'Lepra' en la Biblia
Y ella dijo a su señora: ¡Ah, si mi señor estuviera con el profeta que está en Samaria! El entonces lo curaría de su lepra.
También llevó al rey de Israel la carta que decía: Y ahora, cuando llegue a ti esta carta, he aquí, {verás} que te he enviado a mi siervo Naamán para que lo cures de su lepra.
Y sucedió que cuando el rey de Israel leyó la carta, rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Acaso soy yo Dios, para dar muerte y para dar vida, para que éste me mande {a decir} que cure a un hombre de su lepra? Pero considerad ahora, y ved cómo busca pleito conmigo.
Pero Naamán se enojó, y se iba diciendo: He aquí, yo pensé: ``Seguramente él vendrá a mí, y se detendrá e invocará el nombre del SEÑOR su Dios, moverá su mano sobre la parte {enferma} y curará la lepra."
Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tus descendientes para siempre. Y él salió de su presencia leproso, {blanco} como la nieve.