'Entramos' en la Biblia

"Y el Espíritu {Santo} me dijo que fuera con ellos sin dudar (sin hacer ninguna distinción). Estos seis hermanos fueron también conmigo y entramos en la casa de {aquel} hombre.

Cuando entramos en Roma, el centurión entregó los presos al prefecto militar, pero a Pablo se le permitió vivir aparte, con el soldado que lo custodiaba.

Porque los que hemos creído entramos en ese reposo, tal como El ha dicho: ``COMO JURE EN MI IRA: `NO ENTRARAN EN MI REPOSO,'" aunque las obras de El estaban acabadas desde la fundación del mundo.