'Tienes' en la Biblia
Entonces los {dos} hombres dijeron a Lot: `` ¿A quién más tienes aquí? A {tus} yernos, a tus hijos, a tus hijas y quienquiera que tengas en la ciudad, sáca{los} de este lugar.
Dios oyó la voz del muchacho {que lloraba}; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: `` ¿Qué tienes, Agar? No temas, porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está.
Y Esaú dijo a su padre: `` ¿No tienes más que una bendición, padre mío? Bendíceme, {bendíceme} también a mí, padre mío." Y Esaú alzó su voz y lloró.
Cuando ella estaba en lo más duro del parto, la partera le dijo: ``No temas, porque ahora tienes este {otro} hijo."
`` ¿Qué prenda {tengo} que darte?" preguntó Judá. ``Tu sello, tu cordón y el báculo que tienes en la mano," dijo ella. Y él se {los} dio y se llegó a ella, y ella concibió de él.
``Y habitarás en la tierra de Gosén, y estarás cerca de mí, tú y tus hijos y los hijos de tus hijos, tus ovejas y tus vacas y todo lo que tienes.
"Allí proveeré también para ti, pues aún quedan cinco años de hambre, para que no caigas en la miseria tú, ni tu casa y todo lo que tienes."'
Y el SEÑOR le preguntó: `` ¿Qué es eso {que tienes} en la mano?" ``Una vara," respondió Moisés.
"Ahora pues, manda poner a salvo tus ganados y todo lo que tienes en el campo, {porque} todo hombre o {todo} animal que se encuentre en el campo, y no sea traído a la casa, morirá cuando caiga sobre ellos el granizo."'"
Pero Moisés contestó: ``Tú también tienes que darnos sacrificios y holocaustos para que {los} sacrifiquemos al SEÑOR nuestro Dios.
Pero Moisés le dijo: `` ¿Tienes celos por causa mía? ¡Ojalá todo el pueblo del SEÑOR fuera profeta, que el SEÑOR pusiera Su Espíritu sobre ellos!"
"A todos los habitantes de la región montañosa desde el Líbano hasta Misrefot Maim, a todos los Sidonios, yo los expulsaré de delante de los Israelitas. Solamente tú tienes que repartir la tierra por suerte a Israel como heredad tal como te he mandado.
Pero Josué dijo a la casa de José, a {las tribus} de Efraín a Manasés: ``Eres un pueblo numeroso y tienes gran poder. No te tocará {sólo} una suerte,
"Pero si tienes temor de descender, baja al campamento con tu criado Fura,
Cuando estaban cerca de la casa de Micaía, reconocieron la voz del joven Levita; y llegándose allá, le dijeron: `` ¿Quién te trajo aquí? ¿Qué estás haciendo en este {lugar} y qué tienes aquí?"
Luego Booz le dijo: ``Dame el manto que tienes puesto y sujétalo." Y ella lo sujetó, y él midió seis {porciones} de cebada y se {las} puso encima. Entonces ella entró en la ciudad.
"Ahora pues, ¿qué tienes a mano? Dame cinco panes, o lo que tengas."
David dijo a Ahimelec: `` ¿No tienes aquí a mano una lanza o una espada? Pues no traje ni espada ni armas conmigo, porque el asunto del rey era urgente."
y {le} dirán así: `Ten una larga vida, paz para ti, paz para tu casa y paz para todo lo que tienes.
~`He oído que tienes esquiladores. Ahora bien, tus pastores han estado con nosotros, y no los hemos maltratado, ni les ha faltado nada todos los días que estuvieron en Carmel.
Y el rey dijo a Siba: `` ¿Para qué tienes esto?" Y Siba respondió: ``Los asnos son para que monte la familia del rey, y el pan y la fruta de verano para que los jóvenes coman, y el vino para que beba cualquiera que se fatigue en el desierto."
Y Eliseo le dijo: `` ¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en casa." Y ella respondió: ``Su sierva no tiene en casa más que una vasija de aceite."
Fue el jinete a su encuentro, y dijo: ``Así dice el rey: ` ¿Hay paz?'" Y Jehú dijo: `` ¿Qué tienes tú que ver con la paz? Ponte detrás de mí." Y el centinela le avisó: ``El mensajero llegó hasta ellos, pero no regresó."
