'Coma' en la Biblia
``De manera que si se come de la carne del sacrificio de sus ofrendas de paz al tercer día, el que la ofrezca no será acepto, ni se le tendrá en cuenta. Será cosa ofensiva, y la persona que coma de ella llevará su {propia} iniquidad.
``Pero la persona que coma la carne del sacrificio de las ofrendas de paz que pertenecen al SEÑOR, estando inmunda, esa persona será cortada de entre su pueblo.
``Y cuando alguien toque alguna cosa inmunda, ya sea inmundicia humana o un animal inmundo, o cualquier cosa abominable {e} inmunda y coma de la carne del sacrificio de la ofrenda de paz que pertenece al SEÑOR, esa persona será cortada de entre su pueblo."
``Porque cualquiera que coma grasa del animal del cual se ofrece una ofrenda encendida al SEÑOR, la persona que coma será cortada de entre su pueblo.
``Toda persona que coma cualquier {clase de} sangre, esa persona será cortada de entre su pueblo."
``Y el que coma parte de su cadáver lavará sus vestidos y quedará inmundo hasta el atardecer; y el que levante el cadáver lavará sus vestidos y quedará inmundo hasta el atardecer.
También, el que duerma en la casa lavará sus ropas, y el que coma en la casa lavará sus ropas.
``Si cualquier hombre de la casa de Israel, o de los forasteros que residen entre ellos, come sangre, yo pondré mi rostro contra esa persona que coma sangre, y la cortaré de entre su pueblo.
Porque {en cuanto a la} vida de toda carne, su sangre es su vida. Por tanto, dije a los hijos de Israel: No comeréis la sangre de ninguna carne, porque la vida de toda carne es su sangre; cualquiera que la coma será exterminado.
Y cuando alguna persona, sea nativo o forastero, coma {de un animal} muerto, o que haya sido despedazado {por fieras}, lavará sus vestidos y se bañará en agua, y quedará inmundo hasta el atardecer; entonces será limpio.
``Y todo el que lo coma llevará su iniquidad, porque ha profanado lo santo del SEÑOR; y esa persona será cortada de entre su pueblo.
Mas si la hija del sacerdote fuere viuda, o repudiada, y no tuviere prole, y se hubiere regresado a la casa de su padre, como en su juventud, comerá del pan de su padre; pero que ningún extraño coma de él.