Santiago 1:22

Mas sed hacedores de la palabra, y no solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.

Romanos 2:13

Porque no son los oidores de la ley los justos para con Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.

Mateo 12:50

Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo, ése es mi hermano, y hermana, y madre.

Lucas 6:46-48

¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?

Juan 13:17

Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis si las hiciereis.

Mateo 7:21-27

No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo.

Mateo 28:20

enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Lucas 11:28

Y Él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan.

Lucas 12:47-48

Y aquel siervo que sabía la voluntad de su señor y no se preparó, ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.

1 Corintios 6:9

¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os engañéis: Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,

1 Corintios 15:33

No os engañéis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.

Gálatas 6:3

Porque si alguno piensa de sí que es algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña.

Gálatas 6:7

No os engañéis; Dios no puede ser burlado; pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

Filipenses 4:8

Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensad.

Colosenses 3:17

Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias al Dios y Padre por medio de Él.

Tito 3:3

Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y diversos placeres, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, aborreciéndonos unos a otros.

Santiago 1:26

Si alguno parece ser religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana.

1 Corintios 3:18

Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree ser sabio en este mundo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio.

Santiago 2:14-20

Hermanos míos, ¿qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?

Santiago 4:17

Así que, al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.

2 Pedro 2:13

y recibirán la recompensa de su injusticia, ya que tienen por delicia el gozar del placer en pleno día. Éstos son suciedades y manchas, quienes aun mientras comen con vosotros, se recrean en sus engaños.

1 Juan 1:8

Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.

1 Juan 2:3

Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos.

1 Juan 3:7

Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia, es justo, como también Él es justo.

3 Juan 1:11

Amado, no sigas lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; mas el que hace lo malo, no ha visto a Dios.

Apocalipsis 12:9

Y fue lanzado fuera aquel gran dragón, la serpiente antigua, llamada Diablo y Satanás, el cual engaña a todo el mundo; fue arrojado en tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.

Apocalipsis 22:7

He aquí, yo vengo pronto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.

Isaías 44:20

De ceniza se alimenta; su corazón engañado le desvía, para que no libre su alma, ni diga: ¿No es una mentira lo que tengo en mi mano derecha?

Abdías 1:3

La soberbia de tu corazón te ha engañado, tú que moras en las hendiduras de las peñas, en tu altísima morada; que dices en tu corazón: ¿Quién me derribará a tierra?

2 Timoteo 3:13

Mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)