'Estaban' en la Biblia
Aquel mismo día, dio órdenes Faraón a los capataces que estaban sobre el pueblo, y a sus jefes, diciendo:
Los jefes de los hijos de Israel se dieron cuenta de que estaban en dificultades, cuando les dijeron: No debéis disminuir {vuestra} cantidad diaria de ladrillos.
Y al salir de la presencia de Faraón, se encontraron con Moisés y Aarón, que los estaban esperando.
Y los magos no podían estar delante de Moisés a causa de los furúnculos, pues los furúnculos estaban tanto en los magos como en todos los egipcios.
Sólo en la tierra de Gosén, donde {estaban} los hijos de Israel, no hubo granizo.
Salió Moisés a recibir a su suegro, se inclinó y lo besó; y se preguntaron uno a otro cómo estaban, y entraron en la tienda.
Entonces se volvió Moisés y descendió del monte con las dos tablas del testimonio en su mano, tablas escritas por ambos lados; por uno y por el otro estaban escritas.
Y el SEÑOR dijo a Moisés: Lábrate dos tablas de piedra como las anteriores, y yo escribiré sobre las tablas las palabras que estaban en las primeras tablas que tú quebraste.
Y todos los hombres hábiles de entre los que estaban haciendo la obra hicieron el tabernáculo con diez cortinas de lino fino torcido, y {tela} azul, púrpura y escarlata, con querubines, obra de hábil artífice; {Bezaleel} las hizo.
Eran dobles por abajo y estaban unidas por arriba hasta la primera argolla; así hizo con las dos para las dos esquinas.
Y los querubines tenían extendidas las alas hacia arriba, cubriendo el propiciatorio con sus alas, uno frente al otro; los rostros de los querubines estaban {vueltos} hacia el propiciatorio.
Y fundió para ella cuatro argollas de oro, y puso las argollas en las cuatro esquinas que estaban sobre sus cuatro patas.
Cerca del borde estaban las argollas donde se metían las varas para llevar la mesa.
Hizo también los utensilios que estaban en la mesa: sus fuentes, sus vasijas, sus tazones y sus jarros, con los cuales hacer las libaciones; {todo} de oro puro.
Y metió las varas por las argollas {que estaban} en los lados del altar, para transportarlo. Lo hizo hueco, de tablas.
y la cuarta hilera, un berilo, un ónice y un jaspe. Estaban montadas en engaste de filigrana de oro.