12 Versículo de la Biblia sobre Atención asilo
Versículos Más Relevantes
¿Cómo podéis vosotros creer, pues recibís gloria los unos de los otros, y no buscáis la gloria que sólo de Dios viene?
ni buscamos gloria de los hombres, ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.
Mirad que no hagáis vuestras limosnas delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tenéis recompensa de vuestro Padre que está en el cielo. Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados de los hombres; de cierto os digo: Ya tienen su recompensa. Mas cuando tú des limosna, no sepa tu mano izquierda lo que hace tu mano derecha.Leer más.
Que tu limosna sea en secreto, y tu Padre que ve en lo secreto, Él te recompensará en público.
Pero indignación e ira, a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, antes obedecen a la injusticia.
Digo, pues, por la gracia que me ha sido dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí, que el que debe tener, sino que piense de sí con mesura, conforme a la medida de la fe que Dios repartió a cada uno.
Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a las concupiscencias engañosas;
Nada hagáis por contienda o vanagloria; antes bien con humildad, estimándoos unos a otros como superiores a sí mismos, no mirando cada uno a lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los demás. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús;
Mirad que no hagáis vuestras limosnas delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tenéis recompensa de vuestro Padre que está en el cielo.
Asimismo también, que las mujeres se adornen con atavío decoroso, con vergüenza y modestia; no con cabellos encrespados, u oro, o perlas, o vestidos costosos;
Como zarcillo de oro en la nariz de un cerdo, es la mujer hermosa y apartada de razón.
para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.