Parallel Verses
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Y no los hirieron los hijos de Israel, por cuanto los príncipes de la congregación les habían jurado por el SEÑOR el Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los príncipes.
La Biblia de las Américas
Los hijos de Israel no los mataron porque los jefes de la congregación les habían jurado por el SEÑOR, Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los jefes.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Y no los hirieron los hijos de Israel, por cuanto los príncipes de la congregación les habían jurado por el SEÑOR el Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los príncipes.
Reina Valera 1909
Y no los hirieron los hijos de Israel, por cuanto los príncipes de la congregación les habían jurado por Jehová el Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los príncipes.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Los Israelitas no los mataron porque los jefes de la congregación les habían hecho un juramento por el SEÑOR, Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los jefes.
Spanish: Reina Valera Gómez
Y no los hirieron los hijos de Israel, por cuanto los príncipes de la congregación les habían jurado por Jehová el Dios de Israel. Y toda la congregación murmuraba contra los príncipes.
New American Standard Bible
The sons of Israel did not strike them because the leaders of the congregation had sworn to them by the LORD the God of Israel. And the whole congregation grumbled against the leaders.
Referencias Cruzadas
Salmos 15:4
Aquel a cuyos ojos es menospreciado el vil; mas honra a los que temen al SEÑOR; juró en daño suyo , y no mudó.
2 Samuel 21:7
Y el rey perdonó a Mefi-boset, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, por el juramento del SEÑOR que hubo entre ellos, entre David y Jonatán hijo de Saúl.
Eclesiastés 5:2
No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras.
Eclesiastés 5:6
No sueltes tu boca para hacer pecar a tu carne; ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se aíre a causa de tu voz, y que destruya la obra de tus manos?
Eclesiastés 9:2
Todo acontece de la misma manera a todos; un mismo suceso tiene el justo y el impío; el bueno y el limpio y el no limpio; el que sacrifica, y el que no sacrifica; como el bueno, así el que peca; el que jura, como el que teme el juramento.