'Hombre' en la Biblia

Ten misericordia de mí, oh Dios, porque me devoraría el hombre; me oprime combatiéndome cada día.

En Dios, cuya palabra alabo, en Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

En Dios he confiado; no temeré lo que el hombre me pueda hacer.

Entonces dirá el hombre: Ciertamente hay fruto para el justo; ciertamente hay Dios que juzga en la tierra.

Danos ayuda contra el adversario, pues vano es el auxilio del hombre.

¿Hasta cuándo maquinaréis contra un hombre? Pereceréis todos vosotros, Caeréis como pared acostada, como cerca ruinosa.

y tuya es, oh Señor, la misericordia, pues tú pagas al hombre conforme a sus obras.

Traman injusticias, {diciendo:} Estamos listos con una trama bien concebida; pues los pensamientos del hombre y {su} corazón son profundos.

¿Oh tú, que escuchas la oración! Hasta ti viene todo hombre.

Ciertamente la ira del hombre te acarreará alabanza; tú reprimirás el resto de las iras.

Pan de fuertes comió el hombre; les envió comida en abundancia.

Sea tu mano sobre el varón de tu diestra, sobre el hijo del hombre que corroboraste para ti.

Dichoso el hombre que tiene su fortaleza en ti; en cuyo corazón están tus caminos.

SEÑOR de los ejércitos, dichoso el hombre que confía en ti.

Soy contado con los que descienden al hoyo, soy como hombre sin fuerza;

Acuérdate de cuán corto sea mi tiempo. ¿Por qué creaste sujetos a vanidad a todos los hijos del hombre?

¿Qué hombre vivirá y no verá muerte? ¿Librarás su alma de la mano del Seol? (Selah.)

Oración de Moisés, hombre de Dios.Señor, tú has sido un refugio para nosotros de generación en generación.

Vuelves al hombre hasta ser quebrantado, y dices: Convertíos, hijos de Adán.

El hombre necio no sabe, y el loco no entiende esto:

El que castiga a los gentiles, ¿no reprenderá? ¿No sabrá el que enseña al hombre la ciencia?

El SEÑOR conoce los pensamientos del hombre, {sabe} que son {sólo} un soplo.

Bienaventurado el hombre á quien tú, JAH, castigares, Y en tu ley lo instruyeres;

El hombre, como la hierba son sus días, Florece como la flor del campo.

El que hace producir el heno para las bestias, y la hierba para el servicio del hombre; sacando el pan de la tierra.

Y el vino que alegra el corazón del hombre; haciendo relumbrar el rostro con el aceite, y el pan que sustenta el corazón del hombre.

Sale el hombre a su hacienda, y a su labranza hasta la tarde.

No consintió que hombre los agraviara; y por causa de ellos castigó los reyes.

Envió a un hombre delante de ellos, a José, vendido como esclavo.

Danos socorro en la angustia; porque mentirosa es la salvación del hombre.

Por cuanto no se acordo de hacer misericordia, Y persiguió al hombre afligido y menesteroso Y quebrantado de corazón, para matar lo.

Aleluya. BIENAVENTURADO el hombre que teme á Jehová, Y en sus mandamientos se deleita en gran manera.

El hombre de bien tiene misericordia y presta; Gobierna sus cosas con juicio.

Los ídolos de ellos son plata y oro, obra de manos de hombre.

Y dije en mi apresuramiento: Todo hombre es mentiroso.

El SEÑOR está por mí; no temeré lo que me pueda hacer el hombre.

Mejor es esperar en el SEÑOR que esperar en hombre.

Rescátame de la opresión del hombre, para que yo guarde tus preceptos.

Bienaventurado el hombre que hinchió su aljaba de ellos: No será avergonzado Cuando hablare con los enemigos en la puerta.

He aquí que así será bendito el hombre Que teme á Jehová.

El que hirió a los primogénitos de Egipto, desde el hombre hasta la bestia.

Los ídolos de las naciones son plata y oro, obra de manos de hombre.

Líbrame, oh SEÑOR, del hombre malo; de varón de violencia me guarde.

Guárdame, oh Jehová, de manos del impío, Presérvame del hombre injurioso; Que han pensado de trastornar mis pasos.

El hombre deslenguado no será firme en la tierra: El mal cazará al hombre injusto para derribarle.

Oh SEÑOR, ¿qué es el hombre, que lo conoces? ¿O el hijo del hombre, para que lo estimes?

El hombre es semejante a la vanidad; sus días son como la sombra que pasa.

Para notificar á los hijos de los hombre sus valentías, Y la gloria de la magnificencia de su reino.

