'Buscó' en la Biblia

Y tomó Raquel los ídolos, y los puso en una albarda de un camello, y se sentó sobre ellos; y buscó Labán por toda la tienda pero no los halló.

Y ella dijo a su padre: No se enoje mi señor, porque no me puedo levantar delante de ti; pues estoy con la costumbre de las mujeres. Y él buscó, pero no halló los ídolos.

Y él respondió: Busco a mis hermanos; te ruego que me muestres dónde apacientan sus ovejas.

Y buscó; desde el mayor comenzó, y acabó en el menor; y la copa fue hallada en el costal de Benjamín.

Y vino la nueva a Saúl que David había huido a Gat, y no lo buscó más.

Y en el año treinta y nueve de su reinado Asa enfermó de sus pies, y aun en su enfermedad no buscó a Jehová, sino a los médicos.

Y Jehová fue con Josafat, porque anduvo en los primeros caminos de David su padre, y no buscó a los Baales;

sino que buscó al Dios de su padre, y anduvo en sus mandamientos, y no según las obras de Israel.

Y buscando a Ocozías, el cual se había escondido en Samaria, lo tomaron, y lo trajeron a Jehú, y le mataron; y le dieron sepultura, porque dijeron: Es hijo de Josafat, el cual buscó a Jehová de todo su corazón. Y la casa de Ocozías no tenía fuerzas para poder retener el reino.

Y persistió en buscar a Dios en los días de Zacarías, entendido en visiones de Dios; y en estos días que él buscó a Jehová, Él le prosperó.

En todo cuanto comenzó en el servicio de la casa de Dios, y en la ley y mandamientos, buscó a su Dios, y lo hizo de todo corazón, y fue prosperado.

He aquí que Él buscó causas contra mí, y me tiene por su enemigo;

Y será Sarón para habitación de ovejas, y el valle de Acor para majada de vacas, para mi pueblo que me buscó.

Todo su pueblo buscó su pan suspirando; Dieron por la comida todas sus cosas preciosas, para entretener la vida. Mira, oh Jehová, y ve que estoy abatida.

Y él prometió, y buscó oportunidad para entregárselo en ausencia del pueblo.

No puedo yo hacer nada de mí mismo; como oigo, juzgo; y mi juicio es justo; porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre que me envió.

Y yo no busco mi gloria, hay quien la busca, y juzga.

Y cuando Herodes le buscó y no le halló, habiendo interrogado a los guardas, ordenó que éstos fueran llevados a la muerte. Y él descendió de Judea a Cesarea, y se quedó allí.

He aquí estoy preparado para ir a vosotros la tercera vez, y no os seré gravoso; porque no busco lo vuestro, sino a vosotros: porque no han de atesorar los hijos para los padres, sino los padres para los hijos.

Qué, ¿persuado yo ahora a los hombres, o a Dios? ¿Acaso busco agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.

No es que busque dádivas, sino que busco fruto que abunde a vuestra cuenta.

antes, estando él en Roma, me buscó diligentemente, y me halló.