16 Versículo de la Biblia sobre Comer, uso metafórico
Versículos Más Relevantes
Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él comiere, no muera.
He aquí, que yo estoy parado a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz, y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
Ciertamente conocieron ésto todos los que obran iniquidad, que devoran a mi pueblo como si pan comiesen; al SEÑOR no invocaron.
¿No tienen conocimiento todos esos que obran iniquidad, que comen a mi pueblo como si comiesen pan? A Dios no invocan.
No inclines mi corazón a cosa mala, a hacer obras con impiedad con los varones que obran iniquidad; y no coma yo de sus deleites.
por cuanto aborrecieron el conocimiento, y no escogieron el temor del SEÑOR, ni quisieron mi consejo, y menospreciaron toda reprensión mía. Comerán, pues, del fruto de su camino, y de sus consejos se hartarán.
La muerte y la vida están en poder de la lengua; y el que la ama comerá de sus frutos.
Tsade Considera los caminos de su casa, y no come el pan de balde.
A todos los sedientos: Venid a las aguas. Y los que no tienen dinero, venid, comprad, y comed. Venid, comprad, sin dinero y sin precio, vino y leche. ¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien; y se deleitará vuestra alma con grosura.
Y me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallares; come este rollo, y ve y habla a la Casa de Israel. Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo. Y me dijo: Hijo de hombre, haz a tu vientre que coma, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel.
Y dije: Oíd ahora, príncipes de Jacob, y cabezas de la Casa de Israel: ¿No pertenecía a vosotros saber el derecho? Que aborrecen lo bueno y aman lo malo, que les roban su cuero y su carne de sobre sus huesos; Y que comen la carne de mi pueblo, y les desuellan su cuero de sobre ellos, y les quebrantan sus huesos y los rompen, como para echar en caldero, y como carnes en olla.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias: Al que venciere, daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del Paraíso de Dios.
Y fui al ángel, diciéndole que me diese el librito; y él me dijo: Toma, y trágalo; y él te hará amargar tu vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.
Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la harán desolada y desnuda; y comerán sus carnes, y la quemarán con fuego,
Y vi un ángel que estaba dentro del sol, y clamó con gran voz, diciendo a todas las aves que volaban por medio del cielo: Venid, y congregaos a la cena del gran Dios, Para que comáis carne de reyes, y de capitanes, y carne de fuertes, y carne de caballos, y de los que están sentados sobre ellos; y carne de todos libres y siervos, de pequeños y de grandes. Y vi la bestia, y los reyes de la tierra y sus ejércitos, congregados para hacer guerra contra el que estaba sentado sobre el caballo, y contra su ejército.