No confiéis en los príncipes, ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación.

No toma contentamiento en la fortaleza del caballo, Ni se complace en las piernas del hombre.

para librarte del mal camino, del hombre que habla perversidades;

Bienaventurado el hombre que halló la sabiduría, y que saca a luz la inteligencia;

No envidies al hombre injusto, ni escojas alguno de sus caminos.

porque el {hombre} perverso es abominación para el SEÑOR; pero El es amigo íntimo de los rectos.

Pues que los caminos del hombre están ante los ojos del SEÑOR, ¡y él pesa todas sus veredas!

así vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre de escudo.

El hombre de Belial es varón inicuo, anda en perversidad de boca;

porque a causa de la mujer ramera es reducido el hombre a un bocado de pan; y la mujer caza la preciosa alma del varón.

¿Tomará el hombre fuego en su seno, sin que sus vestidos se quemen?

¿Andará el hombre sobre las brasas, sin que sus pies se quemen?

Porque los celos son el furor del hombre, Y no perdonará en el día de la venganza.

Bienaventurado el hombre que me oye, trasnochando a mis puertas cada día, guardando los umbrales de mis entradas.

El que recoge en el estío es hombre entendido: El que duerme en el tiempo de la siega es hombre afrentoso.

Hacer abominación es como risa al insensato: Mas el hombre entendido sabe.

Cuando muere el hombre impío, perece su esperanza; y la esperanza de los malos perecerá.

El que carece de entendimiento, menosprecia a su prójimo; mas el hombre inteligente calla.

A su alma hace bien el hombre misericordioso; mas el cruel atormenta su carne.

El bueno alcanzará favor del SEÑOR; mas él condenará al hombre de malos pensamientos.

El hombre no se afirmará por medio de la impiedad; mas la raíz de los justos no será movida.

Según su sabiduría es alabado el hombre; mas el perverso de corazón será menospreciado.

El hombre será saciado de bien del fruto de su boca; y la paga de las manos del hombre le será dada.

El hombre cuerdo encubre su sabiduría; mas el corazón de los locos publica la locura.

El cuidado congojoso en el corazón del hombre, lo abate; mas la buena palabra lo alegra.

El engañoso ni aun asará su caza; mas el haber del hombre diligente es precioso.

Del fruto de su boca el hombre comerá bien; mas el alma de los prevaricadores morirá de hambre.

El rescate de la vida del hombre son sus riquezas; pero el pobre no oye censuras.

Todo hombre cuerdo obra con sabiduría; mas el loco manifestará su locura.

El hombre bueno deja herencia a los hijos de sus hijos, pero la riqueza del pecador está reservada para el justo.

El burlador buscó la sabiduría, y no la halló; mas la sabiduría al hombre entendido viene fácil.

Vete de delante del hombre loco, pues no le conociste labios de ciencia.

Hay camino que al hombre parece derecho; pero su fin es camino de muerte.

De sus caminos será harto el desviado de corazón; y el hombre de bien será apartado de él.

El que presto se enoja, hará locura; y el hombre malicioso será aborrecido.

El hombre iracundo revolverá contiendas; mas el que tarde se enoja, apaciguará la rencilla.

El hijo sabio alegra al padre; mas el hombre loco menosprecia a su madre.

La locura es alegría al falto de entendimiento; mas el hombre inteligente enderezará su caminar.

El hombre se alegra con la respuesta de su boca; y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es!

Del hombre son las preparaciones del corazón; mas del SEÑOR la respuesta de la lengua.

Todos los caminos del hombre son limpios en su opinión; mas el SEÑOR pesa los espíritus.

Con misericordia y verdad se expía la culpa, y con el temor del SEÑOR {el hombre} se aparta del mal.

Cuando los caminos del hombre son agradables al SEÑOR, aun a sus enemigos hacen estar en paz con él.

El corazón del hombre piensa su camino; mas el SEÑOR endereza sus pasos.

La ira del rey es mensajero de muerte; mas el hombre sabio la evitará.

Hay camino que es derecho al parecer del hombre, mas su salida son caminos de muerte.

El hombre de Belial cava en busca del mal; y en sus labios hay como llama de fuego.

El hombre perverso levanta contienda; y el chismoso aparta los príncipes.

El hombre malo lisonjea a su prójimo, y le hace andar por el camino no bueno;

Aprovecha la reprensión al hombre entendido, más que cien azotes al necio.

Mejor es que se encuentre un hombre con una osa a la cual han robado sus cachorros, que con un loco en su locura.

El hombre falto de entendimiento toca la mano, fiando a otro delante de su amigo.