43 Versículo de la Biblia sobre Conocimiento de Jesucristo
Versículos Más Relevantes
Jesús le dijo*: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí. Si me hubierais conocido, también hubierais conocido a mi Padre; desde ahora le conocéis y le habéis visto. Felipe le dijo*: Señor, muéstranos al Padre, y nos basta.Leer más.
Jesús le dijo*: ¿Tanto tiempo he estado con vosotros, y {todavía} no me conoces, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo dices tú: ``Muéstranos al Padre"? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os digo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí es el que hace las obras.
Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo {se lo} quiera revelar.
En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. El estaba en el principio con Dios.
Entonces le decían: ¿Dónde está tu Padre? Jesús respondió: No me conocéis a mí ni a mi Padre. Si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre.
Yo les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer, para que el amor con que me amaste esté en ellos y yo en ellos.
El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en El fueron creadas todas las cosas, {tanto} en los cielos {como} en la tierra, visibles e invisibles; ya sean tronos o dominios o poderes o autoridades; todo ha sido creado por medio de El y para El. Y El es antes de todas las cosas, y en El todas las cosas permanecen.Leer más.
El es también la cabeza del cuerpo {que es} la iglesia; y El es el principio, el primogénito de entre los muertos, a fin de que El tenga en todo la primacía. Porque agradó {al Padre} que en El habitara toda la plenitud, y por medio de El reconciliar todas las cosas consigo, habiendo hecho la paz por medio de la sangre de su cruz, por medio de El, {repito,} ya sean las que están en la tierra o las que están en los cielos.
El es el resplandor de su gloria y la expresión exacta de su naturaleza, y sostiene todas las cosas por la palabra de su poder. Después de llevar a cabo la purificación de los pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
y decían a la mujer: Ya no creemos por lo que tú has dicho, porque nosotros mismos {le} hemos oído, y sabemos que éste es en verdad el Salvador del mundo.
Y Jesús, conociendo sus pensamientos, dijo: ¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones? Porque, ¿qué es más fácil, decir: ``Tus pecados te son perdonados", o decir: ``Levántate, y anda"? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados (entonces dijo* al paralítico): Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.Leer más.
Y él levantándose, se fue a su casa. Pero cuando las multitudes vieron {esto,} sintieron temor, y glorificaron a Dios, que había dado tal poder a los hombres.
Y al instante Jesús, conociendo en su espíritu que pensaban de esa manera dentro de sí mismos, les dijo*: ¿Por qué pensáis estas cosas en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: ``Tus pecados te son perdonados", o decir{le:} ``Levántate, toma tu camilla y anda"? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados (dijo* al paralítico):Leer más.
A ti te digo: Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa. Y él se levantó, y tomando al instante la camilla, salió a la vista de todos, de manera que todos estaban asombrados, y glorificaban a Dios, diciendo: Jamás hemos visto cosa semejante.
Conociendo Jesús sus pensamientos, respondió y les dijo: ¿Por qué discurrís en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: ``Tus pecados te son perdonados", o decir: ``Levántate y anda"? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.Leer más.
Y al instante se levantó delante de ellos, tomó {la camilla} en que había estado acostado, y se fue a su casa glorificando a Dios. Y el asombro se apoderó de todos y glorificaban a Dios; y se llenaron de temor, diciendo: Hoy hemos visto cosas extraordinarias.
pero si las hago, aunque a mí no me creáis, creed las obras; para que sepáis y entendáis que el Padre está en mí y yo en el Padre.
Creedme que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí; y si no, creed por las obras mismas.
Cuando venga el Consolador, a quien yo enviaré del Padre, {es decir,} el Espíritu de verdad que procede del Padre, El dará testimonio de mí,
Por tanto, os hago saber que nadie hablando por el Espíritu de Dios, dice: Jesús es anatema; y nadie puede decir: Jesús es el Señor, excepto por el Espíritu Santo.
Este es el que vino mediante agua y sangre, Jesucristo; no sólo con agua, sino con agua y con sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el Espíritu Santo, y estos tres son uno. Y tres son los que dan testimonio en la tierra: el Espíritu, el agua y la sangre, y los tres concuerdan.Leer más.
Si recibimos el testimonio de los hombres, mayor es el testimonio de Dios; porque este es el testimonio de Dios: que El ha dado testimonio acerca de su Hijo.
Yo soy el buen pastor, y conozco mis ovejas y las mías me conocen, de igual manera que el Padre me conoce y yo conozco al Padre, y doy mi vida por las ovejas.
Jesús le dijo*: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí. Si me hubierais conocido, también hubierais conocido a mi Padre; desde ahora le conocéis y le habéis visto. Felipe le dijo*: Señor, muéstranos al Padre, y nos basta.Leer más.
Jesús le dijo*: ¿Tanto tiempo he estado con vosotros, y {todavía} no me conoces, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo dices tú: ``Muéstranos al Padre"? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os digo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí es el que hace las obras. Creedme que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí; y si no, creed por las obras mismas.
Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque os he dado a conocer todo lo que he oído de mi Padre.
