15 Versículo de la Biblia sobre Preexistencia de Cristo
Versículos Más Relevantes
Mas tú, Belén Efrata, pequeña para ser en los millares de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de los siglos.
En el principio ya era la Palabra, y aquel que es la Palabra era con el Dios, y la Palabra era Dios.
Les dijo Jesús: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, YO SOY.
Ahora pues, Padre, clarifícame tú cerca de ti mismo de aquella claridad que tuve cerca de ti antes que el mundo fuese.
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, ellos estén también conmigo; para que vean mi claridad que me has dado; por cuanto me has amado desde antes de la constitución del mundo.
Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas consisten por él;
sin padre, sin madre, sin linaje; que ni tiene principio de días, ni fin de vida, mas hecho semejante al Hijo de Dios, se queda Sacerdote eternalmente.
YO SOY el Alfa y la Omega, principio y fin, el primero y el postrero.
El cual es la imagen del Dios invisible, el Primogénito de toda criatura.
ellos perecerán, mas tú eres permanente; y todos ellos se envejecerán como una vestidura; y como un vestido los envolverás, y serán mudados; pero tú eres el mismo, y tus años nunca se acabarán.
Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos mirado bien , y nuestras manos han tocado de la Palabra de vida; (porque la vida es manifestada; y también lo vimos, y testificamos, y os mostramos aquella la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y nos ha aparecido);
En el principio ya era la Palabra, y aquel que es la Palabra era con el Dios, y la Palabra era Dios. Este era en el principio con el Dios.
Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es del que yo decía: El que viene tras de mí, es antes de mí; porque es primero que yo.
Y cuando yo le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; YO SOY el primero y el último; y el que vivo, y he sido muerto; y he aquí que vivo para siempre jamás, Amén. Y tengo las llaves del infierno y de la muerte.
Y escribe al ángel de la Iglesia de Esmirna: El primero y el postrero, que fue muerto, y vive, dice estas cosas: