42 Versículo de la Biblia sobre la perspectiva

¿Digo esto solamente según los hombres? ¿No dice esto también la ley?

Ellos son del mundo, por eso hablan del mundo, y el mundo los oye.

Y no os conforméis a este siglo; mas trasformaos por la renovación de vuestra alma, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Porque no somos como muchos, mercaderes falsos de la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de Dios, delante de Dios, hablamos de Cristo.

Así que ya no sois extranjeros y advenedizos, sino juntamente ciudadanos con los santos, y domésticos de Dios;

El que de arriba viene, sobre todos es: el que es de la tierra, terreno es, y cosas terrenas habla; el que viene del cielo, sobre todos es.

Porque no hay acepción de personas para con Dios.

Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: En verdad hallo que Dios no hace acepción de personas;

De manera que nosotros de aquí en adelante a nadie conocemos según la carne; y si aun a Cristo conocimos según la carne, ahora sin embargo ya no le conocemos.

Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.

y clamaban a alta voz, diciendo: Salvación al que está sentado sobre el trono de nuestro Dios, y al Cordero.

No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.

El justo es el primero en su pleito; y su adversario viene, y le busca.

Así dijo el SEÑOR Dios de Israel: He aquí yo vuelvo atrás las armas de guerra que están en vuestras manos, y con que vosotros peleáis con el rey de Babilonia; y los caldeos que os tienen cercados fuera de la muralla, yo los juntaré en medio de esta ciudad.

Nosotros somos de Dios, el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. Por esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error.

Porque mirad, hermanos, vuestra vocación: que no sois muchos sabios según la carne, no muchos poderosos, no muchos nobles;

Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo que es suyo; mas porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso os aborrece el mundo.

Y les decía: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.

Por la fe entendemos haber sido compuestos los siglos por la palabra de Dios, siendo hecho lo que se ve, de lo que no se veía.

Todo lo puedo en el Cristo que me fortalece.

Porque está escrito: Alégrate, la estéril, que no das a luz; Prorrumpe en alabanzas y clama, La que no estás de parto; Porque más son los hijos de la dejada, Que de la que tiene marido.

Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, del cual hablamos.

Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.

Y si me fuere, y os aparejare el lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

Y Jesús crecía en sabiduría, y en edad, y en gracia para con Dios y los hombres.

¿Quién jamás peleó a sus expensas? ¿Quién planta viña, y no come de su fruto? ¿O quién apacienta el ganado, y no come de la leche del ganado?

He aquí como a palmos diste a mis días, y mi edad es como nada delante de ti; ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive. (Selah.)

Así dice el SEÑOR: El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopía, y los sabeos hombres agigantados, se pasarán a ti, y serán tuyos; irán en pos de ti, pasarán con grillos; a ti harán reverencia, y a ti suplicarán: diciendo : Cierto, en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios.

Porque en la ley de Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado de los bueyes?

Hijitos, ya es la postrera hora; y como vosotros habéis oído que el anticristo ha de venir, así también al presente han comenzado a ser muchos anticristos; por lo cual sabemos que es el último tiempo.

Y el primero de los sábados, María Magdalena vino de mañana, siendo aún tinieblas, al sepulcro; y vio la piedra quitada del sepulcro.

Y si nuestra iniquidad engrandece la justicia de Dios, ¿qué diremos? ¿Será por esto injusto Dios que da castigo? (hablo como hombre.)

Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque el que en vosotros está, es mayor que el que está en el mundo.

Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en las sinagogas, y en las esquinas de las calles en pie, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo, que ya tienen su salario.

En aquellos días y en aquel tiempo, dice el SEÑOR, vendrán los hijos de Israel, ellos y los hijos de Judá juntamente; e irán andando y llorando, y buscarán al SEÑOR su Dios.

Gloria en las alturas a Dios, Y en la tierra paz, y en el hombre buena voluntad.

¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón fueran hechas las maravillas que han sido hechas en vosotras, en otro tiempo se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.

Y el niño crecía, y era confortado del Espíritu, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él.

Levántate, oh SEÑOR, a tu reposo; tú y el arca de tu fortaleza.

Mas os hago saber, hermanos, que el Evangelio que ha sido anunciado por mí, no es según hombre;

Y para que tuviesen la guarda del tabernáculo del testimonio, y la guarda del santuario, y la guarda de los hijos de Aarón sus hermanos, en el ministerio de la Casa del SEÑOR.