Lucas 7:24

Y cuando se fueron los mensajeros de Juan, comenzó a decir de Juan a las gentes: ¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Una caña que es agitada por el viento?

Lucas 1:80

Y el niño crecía, y se fortalecía en espíritu; y estuvo en el desierto hasta el día que se mostró a Israel.

Lucas 3:2

siendo sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino palabra de Dios a Juan, hijo de Zacarías, en el desierto.

Efesios 4:14

para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error.

Génesis 49:4

Inestable como las aguas, no serás el principal; por cuanto subiste al lecho de tu padre: Entonces te envileciste, subiendo a mi estrado.

Mateo 3:1-5

En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea,

Mateo 11:7-8

Y yéndose ellos, comenzó Jesús a decir a las multitudes acerca de Juan: ¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?

Marcos 1:4-5

Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo de arrepentimiento para remisión de pecados.

Juan 1:23

Él dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.

2 Corintios 1:17-20

Así que, cuando me propuse esto, ¿usé quizá de ligereza? ¿O lo que me propongo, me propongo según la carne, para que haya en mí Sí, Sí, y No, No?

Santiago 1:6-8

Pero pida en fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es llevada por el viento y echada de una parte a otra.

2 Pedro 2:17

Éstos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tempestad; para los cuales está guardada la oscuridad de las tinieblas para siempre.

2 Pedro 3:17

Así que vosotros, amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que siendo desviados con el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)