'Conoce' en la Biblia

Oráculo del que escucha las palabras de Dios, y conoce la sabiduría del Altísimo; del que ve la visión del Todopoderoso, caído, pero con los ojos descubiertos.

He aquí, esto lo hemos examinado, {y} así es; óyelo, y conóce{lo} para tu bien.

Porque El conoce a los hombres falsos, y ve la iniquidad sin investigar.

Ciertamente tales son las moradas del impío, este es el lugar {del que} no conoce a Dios.

Senda que ave de rapiña no conoce, ni que ojo de halcón ha alcanzado a ver;

No conoce el hombre su valor, ni se halla en la tierra de los vivientes.

Dios entiende el camino de ella, y conoce su lugar.

Pues El conoce sus obras, de noche {los} derriba y son aplastados.

Porque el SEÑOR conoce el camino de los justos, mas el camino de los impíos perecerá.

El SEÑOR conoce los días de los íntegros, y su herencia será perpetua.

¿no se habría dado cuenta Dios de esto? Pues El conoce los secretos del corazón.

¿Quién conoce el poder de tu ira, y tu furor conforme al temor que se te debe?

El SEÑOR conoce los pensamientos del hombre, {sabe} que son {sólo} un soplo.

El hizo la luna para {medir} las estaciones; el sol conoce el lugar de su ocaso.

Porque el SEÑOR es excelso, y atiende al humilde, mas al altivo conoce de lejos.

Escudríñame, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis inquietudes.

El enojo del necio se conoce al instante, mas el prudente oculta la deshonra.

El corazón conoce su propia amargura, y un extraño no comparte su alegría.

Conoce bien la condición de tus rebaños, {y} presta atención a tu ganado;

El que guarda el mandato {real} no experimenta ningún mal; y el corazón del sabio conoce el tiempo y el modo.

y vi toda la obra de Dios, decidí que el hombre no puede descubrir la obra que se ha hecho bajo el sol. Aunque el hombre busque con afán, no {la} descubrirá; y aunque el sabio diga que {la} conoce, no puede descubrir{la}.

Porque el hombre tampoco conoce su tiempo: como peces atrapados en la red traicionera, y como aves apresadas en la trampa, así son atrapados los hijos de los hombres en el tiempo malo cuando éste cae de repente sobre ellos.

El buey conoce a su dueño y el asno el pesebre de su amo; {pero} Israel no conoce, mi pueblo no tiene entendimiento.

¿Ay de los que van muy hondo para esconder sus planes al SEÑOR, y realizan sus obras en tinieblas y dicen: ¿Quién nos ve, o quién nos conoce?

Camino de paz no conocen, y no hay justicia en sus senderos; han torcido a su favor las sendas, cualquiera que ande en ellas no conoce la paz.

Porque tú eres nuestro Padre, aunque Abraham no nos conoce, ni nos reconoce Israel. Tú, oh SEÑOR, eres nuestro Padre, desde la antigüedad tu nombre es Nuestro Redentor.

Porque mi pueblo es necio, no me conoce; hijos torpes son, no son inteligentes. Astutos son para hacer el mal, pero hacer el bien no saben.

`Aun la cigüeña en el cielo conoce sus estaciones, y la tórtola, la golondrina y la grulla guardan la época de sus migraciones; pero mi pueblo no conoce la ordenanza del SEÑOR.

mas el que se gloríe, gloríese de esto: de que me entiende y me conoce, pues yo soy el SEÑOR que hago misericordia, derecho y justicia en la tierra, porque en estas cosas me complazco --declara el SEÑOR.

Y no tendrán que enseñar más cada uno a su prójimo y cada cual a su hermano, diciendo: ``Conoce al SEÑOR", porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande --declara el SEÑOR-- pues perdonaré su maldad, y no recordaré más su pecado.

El es quien revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y la luz mora con El.

Con halagos hará apostatar a los que obran inicuamente hacia el pacto, mas el pueblo que conoce a su Dios se mostrará fuerte y actuará.

Bueno es el SEÑOR, una fortaleza en el día de la angustia, y conoce a los que en El se refugian.

El SEÑOR es justo en medio de ella; no cometerá injusticia. Cada mañana saca a luz su juicio, nunca falta; pero el injusto no conoce la vergüenza.

Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo {se lo} quiera revelar.

O haced bueno el árbol y bueno su fruto, o haced malo el árbol y malo su fruto; porque por el fruto se conoce el árbol.

Pues cada árbol por su fruto se conoce. Porque {los hombres} no recogen higos de los espinos, ni vendimian uvas de una zarza.

Y El les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos ante los hombres, pero Dios conoce vuestros corazones, porque lo que entre los hombres es de alta estima, abominable es delante de Dios.

Pero esta multitud que no conoce de la ley, maldita es.

de igual manera que el Padre me conoce y yo conozco al Padre, y doy mi vida por las ovejas.

{es decir,} el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque ni le ve ni le conoce, {pero} vosotros sí le conocéis porque mora con vosotros y estará en vosotros.

Y Dios, que conoce el corazón, les dio testimonio dándoles el Espíritu Santo, así como también {nos lo dio} a nosotros;

porque lo que se conoce acerca de Dios es evidente dentro de ellos, pues Dios se lo hizo evidente.

Porque entre los hombres, ¿quién conoce los {pensamientos} de un hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Asimismo, nadie conoce los {pensamientos} de Dios, sino el Espíritu de Dios.

Y también: EL SEÑOR CONOCE LOS RAZONAMIENTOS de los sabios, LOS CUALES SON INUTILES.

No obstante, el sólido fundamento de Dios permanece firme, teniendo este sello: El Señor conoce a los que son suyos, y: Que se aparte de la iniquidad todo aquel que menciona el nombre del Señor.

Y NINGUNO DE ELLOS ENSEÑARA A SU CONCIUDADANO NI NINGUNO A SU HERMANO, DICIENDO: ``CONOCE AL SEÑOR", PORQUE TODOS ME CONOCERAN, DESDE EL MENOR HASTA EL MAYOR DE ELLOS.

Mirad cuán gran amor nos ha otorgado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; y {eso} somos. Por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a El.

Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de la verdad y el espíritu del error.

Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios, y todo el que ama es nacido de Dios y conoce a Dios.

El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor.

`El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré del maná escondido y le daré una piedrecita blanca, y grabado en la piedrecita un nombre nuevo, el cual nadie conoce sino aquel que lo recibe.'"

Sus ojos {son} una llama de fuego, y sobre su cabeza {hay} muchas diademas, y tiene un nombre escrito que nadie conoce sino El.