28 Versículos de la Biblia sobre el tercer día de la semana
Versículos Más Relevantes
Y David respondió a Jonatán: He aquí que mañana será nueva luna, y yo acostumbro sentarme con el rey a comer; mas tú dejarás que me esconda en el campo hasta la tarde del tercer día.
Nos dará vida después de dos días; al tercer día nos resucitará y viviremos delante de Él.
Pero nosotros esperábamos que Él era el que había de redimir a Israel, y además de todo esto, hoy es el tercer día que estas cosas acontecieron.
Y Él les dijo: Id, y decid a aquella zorra: He aquí, echo fuera demonios y hago sanidades hoy y mañana, y al tercer día seré consumado.
y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día;
Desde aquel tiempo comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, y de los príncipes de los sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.
y le matarán; pero al tercer día resucitará. Y ellos se entristecieron en gran manera.
y le entregarán a los gentiles para ser escarnecido, azotado, y crucificado, mas al tercer día resucitará.
diciendo: Es necesario que el Hijo del Hombre padezca muchas cosas, y sea rechazado por los ancianos, y por los príncipes de los sacerdotes y por los escribas, y que sea muerto, y resucite al tercer día.
Y sucedió que al tercer día, cuando sentían ellos el mayor dolor, los dos hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada, y vinieron contra la ciudad osadamente, y mataron a todo varón.
Y estén apercibidos para el día tercero, porque al tercer día Jehová descenderá, a ojos de todo el pueblo, sobre el monte de Sinaí.
Y el día tercero, once becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto;
Y partieron los hijos de Israel, y al tercer día llegaron a sus ciudades; y sus ciudades eran Gabaón, Cefira, Beerot y Quiriat-jearim.
Y al tercer día, aconteció que vino uno del campamento de Saúl, rotas sus vestiduras, y tierra sobre su cabeza; y llegando a David, se postró en tierra, e hizo reverencia.
Y aconteció al tercer día después que yo di a luz, que ésta también dio a luz, y morábamos nosotras juntas; ninguno de fuera estaba en casa, sino nosotras dos en la casa.
Y al tercer día vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam; según el rey lo había mandado, diciendo: Volved a mí al tercer día.
Vuelve, y di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, y he visto tus lágrimas; he aquí yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová.
Y Ezequías había dicho a Isaías: ¿Qué señal tendré de que Jehová me sanará, y que subiré a la casa de Jehová al tercer día?
Y aconteció que al tercer día se vistió Esther su vestido real, y se puso en el patio interior de la casa del rey, frente al aposento del rey; y el rey estaba sentado en su trono regio en el aposento real, frente a la puerta del aposento.
Y al tercer día se hicieron unas bodas en Caná de Galilea; y estaba allí la madre de Jesús.
y al tercer día nosotros con nuestras manos arrojamos los aparejos de la nave.