62 casos

'Ojos' en la Biblia

No estarán los locos que se gobiernan por afecto o consejo de la carne delante de tus ojos; aborreces a todos los que obran iniquidad.

Mis ojos están carcomidos de descontento; se han envejecido a causa de todos mis angustiadores.

Está en las guaridas de las aldeas; en los escondrijos mata al inocente; sus ojos están acechando al pobre.

De delante de tu rostro salga mi juicio; vean tus ojos la rectitud.

Nuestros pasos nos han cercado ahora; puestos tienen sus ojos para echarnos por tierra.

Y me pagó el SEÑOR conforme a mi justicia; conforme a la limpieza de mis manos delante de sus ojos.

Porque tu misericordia está delante de mis ojos, y en tu verdad ando.

Ten misericordia de mí, oh SEÑOR, que estoy en angustia; se han carcomido de pesar mis ojos, mi alma, y mis entrañas.

Y decía yo en mi premura: cortado soy de delante de tus ojos; mas tú ciertamente oíste la voz de mis ruegos, cuando a ti clamaba.

Y ensancharon sobre mí su boca; dijeron: ¡Ea, ea, nuestros ojos lo han visto!

Estas cosas hiciste, y yo he callado; pensabas por eso que de cierto sería yo como tú; yo te argüiré, y las pondré delante de tus ojos.

Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu juicio.

Porque me ha librado de toda angustia, y sobre mis enemigos vieron mis ojos el deseo de El .

Sean oscurecidos sus ojos para ver, y haz siempre titubear sus lomos.

De engaño y de fraude redimirá sus almas; y la sangre de ellos será preciosa en sus ojos.

Pensaré pues para entender esto; es a mis ojos duro trabajo.

Tenías los párpados de mis ojos abiertos ; estaba yo quebrantado, y no hablaba.

Porque dirán los gentiles: ¿Dónde está su Dios? Sea notorio en los gentiles, delante de nuestros ojos, la venganza de la sangre de tus siervos, que se ha derramado.

Mira, oh Dios, escudo nuestro, y pon los ojos en el rostro de tu Ungido.

Mis ojos enfermaron a causa de mi aflicción; te he llamado, oh SEÑOR, cada día he extendido a ti mis manos.

Ciertamente con tus ojos mirarás, y verás la recompensa de los impíos.

Y miraron mis ojos mi deseo sobre mis enemigos; oyeron mis oídos mi deseo de los que se levantaron contra mí, de los malignos.

No pondré delante de mis ojos cosa injusta; hacer traiciones aborrecí; no se allegarán a mí.

Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que asienten conmigo; el que anduviere en el camino de la perfección, éste me servirá.

Mis ojos desfallecieron por tu salud, y por el dicho de tu justicia.

Ríos de agua descendieron de mis ojos, porque no guardaban tu ley.

Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la noche, para meditar en tus dichos.

Canción de las gradas. Alzaré mis ojos a los montes, de donde vendrá mi socorro.

Canción de las gradas. A ti alcé mis ojos, a ti que habitas en los cielos.

He aquí como los ojos de los siervos miran a la mano de sus señores, y como los ojos de la sierva a la mano de su señora; así nuestros ojos esperan al SEÑOR nuestro Dios, hasta que tenga misericordia de nosotros.

Canción de las gradas: de David. SEÑOR, mi corazón no se ha envanecido, ni mis ojos se enaltecieron; ni anduve en grandezas, ni en cosas maravillosas más de lo que me pertenecía.

no daré sueño a mis ojos, ni a mis párpados adormecimiento,

Por tanto a ti, oh DIOS el Señor, miran mis ojos; en ti he confiado, no desampares mi alma.

Sagradas Escrituras (1569)