149 casos

'Grandes' en la Biblia

Mas el SEÑOR hirió al Faraón y a su casa de grandes plagas, por causa de Sarai, mujer de Abram.

llamó a los de casa, y les habló diciendo: Mirad, nos ha traído un hebreo, para que hiciese burla de nosotros; vino él a mí para dormir conmigo, y yo di grandes voces;

Y el Faraón no os oirá; mas yo pondré mi mano sobre Egipto, y sacaré a mis ejércitos, mi pueblo, los hijos de Israel, de la tierra de Egipto, por grandes juicios.

Mas el pueblo que habita aquella tierra es fuerte, y las ciudades muy grandes y fuertes; y también vimos allí los hijos de Anac.

¿A dónde subimos? Nuestros hermanos han hecho desfallecer nuestro corazón, diciendo: Este pueblo es mayor y más alto que nosotros, las ciudades grandes y amuralladas hasta el cielo; y también vimos allí hijos de gigantes.

¿O ha Dios probado a venir a tomar para sí nación de en medio de otra nación, con pruebas, con señales, con milagros, y con guerra, y mano fuerte, y brazo extendido, y grandes espantos, según todas las cosas que hizo con vosotros el SEÑOR vuestro Dios en Egipto ante tus ojos?

para echar de delante de ti gentiles grandes y más fuertes que tú, y para introducirte, y darte su tierra por heredad, como parece hoy.

Y será, cuando el SEÑOR tu Dios te hubiere introducido en la tierra que juró a tus padres Abraham, Isaac, y Jacob, para dártela a ti; ciudades grandes y buenas que tú no edificaste;

y dio el SEÑOR señales y milagros grandes y dañosos en Egipto, sobre Faraón y sobre toda su casa, delante de nuestros ojos;

de las grandes pruebas que vieron tus ojos, y de las señales y milagros, y de la mano fuerte y brazo extendido con que el SEÑOR tu Dios te sacó; así hará el SEÑOR tu Dios con todos los pueblos de cuya presencia tú temieres.

Oye, Israel: tú estás hoy para pasar el Jordán, para entrar a heredar lo de gentiles más numerosos y más fuertes que tú, ciudades grandes y encastilladas hasta el cielo,

El será tu alabanza, y él será tu Dios, que ha hecho contigo estas grandes y terribles cosas que tus ojos han visto.

mas vuestros ojos han visto todos los grandes hechos que el SEÑOR ha ejecutado.

el SEÑOR también echará todos estos gentiles de delante de vosotros y desposeeréis naciones grandes y más fuertes que vosotros.

Y será que , el día que pasaréis el Jordán a la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, te has de levantar piedras grandes, las cuales revocarás con cal;

El SEÑOR aumentará maravillosamente tus plagas y las plagas de tu simiente, plagas grandes y duraderas, y enfermedades malignas y duraderas;

las pruebas grandes que vieron tus ojos, las señales, y las grandes maravillas.

Y cuando iban huyendo de los israelitas, a la bajada de Bet-horón, el SEÑOR echó sobre ellos del cielo grandes piedras hasta Azeca, y murieron; muchos más murieron de las piedras del granizo, que los que los hijos de Israel habían muerto a cuchillo.

Entonces Josué dijo: Rodad grandes piedras a la boca de la cueva, y poned hombres junto a ella que los guarden;

Y cuando el sol se iba a poner, mandó Josué que los quitasen de los maderos, y los echasen en la cueva donde se habían escondido; y pusieron grandes piedras a la boca de la cueva, hasta hoy.

Dame, pues, ahora este monte, del cual habló el SEÑOR aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y grandes y fuertes ciudades. Por ventura el SEÑOR será conmigo, y los echaré como el SEÑOR ha dicho.

Y les habló, diciendo: Volveos a vuestras tiendas con grandes riquezas, y con gran copia de ganado, con plata, y con oro, y bronce, y hierro, y muchos vestidos; partid con vuestros hermanos el despojo de vuestros enemigos.

pues ha echado el SEÑOR delante de vosotros grandes y fuertes gentiles, y hasta hoy nadie ha podido parar delante de vuestro rostro.

Porque el SEÑOR nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre; el cual delante de nuestros ojos ha hecho estas grandes señales, y nos ha guardado por todo el camino por donde hemos andado, y en todos los pueblos por entre los cuales pasamos.

Y el pueblo había servido al SEÑOR todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que vivieron largos días después de Josué, los cuales habían visto todas las grandes obras del SEÑOR, que el había hecho con Israel.

Príncipes también de Isacar fueron con Débora; y también Isacar, como Barac se puso a pie en el valle. De las divisiones de Rubén son grandes los pensamientos del corazón.

