'Saúl' en la Biblia
Pero el rey perdonó a Mefiboset, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, a causa del pacto del SEÑOR que había entre ellos, entre David y Jonatán, hijo de Saúl.
El rey tomó a los dos hijos de Rizpa, hija de Aja, Armoni y Mefiboset, que ella había dado a Saúl, y a los cinco hijos de Merab, hija de Saúl, que ella había dado a Adriel, hijo de Barzilai meholatita,
Cuando le fue contado a David lo que Rizpa, hija de Aja, concubina de Saúl, había hecho,
David fue y recogió los huesos de Saúl y los huesos de Jonatán su hijo {en posesión} de los hombres de Jabes de Galaad, quienes los habían robado de la plaza de Bet-sán, donde los filisteos los habían colgado el día que los filisteos mataron a Saúl en Gilboa,
y trajo de allí los huesos de Saúl y los huesos de su hijo Jonatán, y recogieron los huesos de los ahorcados.
Y sepultaron los huesos de Saúl y de su hijo Jonatán en tierra de Benjamín, en Zela, en el sepulcro de su padre Cis, e hicieron todo lo que el rey había ordenado; después de esto Dios fue movido a misericordia para con la tierra.
Habló David las palabras de este cántico al SEÑOR el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos y de la mano de Saúl.
Cuando murió Samla, reinó en su lugar Saúl de Rehobot, {que está} junto al río.
Cuando murió Saúl, reinó en su lugar Baal-hanán, hijo de Acbor.
Los hijos de Simeón {fueron} Nemuel, Jamín, Jarib, Zera, Saúl;
En los días de Saúl hicieron guerra contra los agarenos, los cuales cayeron en sus manos, de modo que ellos ocuparon sus tiendas por toda la tierra al oriente de Galaad.
Ner engendró a Cis, Cis engendró a Saúl y Saúl engendró a Jonatán, Malquisúa, Abinadab y Es-baal.
Ner engendró a Cis, Cis engendró a Saúl y Saúl engendró a Jonatán, Malquisúa, Abinadab y Es-baal.
Los filisteos persiguieron muy de cerca a Saúl y a sus hijos, y mataron a Jonatán, a Abinadab y a Malquisúa, hijos de Saúl.
Y arreció la batalla contra Saúl, los arqueros lo alcanzaron y fue herido por ellos.
Entonces Saúl dijo a su escudero: Saca tu espada y traspásame con ella, no sea que vengan estos incircuncisos y hagan burla de mí. Pero su escudero no quiso, porque tenía mucho miedo. Por lo cual Saúl tomó su espada y se echó sobre ella.
Al ver su escudero que Saúl había muerto, él también se echó sobre su espada y murió.
Así murió Saúl con sus tres hijos, y todos {los} de su casa murieron juntamente con él.
Cuando todos los hombres de Israel que {estaban} en el valle, vieron que ellos habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y huyeron; entonces los filisteos vinieron y habitaron en ellas.
Y sucedió que al día siguiente, cuando vinieron los filisteos para despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus hijos caídos en el monte Gilboa.
Cuando oyeron los de Jabes de Galaad todo lo que los filisteos habían hecho a Saúl,
se levantaron todos los hombres valientes y se llevaron el cuerpo de Saúl y los cuerpos de sus hijos, los trajeron a Jabes y enterraron sus huesos bajo la encina en Jabes, y ayunaron siete días.
Así murió Saúl por la transgresión que cometió contra el SEÑOR por no haber guardado la palabra del SEÑOR, y también porque consultó y pidió consejo a una médium,
Ya de antes, cuando Saúl aún era rey, {eras} tú el que sacabas y el que volvías a traer a Israel. Y el SEÑOR tu Dios te dijo: ``Tú pastorearás a mi pueblo Israel, y serás príncipe sobre mi pueblo Israel."
Y estos son los que vinieron a David en Siclag, mientras aún se ocultaba por causa de Saúl, hijo de Cis. Eran de los hombres valientes que {le} ayudaron en la guerra.
Estaban armados con arcos, y usaban tanto la mano derecha como la izquierda {para lanzar} piedras y {tirar} flechas con el arco. {Eran} parientes de Saúl de Benjamín.
Algunos de Manasés se pasaron también a David, cuando éste iba con los filisteos a la batalla contra Saúl. Pero {éstos} no les ayudaron, porque los príncipes de los filisteos, después de tomar consejo, lo despidieron, diciendo: A costa de nuestras cabezas se pasará a su señor Saúl.
Y estos son los números de los escuadrones equipados para la guerra, que vinieron a David en Hebrón para transferirle el reino de Saúl, conforme a la palabra del SEÑOR:
De los hijos de Benjamín, parientes de Saúl, tres mil; porque hasta entonces la mayor parte de ellos habían permanecido fieles a la casa de Saúl.
y traigamos a nuestro lado el arca de nuestro Dios, porque no la consultamos en los días de Saúl.
Y sucedió que cuando el arca del pacto del SEÑOR entró en la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, miró por la ventana, y vio al rey David saltando y regocijándose; y lo despreció en su corazón.
Y todo lo que había consagrado el vidente Samuel, y Saúl, hijo de Cis, y Abner, hijo de Ner, y Joab, hijo de Sarvia, todo lo consagrado {estaba} a cargo de Selomit y sus parientes.
Para el director del coro. {Salmo} de David, siervo del SEÑOR, el cual dirigió al SEÑOR las palabras de este cántico el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl. Y dijo:Yo te amo, SEÑOR, fortaleza mía.
Para el director del coro. Masquil de David, cuando fue Doeg el edomita e informó a Saúl, diciéndole: David está en casa de Ahimelec. ¿Por qué te jactas del mal, oh poderoso? La misericordia de Dios es continua.
Para el director del coro; con instrumentos de cuerda. Masquil de David, cuando los zifeos vinieron y dijeron a Saúl: ¿No está David escondido entre nosotros? ¿Sálvame! Oh Dios, por tu nombre, y hazme justicia con tu poder.
Para el director del coro; {según tonada de} No destruyas. Mictam de David, en la cueva, cuando huía de Saúl.Ten piedad de mí, oh Dios, ten piedad de mí, porque en ti se refugia mi alma; en la sombra de tus alas me ampararé hasta que la destrucción pase.
Para el director del coro; {según tonada de} No destruyas. Mictam de David, cuando Saúl envió {hombres} y vigilaron la casa para matarlo.Líbrame de mis enemigos, Dios mío; ponme {a salvo} en lo alto, lejos de los que se levantan contra mí.
Han pasado por el desfiladero, {diciendo:} Geba será nuestro alojamiento. Ramá está aterrada, y Guibeá de Saúl ha huido.
Entonces ellos pidieron un rey, y Dios les dio a Saúl, hijo de Cis, varón de la tribu de Benjamín, durante cuarenta años.