13 Versículo de la Biblia sobre la falta de tratos

Y le sirvieron a él aparte, y a ellos aparte, y a los egipcios que comían con él, {también} aparte; porque los egipcios no podían comer con los hebreos, pues esto es abominación para los egipcios.

Entonces la mujer samaritana le dijo*: ¿Cómo es que tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy samaritana? (Porque los judíos no tienen tratos con los samaritanos.)

``Porque yo te devolveré la salud, y te sanaré de tus heridas" --declara el SEÑOR-- ``porque te han llamado desechada, diciendo: `Esta es Sion, nadie se preocupa por ella.'"

He aquí, en aquel tiempo me ocuparé de todos tus opresores; salvaré a la coja y recogeré a la desterrada, y convertiré su vergüenza en alabanza y renombre en toda la tierra.

Pero el hombre de Dios dijo al rey: Aunque me dieras la mitad de tu casa no iría contigo, y no comería pan ni bebería agua en este lugar. Porque así se me ordenó por palabra del SEÑOR, que me dijo: ``No comerás pan, ni beberás agua, ni volverás por el camino que fuiste."

Y él respondió: No puedo volver contigo ni ir contigo; tampoco comeré pan ni beberé agua contigo en este lugar. Porque me {vino} un mandato por palabra del SEÑOR: ``No comerás pan ni beberás agua allí, ni volverás por el camino que fuiste."

de las naciones acerca de las cuales el SEÑOR había dicho a los hijos de Israel: No os uniréis a ellas, ni ellas se unirán a vosotros, {porque} ciertamente desviarán vuestro corazón tras sus dioses. {Pero} Salomón se apegó a ellas con amor.

En mi carta os escribí que no anduvierais en compañía de personas inmorales;

Y si alguno no obedece nuestra enseñanza en esta carta, señalad al tal y no os asociéis con él, para que se avergüence.

Sino que en efecto os escribí que no anduvierais en compañía de ninguno que, llamándose hermano, es una persona inmoral, o avaro, o idólatra, o difamador, o borracho, o estafador; con ése, ni siquiera comáis.

Pero el rey dijo: Que vuelva a su casa y no vea mi rostro. Y Absalón volvió a su casa, y no vio el rostro del rey.

Absalón residió dos años completos en Jerusalén sin ver el rostro del rey.

Me aborrecen {y} se alejan de mí, y no se retraen de escupirme a la cara.