta codos de anchura, y treinta codos de altura, sobre cuatro hileras de columnas de cedro, con vigas de cedro sobre las columnas.

Y todas las puertas y postes eran cuadrados; y unas ventanas estaban frente a las otras en tres hileras.

Y en el gran atrio alrededor había tres hileras de piedras labradas, y una hilera de vigas de cedro; y así el atrio interior de la casa de Jehová, y el atrio de la casa.

E hizo también dos hileras de granadas alrededor de la red, para cubrir los capiteles que estaban sobre las cabezas de las columnas con las granadas; y de la misma forma hizo en el otro capitel.

Tenían también los capiteles de sobre las dos columnas, doscientas granadas en dos hileras alrededor en cada capitel, encima de la parte abultada del capitel, el cual estaba rodeado por la red.

Y rodeaban aquel mar por debajo de su borde en derredor unas bolas como calabazas, diez en cada codo, que ceñían el mar alrededor en dos hileras, las cuales habían sido fundidas cuando el mar fue fundido.

y cuatrocientas granadas para las dos redes, dos hileras de granadas en cada red, para cubrir los dos tazones redondos que estaban sobre las cabezas de las columnas;

Y debajo de él había figuras de bueyes que lo circundaban, diez en cada codo todo alrededor; dos hileras de bueyes fundidos juntamente con el mar.

cuatrocientas granadas en las dos redecillas, dos hileras de granadas en cada redecilla, para que cubriesen las dos bolas de los capiteles que estaban sobre las columnas.

con tres hileras de piedras grandes, y una hilera de madera nueva y que los gastos sean pagados por la casa del rey.

¿Quién abrirá las puertas de su rostro? Las hileras de sus dientes espantan.

Después que hubiere igualado su superficie, ¿no esparce el eneldo, siembra el comino, pone el trigo por hileras, y la cebada en su lugar, y el centeno en su borde?

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