Entonces envió un segundo jinete, que vino a ellos, y dijo: ``Así dice el rey: ` ¿Hay paz?'" Y Jehú respondió: `` ¿Qué tienes tú que ver con la paz? Ponte detrás de mí."
Entonces el Rabsaces les dijo: ``Digan ahora a Ezequías: `Así dice el gran rey, el rey de Asiria: `` ¿Qué confianza es ésta que tú tienes?
"Además, {tienes} contigo muchos obreros, canteros, albañiles, carpinteros y todo experto en toda clase de obra.
"Y tú {tienes} las clases de los sacerdotes y los Levitas para todo el servicio de la casa de Dios; y todo voluntario con alguna habilidad estará contigo en toda la obra para toda clase de servicio. También los oficiales y todo el pueblo estarán completamente a tus órdenes."
Le diré a Dios: `No me condenes, Hazme saber que tienes contra mí.
¿Acaso tienes Tú ojos de carne, O ves como el hombre ve?
Sin embargo, tienes escondidas estas cosas en Tu corazón, Yo sé que esto está dentro de Ti:
Sellada está en un saco mi transgresión, Y tienes cubierta mi iniquidad.
Pero déjame decirte que no tienes razón en esto, Porque Dios es más grande que el hombre.
Si algo tienes que decir, respóndeme; Habla, porque deseo justificarte.
Pero si {tienes} inteligencia, oye esto, Escucha la voz de mis palabras.
¿Ha de retribuir El según tus condiciones, porque tú has rehusado? Porque tú tienes que escoger y no yo, Por tanto, declara lo que sabes.
Cuánto menos cuando dices que no Lo contemplas, Que la causa está delante de El, y tienes que esperarlo.
¿Dónde estabas tú cuando Yo echaba los cimientos de la tierra? Dí{melo,} si tienes inteligencia.
¿Acaso tienes tú un brazo como el de Dios, Y truenas con una voz como la suya?
Pero al impío Dios le dice: `` ¿Qué derecho tienes tú de hablar de Mis estatutos, Y de tomar Mi pacto en tus labios?
Tú tienes un brazo fuerte; Tu mano es poderosa, Tu diestra es exaltada.
No digas a tu prójimo: ``Ve y vuelve, Y mañana te {lo} daré," Cuando lo tienes contigo.
Si no tienes con qué pagar, ¿Por qué han de quitarte la cama de debajo de ti?
Cuando un hombre eche mano a su hermano en la casa de su padre, {le dirá:} ``Tú tienes manto, serás nuestro jefe, Y estas ruinas {estarán} bajo tu mando,"
~` ¿Qué es tuyo aquí, Y a quién tienes aquí, Que te has labrado aquí un sepulcro, {Como} el que labra en alto un sepulcro, {Como} el que esculpe una morada para sí en la peña?
Y el Rabsaces les dijo: ``Digan ahora a Ezequías: `Así dice el gran rey, el rey de Asiria: `` ¿Qué confianza es ésta que tú tienes?
`Hanamel, hijo de tu tío Salum, viene a verte y te dirá: ``Cómprate el campo que tengo en Anatot, porque tú tienes el derecho de rescate para comprarlo."'
"Y Hanamel, hijo de mi tío, vino a verme al patio de la guardia conforme a la palabra del SEÑOR, y me dijo: `Te ruego que compres el campo que tengo en Anatot, que está en la tierra de Benjamín, porque tú tienes el derecho de posesión y el rescate es tuyo; cómpralo para ti.' Entonces supe que ésta era la palabra del SEÑOR.
Entonces El me dijo: ``Hijo de hombre, come lo que tienes delante; cómete este rollo, y ve, habla a la casa de Israel."
Entonces le dijeron: ``Decláranos ahora por causa de quién nos {ha venido} esta calamidad. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres?"
Y el SEÑOR dijo: `` ¿Tienes acaso razón para enojarte?"
Entonces Dios le preguntó a Jonás: `` ¿Tienes acaso razón para enojarte por causa de la planta?" ``Tengo mucha razón para enojarme hasta la muerte," le respondió.
`` ¿Qué tienes que ver con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quien Tú eres: el Santo de Dios."
Pero El volviéndose y mirando a Sus discípulos, reprendió a Pedro y le dijo: `` ¡Quítate de delante de Mí, Satanás!, porque no tienes en mente las cosas de Dios, sino las de los hombres."
