20 Versículo de la Biblia sobre Correas
Versículos Más Relevantes
Y la mano del SEÑOR estaba sobre Elías, quien ajustándose el cinturón corrió delante de Acab hasta Jezreel.
Estaban junto a la piedra grande que está en Gabaón, cuando Amasa vino a su encuentro. Joab estaba vestido con su ropa militar, y sobre ella llevaba un cinturón atado a la cintura con espada en la vaina y mientras avanzaba, se le cayó {la espada.}
``También sabes lo que me hizo Joab, hijo de Sarvia, lo que hizo a los dos jefes de los ejércitos de Israel, a Abner, hijo de Ner, y a Amasa, hijo de Jeter, a los cuales mató; también derramó sangre de guerra en {tiempo de} paz. Y puso sangre de guerra en el cinturón que lo ceñía y en las sandalias que tenía en sus pies.
Entonces Eliseo dijo a Giezi: ``Prepárate, toma mi báculo en tu mano, y vete. Si encuentras a alguien, no lo saludes, y si alguien te saluda, no le respondas, y pon mi báculo sobre el rostro del niño."
El profeta Eliseo llamó a uno de los hijos de los profetas, y le dijo: ``Prepárate, toma este frasco de aceite en tu mano y ve a Ramot de Galaad.
Séale como vestidura con que se cubra, Y por cinto con que se ciña siempre.
En ella nadie está cansado ni nadie se tambalea, Ninguno dormita ni duerme. A ninguno se le ha desatado el cinturón de la cintura, Ni se le ha roto la correa de su sandalia.
Así me dijo el SEÑOR: ``Ve y cómprate un cinturón de lino y póntelo en la cintura, pero no lo metas en agua." Compré, pues, el cinturón conforme a la palabra del SEÑOR, y me lo puse en la cintura. Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR por segunda vez:Leer más.
``Toma el cinturón que has comprado, que llevas a la cintura, y levántate, vete al Eufrates y escóndelo allá en una hendidura de la peña." Fui, pues, y lo escondí junto al Eufrates como el SEÑOR me había mandado. Después de muchos días el SEÑOR me dijo: ``Levántate, vete al Eufrates y toma de allí el cinturón que te mandé que escondieras allá." Fui, pues, al Eufrates y cavé, tomé el cinturón del lugar donde lo había escondido, y resultó que el cinturón estaba podrido; no servía para nada. Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR: ``Así dice el SEÑOR: `De la misma manera haré que se pudra la soberbia de Judá y la gran soberbia de Jerusalén. ~`Este pueblo malvado, que rehúsa escuchar Mis palabras, que anda en la terquedad de su corazón y se ha ido tras otros dioses a servirles y a postrarse ante ellos, ha de ser como este cinturón que no sirve para nada. ~`Porque como el cinturón se adhiere a la cintura del hombre, así hice adherirse a Mí a toda la casa de Israel y a toda la casa de Judá,' declara el SEÑOR, `a fin de que fueran para Mí por pueblo y por renombre, para alabanza y para gloria, pero no escucharon (obedecieron).'
alcé los ojos y miré, y había un hombre vestido de lino, cuya cintura estaba ceñida con {un cinturón de} oro puro de Ufaz.
"No se provean de oro, ni de plata, ni de cobre {para llevar} en sus cintos,
y les ordenó que no llevaran nada para el camino, sino sólo un bordón; ni pan, ni alforja, ni dinero en el cinto;
quien vino a {ver}nos, y tomando el cinto de Pablo, se ató las manos y los pies, y dijo: ``Así dice el Espíritu Santo: `Así atarán los Judíos en Jerusalén al dueño de este cinto, y lo entregarán en manos de los Gentiles.'"
Jonatán se quitó el manto que llevaba puesto y se lo dio a David con sus ropas militares, incluyendo su espada, su arco y su cinturón.
Joab dijo al hombre que le había avisado: ``Así que {tú lo} viste, ¿por qué no lo heriste allí {derribándolo} a tierra? Yo te hubiera dado diez {monedas} de plata y un cinturón."
ceñidos sus lomos con cinturones {y} amplios turbantes en sus cabezas, con aspecto de oficiales todos ellos, semejantes a los Babilonios de Caldea, tierra de su nacimiento.
``{Era} un hombre cubierto de pelo, con un cinturón de cuero ceñido a sus lomos," respondieron ellos. ``Es Elías el Tisbita," dijo el rey.
Y él, Juan, tenía un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero a la cintura; y su comida era de langostas (saltamontes) y miel silvestre.
Juan estaba vestido de pelo de camello, tenía un cinto de cuero a la cintura, y comía langostas (saltamontes) y miel silvestre.
La justicia será ceñidor de Sus lomos, Y la fidelidad ceñidor de Su cintura.
Estén, pues, firmes, CEÑIDA SU CINTURA CON LA VERDAD, REVESTIDOS CON LA CORAZA DE LA JUSTICIA,