¿Por qué te quedaste entre las majadas, para oír los balidos de los rebaños? De las divisiones de Rubén grandes son los pensamientos del corazón.

Y la mujer de Galaad también le había dado a luz hijos; los cuales cuando fueron grandes, echaron fuera a Jefté, diciéndole: No heredarás en la casa de nuestro padre, porque eres bastardo.

¿habíais vosotras de esperarlos hasta que fuesen grandes? ¿Habíais vosotras de quedaros sin casar por amor de ellos? No, hijas mías; que mayor amargura tengo yo que vosotras, porque la mano del SEÑOR ha salido contra mí.

Y cada uno de los de Israel decía: ¿No habéis visto a aquel varón que sube? El sube para deshonrar a Israel. Al que le venciere, el rey le enriquecerá con grandes riquezas, y le dará su hija, y hará franca la casa de su padre en Israel.

Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda ejecutarás tú grandes empresas , y prevalecerás. Entonces David se fue su camino, y Saúl se volvió a su lugar.

y he sido contigo en todo cuanto has andado, y delante de ti he talado todos tus enemigos, y te he hecho nombre grande, como el nombre de los grandes que son en la tierra.

¿Y quién como tu pueblo, como Israel, en la tierra? Una gente por amor de la cual Dios fuese a redimírsela por pueblo, y le pusiese nombre, e hiciese con vosotros, grandes y espantosas obras en tu tierra, por causa de tu pueblo que tú te redimiste de Egipto, de los gentiles y de sus dioses.

Y cuando él acabó de hablar, he aquí los hijos del rey que vinieron, y alzando su voz lloraron. Y también el mismo rey y todos sus siervos lloraron con muy grandes lamentos.

Mas Sadoc sacerdote, y Benaía hijo de Joiada, y Natán profeta, y Simei, y Rei, y todos los grandes de David, no seguían a Adonías.

mas no convidó a Natán profeta, ni a Benaía, ni a los grandes, ni a Salomón su hermano.

Después subió todo el pueblo en pos de él, y cantaba el pueblo con flautas, y hacían grandes alegrías, que parecía que la tierra se hundía con el clamor de ellos.

el hijo de Geber, en Ramot de Galaad; éste tenía también las ciudades de Jair hijo de Manasés, las cuales estaban en Galaad; tenía también la provincia de Argob, que era en Basán, sesenta grandes ciudades con muro y cerraduras de bronce;

Y mandó el rey que trajesen grandes piedras, piedras de precio, para los cimientos de la Casa, y piedras labradas.

El cimiento era de piedras de precio, de piedras grandes, de piedras de diez codos, y de piedras de ocho codos.

Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta cubrirse de sangre.

Benaía hijo de Joiada, hijo de varón de esfuerzo, de grandes hechos, de Cabseel; él venció los dos leones de Moab; también descendió, e hirió un león en mitad de un foso en tiempo de nieve.

y he sido contigo en todo cuanto has andado; y he talado a todos tus enemigos de delante de ti, y te he hecho grande nombre, como el nombre de los grandes que son en la tierra.

Mas vino a mí palabra del SEÑOR, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has traído grandes guerras; no edificarás casa a mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí.

E hizo en Jerusalén máquinas por industria de ingenieros, para que estuviesen en las torres y en los baluartes, para arrojar saetas y grandes piedras, y su fama se extendió lejos, porque se ayudó maravillosamente, hasta hacerse fuerte.

Y se hicieron grandes alegrías en Jerusalén; porque desde los días de Salomón hijo de David rey de Israel, no hubo tal cosa en Jerusalén.

Asimismo todos los vasos de la Casa de Dios, grandes y chicos, los tesoros de la Casa del SEÑOR, y los tesoros del rey y de sus príncipes, todo lo llevó a Babilonia.

Y muchos de los sacerdotes y de los levitas y de los cabezas de los padres, viejos, que habían visto la casa primera, viendo fundar esta casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros daban grandes gritos de alegría.

E inmediato a ellos restauraron los tecoítas; mas sus grandes no prestaron su cerviz a la obra de su Señor.

Y dividiste el mar delante de ellos, y pasaron por medio de él en seco; y a sus perseguidores echaste en lo profundo, como una piedra en grandes aguas.

Además, cuando hicieron para sí becerro de fundición, y dijeron: Este es tu Dios que te hizo subir de Egipto; y cometieron grandes abominaciones;

Hice luego subir a los príncipes de Judá sobre el muro, y puse dos coros grandes que fueron en procesión; el uno a la mano derecha sobre el muro hacia la puerta del Muladar.

el que hace cosas grandes e incomprensibles, y maravillosas, sin número.

