20 Versículos de la Biblia sobre Ser misericordioso!
Versículos Más Relevantes
Acuérdate, oh Jehová, de tus piedades y de tus misericordias, que son eternas.
«Al Músico principal: Salmo de David, cuando después que entró a Betsabé, vino a él Natán el profeta» Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones.
Vuélvete, oh Jehová: ¿hasta cuándo? Y aplácate para con tus siervos.
Vengan a mí tus misericordias, y viva; porque tu ley es mi delicia.
Mas el publicano, estando lejos, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que golpeaba su pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador.
Aunque fuese yo justo, no respondería; antes habría de rogar a mi Juez.
para que pidiesen misericordias del Dios del cielo sobre este misterio, y que Daniel y sus compañeros no pereciesen con los otros sabios de Babilonia.
Sí, luchó con el Ángel, y prevaleció; lloró, y le rogó; en Betel le encontró, y allí habló con nosotros.
Aborreced el mal, y amad el bien, y poned juicio en la puerta; quizá Jehová, Dios de los ejércitos, tendrá piedad del remanente de José.
Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí: Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer; En la ira acuérdate de la misericordia.
Dé el Señor misericordia a la casa de Onesíforo; que muchas veces me recreó, y no se avergonzó de mis cadenas;
Y partiendo Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: ¡Hijo de David, ten misericordia de nosotros!
Y he aquí una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí, mi hija es gravemente atormentada por un demonio.
Y he aquí, dos ciegos sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros! Y la multitud les reprendía para que callasen; pero ellos más clamaban, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!
Y cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a dar voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
Y muchos le reprendían para que callara; pero él, mucho más gritaba: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
Y los que iban delante, le reprendían para que se callara; pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
y alzaron la voz, diciendo: Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros.
Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece mucho, porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua.