1 Timoteo 3:2

Un obispo debe ser, pues, irreprochable, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, de conducta decorosa, hospitalario, apto para enseñar,

1 Timoteo 5:9

Que la viuda sea puesta en la lista sólo si no es menor de sesenta años, {habiendo sido} la esposa de un solo marido,

2 Timoteo 2:24

Y el siervo del Señor no debe ser rencilloso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido,

Romanos 12:13

contribuyendo para las necesidades de los santos, practicando la hospitalidad.

1 Pedro 4:9

Sed hospitalarios los unos para con los otros, sin murmuraciones.

Tito 1:6-9

{esto es,} si alguno es irreprensible, marido de una {sola} mujer, que tenga hijos creyentes, no acusados de disolución ni de rebeldía.

Hebreos 13:2

No os olvidéis de mostrar hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.

Isaías 56:10

Sus centinelas son ciegos, ninguno sabe nada. Todos son perros mudos que no pueden ladrar, soñadores acostados, amigos de dormir;

Lucas 1:6

Ambos eran justos delante de Dios, y se conducían intachablemente en todos los mandamientos y preceptos del Señor.

Filipenses 2:15

para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin tacha en medio de una generación torcida y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo,

1 Timoteo 3:10-11

Que también éstos sean sometidos a prueba primero, y si son irreprensibles, que entonces sirvan como diáconos.

1 Timoteo 4:3

prohibiendo casarse {y mandando} abstenerse de alimentos que Dios ha creado para que con acción de gracias participen {de ellos} los que creen y que han conocido la verdad.

Tito 2:2

Los ancianos deben ser sobrios, dignos, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la perseverancia.

Hebreos 3:14

Porque somos hechos partícipes de Cristo, si es que retenemos firme hasta el fin el principio de nuestra seguridad,

1 Pedro 4:7

Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de {espíritu} sobrio para la oración.

1 Pedro 5:8

Sed {de espíritu} sobrio, estad alerta. Vuestro adversario, el diablo, anda {al acecho} como león rugiente, buscando a quien devorar.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido