27 Versículo de la Biblia sobre la muerte natural
Versículos Más Relevantes
Si como mueren todos los hombres murieren éstos, o si fueren ellos visitados a la manera de todos los hombres, el SEÑOR no me envió.
Y era Moisés de edad de ciento veinte años cuando murió; sus ojos nunca se oscurecieron, ni perdió su vigor.
Mortecino ni despedazado por fiera no comerá, para contaminarse en ello. Yo soy el SEÑOR.
Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con el Cristo en Dios.
Y limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y la muerte no será más; y no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas son pasadas.
Porque el suceso de los hijos de los hombres, y el suceso del animal, el mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros; y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad.
Así que, por cuanto los hijos participan de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo,
Condenados sean a muerte, desciendan vivos al infierno, porque hay maldades en su compañía, entre ellos.
Y cualquiera que tocare un muerto a cuchillo sobre la faz del campo, o un cadáver, o un hueso humano, o un sepulcro, siete días será inmundo.
Dijo además David: Vive el SEÑOR, que si el SEÑOR no lo hiriere, o que su día llegue para que muera, o que descendiendo en batalla perezca,
Ninguna cosa mortecina comeréis; al extranjero que está en tus poblaciones la darás, y él la comerá; o véndela al extranjero; porque tú eres pueblo santo al SEÑOR tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.
Por tanto, de la manera que el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así pasó a todos los hombres en aquel en quien todos pecaron.
Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal;
Perece el justo, y no hay quien eche de ver; y los píos son recogidos, y no hay quien entienda que delante de la aflicción es recogido el justo.
porque si viviereis conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu mortificáis las obras del cuerpo, viviréis.
Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, ya reconciliados, seremos salvos por su vida.
Ninguna cosa mortecina, ni desgarrada, así de aves como de animales, comerán los sacerdotes.
Porque la prudencia de la carne es muerte; mas la prudencia del Espíritu, vida y paz;
Y murió Harán antes que su padre Taré en la tierra de su naturaleza, en Ur de los caldeos.
Mas esto decía Jesús de la muerte de él; y ellos pensaron que hablaba del sueño de dormir.
Necio, lo que tú siembras no se vivifica, si no muriere antes.
Porque la paga del pecado es muerte; mas la gracia de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro.
Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;
Y cualquiera persona que comiere cosa mortecina o despedazada por fiera , así de los naturales como de los extranjeros, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde; y se limpiará.
pero cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído, y cebado.
Y cualquiera que tuviere ayuntamiento con macho como con mujer, abominación hicieron; ambos morirán; su sangre será sobre ellos.
Tesauro de la Biblia
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