38 Versículo de la Biblia sobre la comunión
Versículos Más Relevantes
Por tanto, pruébese cada hombre a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa.
De manera que, cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.
Porque el que come y bebe indignamente, juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor.
Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió, y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.
Y si alguno tuviere hambre, coma en su casa, para que no os juntéis para juicio. Las demás cosas ordenaré cuando llegare.
Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y habiendo dado gracias, lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. Esto es mi cuerpo.
Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros; y muchos duermen.
Porque cada uno toma antes para comer su propia cena; y el uno tiene hambre, y el otro está embriagado.
Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la confraternidad de la sangre del Cristo? El pan que partimos, ¿no es la confraternidad del cuerpo del Cristo?
Porque un pan, significa que muchos somos un cuerpo; pues todos participamos de un pan.
porque os digo que no comeré más de él, hasta que sea cumplido en el Reino de Dios.
y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.
La gracia del Señor Jesús, el Cristo, y la caridad de Dios, y la comunicación del Espíritu Santo sea con todos vosotros. Amén.
Y habiendo cantado un himno, salieron al monte de las Olivas.
Entonces fueron abiertos los ojos de ellos, y le conocieron; mas él se desapareció de los ojos de ellos.
Y tomando el vaso, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de él todos;
¿O pensáis aún que nos excusamos con vosotros? Delante de Dios en Cristo hablamos; mas todo, muy amados, por vuestra edificación.
Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no comiereis la carne del Hijo del hombre, y bebiereis su sangre, no tendréis vida en vosotros.
Porque no somos como muchos, mercaderes falsos de la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de Dios, delante de Dios, hablamos de Cristo.
Porque juntos comunicábamos dulcemente los secretos, en la Casa de Dios andábamos en compañía.
Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, y en la comunión, y en el partimiento del pan, y en las oraciones.
Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el Nuevo testamento en mi sangre; haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí.
Así que, hermanos míos, cuando os juntéis a comer, esperaos unos a otros.
No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis ser partícipes de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios.
Y Jesús les dijo: YO SOY el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
A la verdad, ¿no tenéis casas en que comáis y bebáis? ¿O menospreciáis la Iglesia de Dios, y avergonzáis a los que no tienen? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré? En esto no os alabo.
lo que hemos visto y oído, esto os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y que nuestra comunión sea con el Padre, y con su Hijo Jesús, el Cristo.
Y les dijo: En gran manera he deseado comer con vosotros este cordero de la pascua antes que padezca;
Si nosotros dijéremos que tenemos compañía con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no hacemos verdad;
¿Osa alguno de vosotros, teniendo pleito con otro, ir a juicio delante de los injustos, y no delante de los santos?
El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo que beber nuevo con vosotros en el Reino de mi Padre.
Ninguna cosa dejaréis de él hasta la mañana; y lo que habrá de quedar hasta la mañana, habéis de quemarlo en el fuego.
Yo fui en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,
Tópicos sobre La comunión
La comunión con Dios, ejemplos de
Génesis 5:24Y anduvo Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.
La comunión de los Santos
Salmos 133:1Canción de las gradas: de David. ¡Mirad cuán bueno y cuán suave es habitar los hermanos igualmente en uno!
Los Santos, la comunión con Dios
Salmos 42:1Al Vencedor: Masquil a los hijos de Coré. Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía.