47 casos

'Un' en la Biblia

Besad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino, cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en Él confían.

Porque tú no eres un Dios que se complace en la maldad; el malo no habitará junto a ti.

Un día emite palabra a otro día, y una noche a otra noche declara sabiduría.

Y éste, como un novio que sale de su tálamo, se alegra cual gigante para correr el camino.

De un extremo de los cielos es su salida, y su giro hasta el término de ellos; y nada hay que se esconda de su calor.

Se secó como un tiesto mi vigor, y mi lengua se pegó a mi paladar; y me has puesto en el polvo de la muerte.

Vendrán, y anunciarán su justicia a un pueblo que ha de nacer, le dirán que Él hizo esto.

Los esconderás en el secreto de tu rostro de las arrogancias del hombre; los pondrás en un tabernáculo a cubierto de contención de lenguas.

Porque sin causa escondieron para mí su red en un hoyo; sin causa hicieron hoyo para mi alma.

Fui, pues, como un hombre que no oye, y que en su boca no tiene reprensiones.

Hay un río cuyas corrientes alegrarán la ciudad de Dios, el lugar santo de los tabernáculos del Altísimo.

Porque no me afrentó un enemigo, lo cual habría soportado; ni se alzó contra mí el que me aborrecía, porque me hubiera ocultado de él:

¿Hasta cuándo maquinaréis contra un hombre? Pereceréis todos vosotros, caeréis como pared desplomada, como cerca derribada.

Será echado un puño de grano en tierra, en las cumbres de los montes; su fruto hará ruido como el Líbano, y los de la ciudad florecerán como la hierba de la tierra.

Pero hizo salir a su pueblo como ovejas, y los llevó por el desierto, como un rebaño.

Entonces despertó el Señor como de un sueño, como un valiente que grita excitado del vino;

En un instante habría yo derribado a sus enemigos, y vuelto mi mano sobre sus adversarios.

Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos: Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios, que habitar en las moradas de maldad.

Tú quebrantaste a Rahab como a un muerto; con tu brazo fuerte esparciste a tus enemigos.

Entonces hablaste en visión a tu santo, y dijiste: He puesto el socorro sobre uno que es poderoso; he enaltecido a un escogido de mi pueblo.

Como la luna será firme para siempre, y como un testigo fiel en el cielo. (Selah)

Los haces pasar como avenida de aguas; son como un sueño; como la hierba que crece en la mañana.

Porque todos nuestros días declinan a causa de tu ira; acabamos nuestros años como un pensamiento.

Jehová Dios nuestro, tú les respondías: Tú les fuiste un Dios perdonador, aunque cobraste venganza de sus malas obras.

cuando andaban de nación en nación, de un reino a otro pueblo;

Envió un varón delante de ellos, a José, que fue vendido por siervo.

Abrió la peña, y fluyeron aguas; corrieron por los sequedales como un río.

En verdad que me he comportado y he acallado mi alma, como un niño destetado de su madre; como un niño destetado está mi alma.

hasta que halle un lugar para Jehová, una morada para el Fuerte de Jacob.

Que el justo me castigue, será un favor, y que me reprenda será un excelente bálsamo que no me herirá la cabeza. Pero mi oración tendrán, aun en sus calamidades.

Que nuestros hijos sean como plantas crecidas en su juventud; Nuestras hijas como las esquinas labradas a manera de las de un palacio;

Reina Valera Gómez (© 2010)