{y} conocerle a El, el poder de su resurrección y la participación en sus padecimientos, llegando a ser como El en su muerte,
antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A El {sea} la gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.
Por esta razón también, obrando con toda diligencia, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, perseverancia, y a la perseverancia, piedad, a la piedad, fraternidad y a la fraternidad, amor.Leer más.
Pues estas {virtudes,} al estar en vosotros y al abundar, no os dejarán ociosos ni estériles en el verdadero conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.
a saber, que Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando en cuenta a los hombres sus transgresiones, y nos ha encomendado a nosotros la palabra de la reconciliación. Por tanto, somos embajadores de Cristo, como si Dios rogara por medio de nosotros; en nombre de Cristo os rogamos: ¡Reconciliaos con Dios!
y para reconciliar con Dios a los dos en un cuerpo por medio de la cruz, habiendo dado muerte en ella a la enemistad.
Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, por medio de quien también hemos obtenido entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
porque por medio de El los unos y los otros tenemos nuestra entrada al Padre en un mismo Espíritu.
No se turbe vuestro corazón; creed en Dios, creed también en mí.
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tenéis tribulación; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Porque El mismo es nuestra paz, quien de ambos {pueblos} hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, aboliendo en su carne la enemistad, la ley de {los} mandamientos {expresados} en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un nuevo hombre, estableciendo {así} la paz, y para reconciliar con Dios a los dos en un cuerpo por medio de la cruz, habiendo dado muerte en ella a la enemistad.Leer más.
Y VINO Y ANUNCIO PAZ A VOSOTROS QUE ESTABAIS LEJOS, Y PAZ A LOS QUE ESTABAN CERCA; porque por medio de El los unos y los otros tenemos nuestra entrada al Padre en un mismo Espíritu.
{pidiendo} que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en un mejor conocimiento de El. {Mi oración es que} los ojos de vuestro corazón sean iluminados, para que sepáis cuál es la esperanza de su llamamiento, cuáles son las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,
Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen; y yo les doy vida eterna y jamás perecerán, y nadie las arrebatará de mi mano.
Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna.
y ellos, habiendo llegado a ser insensibles, se entregaron a la sensualidad para cometer con avidez toda clase de impurezas. Pero vosotros no habéis aprendido a Cristo de esta manera, si en verdad lo oísteis y habéis sido enseñados en El, conforme a la verdad que hay en Jesús,Leer más.
que en cuanto a vuestra anterior manera de vivir, os despojéis del viejo hombre, que se corrompe según los deseos engañosos,
para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, {estás} en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.
Si el mundo os odia, sabéis que me ha odiado a mí antes que a vosotros. Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero como no sois del mundo, sino que yo os escogí de entre el mundo, por eso el mundo os odia. Acordaos de la palabra que yo os dije: ``Un siervo no es mayor que su señor." Si me persiguieron a mí, también os perseguirán a vosotros; si guardaron mi palabra, también guardarán la vuestra.Leer más.
Pero todo esto os harán por causa de mi nombre, porque no conocen al que me envió.
Os expulsarán de las sinagogas; pero viene la hora cuando cualquiera que os mate pensará que {así} rinde un servicio a Dios. Y harán estas cosas porque no han conocido ni al Padre ni a mí.
Yo les he dado tu palabra y el mundo los ha odiado, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.
Y en esto sabemos que hemos llegado a conocerle: si guardamos sus mandamientos. El que dice: Yo he llegado a conocerle, y no guarda sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en él verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado. En esto sabemos que estamos en El.Leer más.
El que dice que permanece en El, debe andar como El anduvo.
No todo el que me dice: ``Señor, Señor", entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: ``Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?" Y entonces les declararé: ``Jamás os conocí; APARTAOS DE MI, LOS QUE PRACTICAIS LA INIQUIDAD."
Pero cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los ángeles con El, entonces se sentará en el trono de su gloria; y serán reunidas delante de El todas las naciones; y separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha y los cabritos a su izquierda.Leer más.
Entonces el Rey dirá a los de su derecha: ``Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. ``Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recibisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí." Entonces los justos le responderán, diciendo: ``Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer, o sediento, y te dimos de beber? `` ¿Y cuándo te vimos {como} forastero, y te recibimos, o desnudo, y te vestimos? `` ¿Y cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?" Respondiendo el Rey, les dirá: ``En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, {aun a} los más pequeños, a mí lo hicisteis." Entonces dirá también a los de su izquierda: ``Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno que ha sido preparado para el diablo y sus ángeles. ``Porque tuve hambre, y no me disteis de comer, tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero, y no me recibisteis; estaba desnudo, y no me vestisteis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis." Entonces ellos también responderán, diciendo: ``Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, o sediento, o {como} forastero, o desnudo, o enfermo, o en la cárcel, y no te servimos?" El entonces les responderá, diciendo: ``En verdad os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de los más pequeños de éstos, tampoco a mí lo hicisteis." Y éstos irán al castigo eterno, pero los justos a la vida eterna.
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco vosotros si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer.