38 Versículo de la Biblia sobre Dios oponerse
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``Según el número de los días que reconocisteis la tierra, cuarenta días, por cada día llevaréis vuestra culpa un año, {hasta} cuarenta años, y conoceréis mi enemistad.
Pero El da mayor gracia. Por eso dice: DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS PERO DA GRACIA A LOS HUMILDES.
Asimismo, {vosotros} los más jóvenes, estad sujetos a los mayores; y todos, revestíos de humildad en vuestro trato mutuo, porque DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, PERO DA GRACIA A LOS HUMILDES.
Además, la mano del SEÑOR fue contra ellos, para destruirlos de en medio del campamento, hasta que todos perecieron.
Por dondequiera que iban, la mano del SEÑOR estaba contra ellos para mal, tal como el SEÑOR había dicho y como el SEÑOR les había jurado, y se angustiaron en gran manera.
Los filisteos fueron sometidos y no volvieron más dentro de los límites de Israel. Y la mano del SEÑOR estuvo contra los filisteos todos los días de Samuel.
Pero si no escucháis la voz del SEÑOR, sino que os rebeláis contra el mandamiento del SEÑOR, entonces la mano del SEÑOR estará contra vosotros, {como estuvo} contra vuestros padres.
Por tanto, así dice el Señor DIOS: He aquí, yo estoy contra vuestras cintas {mágicas} con las que allí cazáis vidas como aves; las arrancaré de vuestros brazos y dejaré ir las vidas, las vidas que cazáis como aves.
`Pero si el profeta se deja engañar y dice algo, soy yo, el SEÑOR, el que he engañado a ese profeta, y extenderé mi mano contra él y lo exterminaré de en medio de mi pueblo Israel.
Ciertamente contra mí ha vuelto {y} revuelto su mano todo el día.
El rostro del SEÑOR está contra los que hacen mal, para cortar de la tierra su memoria.
PORQUE LOS OJOS DEL SEÑOR ESTAN SOBRE LOS JUSTOS, Y SUS OIDOS ATENTOS A SUS ORACIONES; PERO EL ROSTRO DEL SEÑOR ESTA CONTRA LOS QUE HACEN EL MAL.
Por tanto, así dice el Señor DIOS: ``He aquí, estoy en contra de Faraón, rey de Egipto; quebraré sus brazos, tanto el fuerte como el fracturado, y haré que la espada caiga de su mano.
¿Ay de los habitantes de la costa del mar, la nación de los cereteos! La palabra del SEÑOR está contra vosotros: Canaán, tierra de los filisteos, yo te destruiré hasta que no quede habitante alguno.
entonces yo procederé con hostilidad contra vosotros; y yo mismo os heriré siete veces por vuestros pecados.
entonces yo procederé con hostilidad airada contra vosotros, y yo mismo os castigaré siete veces por vuestros pecados.
(yo también procedía con hostilidad contra ellos para llevarlos a la tierra de sus enemigos), o si su corazón incircunciso se humilla, y reconocen sus iniquidades,
``Si cualquier hombre de la casa de Israel, o de los forasteros que residen entre ellos, come sangre, yo pondré mi rostro contra esa persona que coma sangre, y la cortaré de entre su pueblo.
``Yo pondré mi rostro contra ese hombre y lo cortaré de entre su pueblo, porque ha dado de sus hijos a Moloc, contaminando así mi santuario y profanando mi santo nombre.
entonces yo mismo pondré mi rostro contra ese hombre y contra su familia; y lo cortaré de entre su pueblo, a él y a todos los que con él se prostituyan, fornicando en pos de Moloc.
``En cuanto a la persona que vaya a los médium o a los espiritistas, para prostituirse en pos de ellos, también pondré mi rostro contra esa persona y la cortaré de entre su pueblo.
``Fijaré mi rostro contra vosotros, para que seáis derrotados delante de vuestros enemigos; los que os aborrecen os dominarán y huiréis sin que nadie os persiga.
Por tanto, así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``He aquí, volveré el rostro contra vosotros para mal, y para destruir a todo Judá.
`Porque he puesto mi rostro contra esta ciudad para mal, y no para bien' --declara el SEÑOR--. `Será entregada en manos del rey de Babilonia, quien le prenderá fuego.'"
``He puesto mi rostro contra ellos; del fuego han escapado, pero el fuego los consumirá. Y sabréis que yo soy el SEÑOR, cuando ponga mi rostro contra ellos.
`Y pondré mi rostro contra ese hombre, haré de él señal y proverbio, y lo cortaré de en medio de mi pueblo; y sabréis que yo soy el SEÑOR.
`He aquí, yo estoy contra ti, moradora del valle, roca de la llanura' --declara el SEÑOR-- `los que decís: `` ¿Quién descenderá contra nosotros? ¿Quién entrará en nuestras moradas?"
por eso, así dice el Señor DIOS: ``He aquí, yo, yo mismo, estoy contra ti, y yo ejecutaré juicios en medio de ti a la vista de las naciones.
Por tanto, así dice el Señor DIOS: Por cuanto habéis hablado falsedad y habéis visto mentira, por tanto, he aquí, yo estoy contra vosotros --declara el Señor DIOS.
y di a la tierra de Israel: ``Así dice el SEÑOR: `He aquí, estoy contra ti; sacaré mi espada de la vaina y cortaré de ti al justo y al impío.
He aquí, estoy contra ti, arrogante, --declara el Señor, DIOS de los ejércitos-- porque ha llegado tu día, la hora en que te castigaré.
He aquí, yo estoy contra ti, monte destructor, que destruyes toda la tierra --declara el SEÑOR. Extenderé mi mano contra ti, te haré rodar desde las peñas y te reduciré a monte quemado.
Extenderé mi mano contra Judá y contra todos los habitantes de Jerusalén; cortaré de este lugar al remanente de Baal {y} los nombres de los ministros idólatras junto con {sus} sacerdotes;
Y estará mi mano contra los profetas que ven visiones falsas y hablan adivinaciones mentirosas. No estarán en el consejo de mi pueblo, no serán inscritos en el libro de la casa de Israel, ni entrarán en la tierra de Israel; y sabréis que yo soy el Señor DIOS.
Profecía de la palabra del SEÑOR contra la tierra de Hadrac y Damasco, su lugar de reposo (porque hacia el SEÑOR están {puestos} los ojos de los hombres y de todas las tribus de Israel),
Entonces David habló al SEÑOR, cuando vio al ángel que hería al pueblo, y dijo: He aquí, yo soy el que ha pecado, y yo soy el que ha hecho mal; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Te ruego que tu mano caiga sobre mí y sobre la casa de mi padre.
¿Es entonces la ley contraria a las promesas de Dios? ¡De ningún modo! Porque si se hubiera dado una ley capaz de impartir vida, entonces la justicia ciertamente hubiera dependido de la ley.
Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el {del} Espíritu {es} contra la carne, pues éstos se oponen el uno al otro, de manera que no podéis hacer lo que deseáis.