19 Versículos de la Biblia sobre Afligidos, los ejemplos de los Santos
Versículos Más Relevantes
Y tomó su señor a José, y le puso en la casa de la cárcel, donde estaban los presos del rey, y estuvo allí en la casa de la cárcel. Mas el SEÑOR fue con José, y extendió a él su misericordia, y le dio gracia en ojos del príncipe de la casa de la cárcel. Y el príncipe de la casa de la cárcel entregó en mano de José todos los presos que había en aquella prisión; todo lo que hacían allí, él lo hacía.Leer más.
No veía el príncipe de la cárcel cosa alguna que en su mano estaba; porque el SEÑOR era con él, y lo que él hacía, el SEÑOR lo prosperaba.
Envió un varón delante de ellos, a José, que fue vendido por siervo. Afligieron sus pies con grillos; en hierro fue puesta su alma. Hasta la hora que llegó su palabra, el dicho del SEÑOR le purificó.
escogiendo antes ser afligido con el pueblo de Dios, que gozar de comodidades temporales de pecado.
Y Samuel se lo manifestó todo, sin encubrirle nada. Entonces él dijo: El SEÑOR es; haga lo que bien le pareciere.
Y fue que, cuando yo oí estas palabras, me senté y lloré, y me enluté por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.
Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y trasquiló su cabeza, y cayendo en tierra adoró; y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo tornaré allá. El SEÑOR dio, y el SEÑOR quitó; sea el nombre del SEÑOR bendito. En todo esto no pecó Job, ni atribuyó locura a Dios.
Y Natán se volvió a su casa. Y el SEÑOR hirió al niño que la mujer de Urías había dado a luz a David, y enfermó gravemente. Entonces rogó David a Dios por el niño; y ayunó David, y vino, y pasó la noche acostado en tierra. Y levantándose los ancianos de su casa fueron a él para hacerlo levantar de tierra; mas él no quiso, ni comió con ellos pan.Leer más.
Y al séptimo día murió el niño; pero sus siervos no osaban hacerle saber que el niño era muerto, diciendo entre sí : Cuando el niño aun vivía, le hablábamos, y no quería oír nuestra voz; ¿pues cuánto más mal le hará, si le dijéremos que el niño es muerto? Mas David viendo a sus siervos hablar entre sí, entendió que el niño era muerto; por lo que dijo David a sus siervos: ¿Es muerto el niño? Y ellos respondieron: Muerto es. Entonces David se levantó de tierra, y se lavó y se ungió, y mudó sus ropas, y entró a la Casa del SEÑOR, y adoró. Y después vino a su casa, y demandó, y le pusieron pan, y comió. Y le dijeron sus siervos: ¿Qué es esto que has hecho? Por el niño, viviendo aún, ayunabas y llorabas; y él muerto, te levantaste y comiste pan. Y él respondió: Viviendo aún el niño, yo ayunaba y lloraba, diciendo: ¿Quién sabe si Dios tendrá compasión de mí, por manera que viva el niño? Mas ahora que ya es muerto, ¿para qué tengo de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí.
Y ahora, he aquí, que yo atado del Espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de acontecer; mas que el Espíritu Santo por todas las ciudades me da testimonio, diciendo que prisiones y tribulaciones me esperan. Mas de ninguna cosa hago caso, ni estimo mi vida preciosa para mí mismo; solamente que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del Evangelio de la gracia de Dios.
Entonces Pablo respondió: ¿Qué hacéis llorando y afligiéndome el corazón? Porque yo no sólo estoy presto a ser atado, mas aun a morir en Jerusalén por el Nombre del Señor Jesús.
somos blasfemados, y rogamos; hemos venido a ser como la basura de este mundo, inmundicias de todos hasta ahora.
antes teniéndonos en todas las cosas como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias; en azotes, en cárceles, en alborotos, en trabajos, en vigilias, en ayunos; en castidad, en ciencia, en mansedumbre, en bondad, en el Espíritu Santo, en caridad no fingida;Leer más.
en palabra de verdad, en potencia de Dios, por las armas de justicia a diestra y a siniestra; por honra y por deshonra, por infamia y por buena fama; como engañadores, mas hombres de la verdad; como ignorados, pero conocidos; como muriendo, mas he aquí vivimos; como castigados, pero no mortificados; como doloridos, mas siempre gozosos; como pobres, pero enriqueciendo a muchos; como los que no tienen nada, mas que lo poseen todo.
Y decían el uno al otro: Verdaderamente hemos pecado contra nuestro hermano, que vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no le oímos; por eso ha venido sobre nosotros esta angustia.
Ahora pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; que para vida me envió Dios delante de vosotros;
Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido; para hacerte saber que el hombre no vivirá sólo de pan, mas de toda palabra que sale de la boca del SEÑOR vivirá el hombre.
y tu corazón se enterneció, y te humillaste delante del SEÑOR, cuando oíste lo que yo he pronunciado contra este lugar y contra sus moradores, que serían asolados y malditos, y rasgaste tus vestidos, y lloraste en mi presencia, también yo te he oído, dice el SEÑOR.
Mas Ezequías no pagó conforme al bien que le había sido hecho; antes se enalteció su corazón, y fue la ira contra él, y contra Judá y Jerusalén. Pero Ezequías, después de haberse enaltecido su corazón, se humilló, él y los moradores de Jerusalén; y no vino sobre ellos la ira del SEÑOR en los días de Ezequías.
Mas luego que fue puesto en angustias, oró ante el SEÑOR su Dios, humillado grandemente en la presencia del Dios de sus padres.
Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé del Señor; Y mi oración entró hasta ti en tu santo Templo.
Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo, y delante de ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.