Jesús, mirándolo, lo amó y le dijo: ``Una cosa te falta: ve {y} vende cuanto tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; entonces vienes y Me sigues."
Entonces María dijo: ``Aquí tienes a la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra." Y el ángel se fue de su presencia.
``Déja{nos}. ¿Qué tienes que ver con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién Tú eres: el Santo de Dios."
Al ver a Jesús, gritó y cayó delante de El, y dijo en alta voz: `` ¿Qué tienes Tú que ver conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te ruego que no me atormentes."
~`Y diré a mi alma: alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete.'
Cuando Jesús oyó {esto,} le dijo: ``Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme."
Ella Le dijo: ``Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo; ¿de dónde, pues, tienes esa agua viva?
porque cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido; en eso has dicho la verdad."
Simón Pedro Le respondió: ``Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
La multitud contestó: `` ¡Tienes un demonio! ¿Quién Te quiere matar?"
Los Judíos Le contestaron: `` ¿No decimos con razón que Tú eres Samaritano y que tienes un demonio?"
Los Judíos Le dijeron: ``Ahora sí sabemos que tienes un demonio. Abraham murió, y {también} los profetas, y Tú dices: `Si alguien guarda Mi palabra no probará jamás la muerte.'
Por esto los Judíos Le dijeron: ``Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?"
`` ¡Jamás me lavarás los pies!" Le dijo Pedro. ``Si no te lavo, no tienes parte conmigo," le respondió Jesús.
"No tienes parte ni suerte en este asunto (esta enseñanza), porque tu corazón no es recto delante de Dios.
El comandante, tomándolo de la mano, y llevándolo aparte, le preguntó: `` ¿Qué es lo que tienes que informarme?"
Por lo cual no tienes excusa, oh hombre, quienquiera {que seas tú} que juzgas, pues al juzgar a otro, a ti mismo te condenas, porque tú que juzgas practicas las mismas cosas.
¿O tienes en poco las riquezas de Su bondad y tolerancia y paciencia, ignorando que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento?
instructor de los necios, maestro de los faltos de madurez; que tienes en la Ley la expresión misma del conocimiento y de la verdad,
Y si el que es físicamente incircunciso guarda la Ley, ¿no te juzgará a ti, que aunque tienes la letra {de la Ley} y eres circuncidado, eres transgresor de la Ley?
La fe que tú tienes, ten{la} conforme a tu propia convicción delante de Dios. Dichoso el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
Porque ¿quién te distingue? ¿Qué tienes que no recibiste? Y si lo recibiste, ¿por qué te jactas como si no lo hubieras recibido?
Porque si alguien te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado {a la mesa} en un templo de ídolos, ¿no será estimulada su conciencia, si él es débil, a comer lo sacrificado a los ídolos?
Porque escrito está: ``REGOCIJATE, OH ESTERIL, LA QUE NO CONCIBES; PRORRUMPE Y CLAMA, TU QUE NO TIENES DOLORES DE PARTO, PORQUE MAS SON LOS HIJOS DE LA DESOLADA, QUE DE LA QUE TIENE MARIDO."
porque oigo de tu amor y de la fe que tienes hacia el Señor Jesús y hacia todos los santos.
Si me tienes, pues, por compañero, acéptalo como {me aceptarías} a mí.
Pero alguien dirá: ``Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras."
"Tienes perseverancia, y has sufrido por Mi nombre y no has desmayado.
"Sin embargo tienes esto: que aborreces las obras de los Nicolaítas, las cuales Yo también aborrezco.
"Pero tengo unas pocas cosas contra ti, porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los Israelitas, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer {actos de} inmoralidad.
"Así tú también tienes algunos que de la misma manera mantienen la doctrina de los Nicolaítas.
``Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: `El que tiene los siete Espíritus de Dios y las siete estrellas, dice esto: ``Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, pero estás muerto.
"Pero tienes unos pocos en Sardis que no han manchado sus vestiduras, y andarán conmigo {vestidos} de blanco, porque son dignos.
``Yo conozco tus obras. Por tanto he puesto delante de ti una puerta abierta que nadie puede cerrar. Aunque tienes poco poder, has guardado Mi palabra y no has negado Mi nombre.
"Vengo pronto. Retén firme lo que tienes, para que nadie tome tu corona.