Parallel Verses
Reina Valera 1909
Dijo más: No podrás ver mi rostro: porque no me verá hombre, y vivirá.
La Biblia de las Américas
Y añadió: No puedes ver mi rostro; porque nadie puede verme, y vivir.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Dijo más: No podrás ver mi faz; porque no me verá hombre, y vivirá.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Y añadió: ``No puedes ver Mi rostro; porque nadie Me puede ver, y vivir."
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Dijo más: No podrás ver mi faz; porque no me verá hombre, y vivirá.
Spanish: Reina Valera Gómez
Dijo más: No podrás ver mi rostro: porque no me verá hombre, y vivirá.
New American Standard Bible
But He said, "You cannot see My face, for no man can see Me and live!"
Artículos
Referencias Cruzadas
Isaías 6:5
Entonces dije: Ay de mí! que soy muerto; que siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
Génesis 32:30
Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar Peniel: porque vi á Dios cara á cara, y fué librada mi alma.
Éxodo 24:10
Y vieron al Dios de Israel; y había debajo de sus pies como un embaldosado de zafiro, semejante al cielo cuando está sereno.
Deuteronomio 5:24
Y dijisteis: He aquí, Jehová nuestro Dios nos ha mostrado su gloria y su grandeza, y hemos oído su voz de en medio del fuego: hoy hemos visto que Jehová habla al hombre, y éste vive.
Jueces 6:22
Y viendo Gedeón que era el ángel de Jehová, dijo: Ah, Señor Jehová, que he visto el ángel de Jehová cara á cara.
Jueces 13:22
Y dijo Manoa á su mujer: Ciertamente moriremos, porque á Dios hemos visto.
Juan 1:18
A Dios nadie le vió jamás: el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le declaró.
1 Timoteo 6:16
Quien sólo tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; á quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver: al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén.
Hebreos 1:13
Pues, ¿á cuál de los ángeles dijo jamás: Siéntate á mi diestra, Hasta que ponga á tus enemigos por estrado de tus pies?
Apocalipsis 1:16-17
Y tenía en su diestra siete estrellas: y de su boca salía una espada aguda de dos filos. Y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.