'Sidón' en la Biblia
¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón fueran hechas las maravillas que han sido hechas en vosotras, en otro tiempo se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.
Por tanto yo os digo, que a Tiro y a Sidón será más tolerable el castigo en el día del juicio, que a vosotras.
Y saliendo Jesús de allí, se fue a las partes de Tiro y de Sidón.
y de Jerusalén, y de Idumea, y del otro lado del Jordán. Y los que moran alrededor de Tiro y de Sidón, grande multitud, oyendo cuán grandes cosas hacía, vinieron a él.
Y levantándose de allí, se fue a los términos de Tiro y de Sidón; y entrando en casa, quiso que nadie lo supiera; mas no pudo ser escondido.
Volviendo a salir de los términos de Tiro, vino por Sidón al mar de Galilea, por mitad de los términos de Decápolis.
pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a Sarepta de Sidón, a una mujer viuda.
Y descendió con ellos, y se paró en un lugar llano, en compañía de sus discípulos, y una grande multitud de pueblo de toda Judea y de Jerusalén, y de la costa de Tiro y de Sidón, que habían venido a oírle, y para ser sanados de sus enfermedades;
¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Que si en Tiro y en Sidón hubieran sido hechas las virtudes que se han hecho en vosotras, hace ya días que, sentados en cilicio y ceniza, se habrían arrepentido.
Por tanto, Tiro y Sidón tendrán más remisión que vosotras en el juicio.
Y Herodes estaba enojado contra los de Tiro y los de Sidón; pero ellos vinieron concordes a él, y sobornado Blasto, que era el camarero del rey, pedían paz; porque las tierras de ellos eran abastecidas por las del rey.
Al otro día llegamos a Sidón; y Julio, tratando a Pablo humanamente, le permitió que fuera a los amigos, para ser de ellos asistido.