27 Versículo de la Biblia sobre el pueblo del reino

Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel.

y el campo es el mundo; y la buena simiente son los hijos del Reino, y la cizaña son los hijos del malo;

y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios y su Padre: a él sea gloria e imperio para siempre jamás. Amén.

Entonces los justos resplandecerán como el sol en el Reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

Y él les dijo: Por eso todo escriba docto en el Reino de los cielos, es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.

Porque hay castrados que nacieron así del vientre de su madre; y hay castrados, que son hechos por los hombres; y hay castrados que se castraron a sí mismos por causa del Reino de los cielos; el que pueda tomar eso, tómelo.

para que comáis y bebáis en mi mesa en mi Reino, y os sentéis sobre tronos juzgando a las doce tribus de Israel.

Yo Juan, vuestro hermano, y participante en la tribulación y en el Reino, y en la paciencia de Jesucristo; estaba en la isla que es llamada Patmos, por la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.

Y él les dijo: De cierto os digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o padres, o hermanos, o mujer, o hijos, por el Reino de Dios,

y que el reino, y el señorío, y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al santo pueblo del Altísimo; Su Reino, será Reino eterno, y todos los señoríos le servirán y escucharán.

y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos en la tierra.

Bienaventurados los pobres en espíritu; porque de ellos es el Reino de los cielos.

Y alzando él los ojos a sus discípulos, decía: Bienaventurados los pobres; porque vuestro es el Reino de Dios.

Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe, y herederos del Reino que prometió a los que le aman?

Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia (o rectitud), porque de ellos es el Reino de los cielos.

Y Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les impidáis de venir a mí; porque de los tales es el Reino de los cielos.

Y viéndolo Jesús, se enojó, y les dijo: Dejad los niños venir, y no se lo estorbéis; porque de los tales es el Reino de Dios.

Mas Jesús llamándolos, dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no lo impidáis; porque de los tales es el Reino de Dios.

Entonces el Rey dirá a los que estarán a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el Reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

No temáis, manada pequeña; porque al Padre ha placido daros el Reino.

Yo pues os ordeno el Reino, como mi Padre me lo ordenó a mí,

No quitará sus ojos del justo; antes bien con los reyes los pondrá en silla para siempre, y serán ensalzados.

que nos libró de la potestad de las tinieblas, y nos traspasó en el Reino de su amado Hijo,

Porque de esta manera os será abundantemente administrada la entrada en el Reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

Y el Señor me librará de toda obra mala, y me salvará para su Reino celestial, al cual sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Y tú, oh torre del rebaño, la fortaleza de la hija de Sion vendrá hasta ti; y vendrá el Señorío primero, el Reino, a la hija de Jerusalén.

y os encargábamos que anduvierais como es digno de Dios, que os llamó a su Reino y gloria.