Y tu justicia, oh Dios, hasta lo excelso; porque has hecho grandes cosas; Oh Dios, ¿quién como tú?

Asimismo este gran mar y ancho de términos; allí hay peces sin número, animales pequeños y grandes.

Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces dirán entre los gentiles: Grandes cosas ha hecho el SEÑOR con éstos.

Al único que hace grandes maravillas, porque para siempre es su misericordia.

al que hizo las grandes luminarias, porque para siempre es su misericordia;

una pequeña ciudad, y pocos hombres en ella; y viene contra ella un gran rey, y la cerca, y edifica contra ella grandes baluartes;

Si el espíritu del señor se exaltare contra ti, no dejes tu lugar; porque la mansedumbre hará reposar grandes pecados.

Ha llegado a mis oídos de parte del SEÑOR de los ejércitos, que las muchas casas han de quedar asoladas, sin morador las grandes y hermosas.

Pueblos harán ruido a manera de ruido de grandes aguas; pero Dios los reprenderá, y huirán lejos; serán ahuyentados, como el tamo de los montes delante del viento; y como el cardo delante del torbellino.

Llamarán a sus príncipes, príncipes sin reino; y todos sus grandes serán nada.

Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y a los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su alma hasta la muerte, y fue contado con los rebeldes, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.

Iré a los grandes, y les hablaré; porque ellos conocieron el camino del SEÑOR, el juicio de su Dios. Ciertamente ellos también quebrantaron el yugo, rompieron las coyundas.

Como jaula llena de pájaros, así están sus casas llenas de engaño; así se hicieron grandes y ricos.

Y morirán en esta tierra grandes y chicos; no se enterrarán, ni los endecharán, ni se arañarán, ni se mesarán por ellos;

Porque se servirán también de ellos muchas naciones, y reyes grandes; y yo les pagaré conforme a sus hechos, y conforme a la obra de sus manos.

Y todos los gentiles le servirán a él, y a su hijo, y al hijo de su hijo, hasta que venga también el tiempo de su misma tierra; y le servirán muchas naciones y reyes grandes.

Los profetas que fueron antes de mí y antes de ti en tiempos pasados, profetizaron sobre muchas tierras y grandes reinos, de guerra, y de aflicción, y de pestilencia.

Toma con tu mano piedras grandes, y cúbrelas de barro en un horno de ladrillos que está a la puerta de la casa de Faraón en Tafnes, a vista de hombres judíos;

Porque he aquí que yo despierto y hago subir contra Babilonia reunión de grandes naciones de la tierra del aquilón; y desde allí se aparejarán contra ella, y será tomada; sus flechas como de valiente diestro, que no se tornará en vano.

Y me dijo: Hijo de hombre, ¿no ves lo que éstos hacen, las grandes abominaciones que la Casa de Israel hace aquí, para alejarme de mi Santuario? Mas vuélvete aún, y verás abominaciones mayores.

Y dirás: Así dijo el Señor DIOS: Una gran águila, de grandes alas y de largos miembros, llena de plumas de diversos colores, vino al Líbano, y tomó el cogollo del cedro:

Tomó también de la simiente de la tierra, y la puso en un campo bueno para sembrar, la plantó junto a grandes aguas, la puso como un sauce.

Y fue otra gran águila, de grandes alas y de muchas plumas; y he aquí que esta vid juntó cerca de ella sus raíces, y extendió hacia ella sus ramas, para ser regada por ella por los surcos de su plantío.

Y haré en ellos grandes venganzas con reprensiones de ira; y sabrán que yo soy el SEÑOR, cuando diere mi venganza en ellos.

Sabá, y Dedán, y los mercaderes de Tarsis, y todos sus leoncillos, te dirán: ¿Has venido a arrebatar despojos? ¿Has reunido tu multitud para tomar presa, para quitar plata y oro, para tomar ganados y posesiones, para tomar grandes despojos?

Entonces el rey magnificó a Daniel, y le dio muchos y grandes dones, y lo puso por gobernador de toda la provincia de Babilonia, y por príncipe de los gobernadores sobre todos los sabios de Babilonia.

Y envió el rey Nabucodonosor a juntar los grandes, los asistentes y capitanes, jueces, tesoreros, los del concejo, presidentes, y a todos los gobernadores de las provincias, para que viniesen a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado.

Fueron, pues, reunidos los grandes, los asistentes y capitanes, los oidores, receptores, los del concejo, los presidentes, y todos los gobernadores de las provincias, a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado; y estaban en pie delante de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor.

Resultados de Búsqueda por Versiones

Resultados de Búsqueda por Libro

Todos los Libros

Sagradas Escrituras (1569)