30 Versículo de la Biblia sobre santificar a las personas
Versículos Más Relevantes
Habla, pues, tú a los hijos de Israel, diciendo: ``De cierto guardaréis mis días de reposo, porque {esto} es una señal entre yo y vosotros por todas vuestras generaciones, a fin de que sepáis que yo soy el SEÑOR que os santifico.
``Guardad mis estatutos y cumplidlos. Yo soy el SEÑOR que os santifico.
para que no profane a su descendencia entre su pueblo; porque yo soy el SEÑOR que lo santifico."
sólo que no ha de entrar hasta el velo o acercarse al altar, porque tiene defecto, para que no profane mis santuarios; porque yo soy el SEÑOR que los santifico."
causándoles {así} sufrir castigo por la culpa al comer sus cosas sagradas; porque yo soy el SEÑOR que los santifico."
No profanaréis mi santo nombre, sino que seré santificado entre los hijos de Israel; yo soy el SEÑOR que os santifico,
`También les di mis días de reposo por señal entre ellos y yo, para que supieran que yo soy el SEÑOR, el que los santifica.
``Guardarán, pues, mi ordenanza para que no se carguen de pecado por ello, y mueran porque la profanen; yo soy el SEÑOR que los santifico.
``Santificaos, pues, y sed santos, porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
``Serán santos a su Dios y no profanarán el nombre de su Dios, porque presentarán las ofrendas encendidas al SEÑOR, el alimento de su Dios; por tanto, serán santos.
``No tomarán mujer {que haya sido} profanada como ramera, ni tomarán mujer divorciada de su marido; porque el sacerdote es santo a su Dios.
Tus testimonios son muy fidedignos; la santidad conviene a tu casa, eternamente, oh SEÑOR.
`Y las naciones sabrán que yo, el SEÑOR, santifico a Israel, cuando mi santuario esté en medio de ellos para siempre.'"
Y me dijo: Este es el lugar donde los sacerdotes cocerán la ofrenda por la culpa y la ofrenda por el pecado, {y} donde cocerán la ofrenda de cereal, para que no tengan que sacar{las} al atrio exterior, y santifiquen {así} al pueblo.
reunid al pueblo, santificad la asamblea, congregad a los ancianos, reunid a los pequeños y a los niños de pecho. Salga el novio de su aposento y la novia de su alcoba.
Conságrame todo primogénito; el primer nacido de toda matriz entre los hijos de Israel, tanto de hombre como de animal, me pertenece.
(como está escrito en la Ley del Señor: TODO VARON QUE ABRA LA MATRIZ SERA LLAMADO SANTO PARA EL SEÑOR),
El SEÑOR dijo también a Moisés: Ve al pueblo y conságralos hoy y mañana, y que laven sus vestidos;
Y Moisés bajó del monte al pueblo, y santificó al pueblo; y ellos lavaron sus vestidos.
Y di al pueblo: ``Consagraos para mañana, y comeréis carne, pues habéis llorado a oídos del SEÑOR, diciendo: ` ¿Quién nos diera a comer carne! Porque nos iba mejor en Egipto.' El SEÑOR, pues, os dará carne y comeréis.
Levántate, consagra al pueblo y di: ``Consagraos para mañana, porque así ha dicho el SEÑOR, Dios de Israel: `Hay anatema en medio de ti, oh Israel. No podrás hacer frente a tus enemigos hasta que quitéis el anatema de en medio de vosotros.'
Entonces Josué dijo al pueblo: Consagraos, porque mañana el SEÑOR hará maravillas entre vosotros.
Antes que yo te formara en el seno materno, te conocí, y antes que nacieras, te consagré, te puse por profeta a las naciones.
Y vestirás con ellos a tu hermano Aarón y a sus hijos con él; y los ungirás y ordenarás y consagrarás para que me sirvan como sacerdotes.
Esto es lo que les harás para consagrarlos para que me sirvan como sacerdotes: toma un novillo y dos carneros sin defecto;
Y derramó del aceite de la unción sobre la cabeza de Aarón y lo ungió, para consagrarlo. Luego Moisés hizo que los hijos de Aarón se acercaran y los vistió con túnicas, los ciñó con cinturones, y les ajustó las tiaras tal como el SEÑOR había ordenado a Moisés.
Después tomarás de la sangre que está sobre el altar y del aceite de la unción, y {lo} rociarás sobre Aarón y sobre sus vestiduras, y sobre sus hijos y sobre las vestiduras de sus hijos; y quedarán consagrados él y sus vestiduras, y también sus hijos y las vestiduras de sus hijos con él.
Y vestirás a Aarón con las vestiduras sagradas, lo ungirás y lo consagrarás para que me sirva como sacerdote.
También que se santifiquen los sacerdotes que se acercan al SEÑOR, no sea que el SEÑOR irrumpa contra ellos.
Y sucedía que cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba {a buscarlos} y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos {conforme} al número de todos ellos. Porque Job decía: Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones. Así hacía Job siempre.