'Cordón' en la Biblia
`` ¿Qué prenda {tengo} que darte?" preguntó Judá. ``Tu sello, tu cordón y el báculo que tienes en la mano," dijo ella. Y él se {los} dio y se llegó a ella, y ella concibió de él.
Cuando la sacaban, ella envió a decir a su suegro: ``Del hombre a quien pertenecen estas cosas estoy encinta." ``Le ruego que examine y vea de quién es este sello, este cordón y este báculo," añadió ella.
"Atarán el pectoral por sus anillos a los anillos del efod con un cordón azul, para que esté sobre el cinto tejido del efod, y para que el pectoral no se desprenda del efod.
"La fijarás en un cordón azul, y estará sobre la tiara. Estará en la parte delantera de la tiara.
Ataron el pectoral por sus anillos a los anillos del efod con un cordón azul, para que estuviera sobre el cinto tejido del efod y para que el pectoral no se desprendiera del efod, tal como el SEÑOR había mandado a Moisés.
Y le pusieron un cordón azul para sujetarla sobre la tiara por arriba, tal como el SEÑOR había mandado a Moisés.
entonces el sacerdote mandará tomar dos avecillas vivas y limpias, madera de cedro, un cordón escarlata e hisopo para el que ha de ser purificado.
"{En cuanto a} la avecilla viva, la tomará junto con la madera de cedro, el cordón escarlata y el hisopo, y los mojará {junto} con la avecilla viva en la sangre del ave muerta sobre el agua corriente.
"Entonces, para purificar la casa, tomará dos avecillas, madera de cedro, un cordón escarlata e hisopo,
"Después tomará la madera de cedro, el hisopo y el cordón escarlata, {junto} con la avecilla viva, y los mojará en la sangre de la avecilla muerta y en el agua corriente, y rociará la casa siete veces.
"Así purificará la casa con la sangre de la avecilla y con el agua corriente, junto con la avecilla viva, con la madera de cedro, con el hisopo y con el cordón escarlata.
``Habla a los Israelitas y diles que se hagan flecos en los bordes de sus vestidos, por sus generaciones, y que pongan en el fleco de cada borde un cordón azul.
a menos que, cuando entremos en la tierra, ates este cordón de hilo escarlata a la ventana por la cual nos dejas bajar, y reúnas contigo en la casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la casa de tu padre.
Rahab respondió: ``Conforme a lo que ustedes han dicho, así sea." Y los envió. Ellos se fueron, y ella ató el cordón escarlata a la ventana.
"En cuanto a tu nacimiento, el día que naciste no fue cortado tu cordón umbilical, ni fuiste lavada con agua para limpiarte; no fuiste frotada con sal, ni envuelta en pañales.