Jonás 2:6

Descendí hasta las raíces de los montes, La tierra con sus cerrojos me {ponía} cerco para siempre; Pero Tú sacaste de la fosa mi vida, oh SEÑOR, Dios mío.

Job 33:28

El ha redimido mi alma de descender a la fosa, Y mi vida verá la luz.'

Salmos 16:10

Porque Tú no abandonarás mi alma en el Seol, Ni permitirás que Tu Santo sufra corrupción.

Salmos 30:3

Oh SEÑOR, has sacado mi alma del Seol; Me has guardado con vida, para que no descienda al sepulcro.

Isaías 38:17

Por causa de {mi} bienestar tuve gran amargura. Eres Tú quien ha guardado mi alma del abismo de la nada, Porque echaste tras Tus espaldas todos mis pecados.

Deuteronomio 32:22

Porque fuego se ha encendido en Mi ira, Que quema hasta las profundidades del Seol (región de los muertos), Consume la tierra con su fruto, E incendia los fundamentos de los montes.

Job 33:24

Y que tenga piedad de él, y diga: `Líbralo de descender a la fosa, He hallado {su} rescate';

Job 38:4-11

¿Dónde estabas tú cuando Yo echaba los cimientos de la tierra? Dí{melo,} si tienes inteligencia.

Salmos 30:9

`` ¿Qué provecho hay en mi sangre (mi muerte) si desciendo al sepulcro? ¿{Acaso} Te alabará el polvo? ¿Anunciará Tu fidelidad?

Salmos 55:23

Pero Tú, oh Dios, harás caer {a los malvados} en el pozo de la destrucción; Los hombres sanguinarios y engañadores no vivirán la mitad de sus días; Pero yo en Ti confiaré.

Salmos 65:6

El que afirma los montes con Su poder, Ceñido de potencia;

Salmos 104:6

La cubriste con el abismo como con un vestido; Las aguas estaban sobre los montes.

Salmos 104:8

Se levantaron los montes, se hundieron los valles, Al lugar que Tú estableciste para ellos.

Salmos 143:7

Respóndeme pronto, oh SEÑOR, {porque} mi espíritu desfallece; No escondas de mí Tu rostro, Para que no llegue yo a ser como los que descienden a la sepultura.

Proverbios 8:25-29

Antes que los montes fueran asentados, Antes que las colinas, fui engendrada,

Isaías 40:12

¿Quién midió las aguas en el hueco de Su mano, Y con {Su} palmo tomó la medida de los cielos, O con un tercio de medida calculó el polvo de la tierra. Quién pesó los montes con la báscula, Y las colinas con la balanza?

Habacuc 3:6

Se detuvo, e hizo temblar la tierra, Miró e hizo estremecerse a las naciones. Sí, se desmoronaron los montes perpetuos, Se hundieron las colinas antiguas. Sus caminos son eternos.

Habacuc 3:10

Te vieron los montes {y} temblaron, El diluvio de aguas pasó; Dio el abismo su voz, Levantó en alto sus manos.

Hechos 13:33-37

Dios la ha cumplido a nuestros hijos al resucitar a Jesús, como también está escrito en el Salmo segundo: `HIJO MIO ERES TU; YO TE HE ENGENDRADO HOY.'

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso