1 El hijo sabio {acepta} la disciplina de {su} padre, pero el escarnecedor no escucha la reprensión.
2 Del fruto de su boca el hombre comerá el bien, pero el deseo de los pérfidos es la violencia.
4 El alma del perezoso desea, pero nada {consigue,} mas el alma de los diligentes queda satisfecha.
7 Hay quien pretende ser rico, y nada tiene; hay {quien} pretende ser pobre, y tiene una gran fortuna.
10 Por la soberbia sólo viene la contienda, mas con los que reciben consejos está la sabiduría.
11 La fortuna {obtenida} con fraude disminuye, pero el que la recoge con trabajo {la} aumenta.
13 El que desprecia la palabra pagará por ello, pero el que teme el mandamiento será recompensado.
18 Pobreza y vergüenza {vendrán} al que menosprecia la instrucción, mas el que acepta la reprensión será honrado.
19 Deseo cumplido es dulzura para el alma, pero abominación para los necios es apartarse del mal.
22 El hombre bueno deja herencia a los hijos de sus hijos, pero la riqueza del pecador está reservada para el justo.