617 casos

'Cuales' en la Biblia

Estas son las generaciones de los hijos de Noé: Sem, Cam y Jafet, a los cuales nacieron hijos después del diluvio.

Y vino uno que escapó, y lo denunció a Abram el hebreo, que habitaba en el alcornocal de Mamre amorreo, hermano de Escol y hermano de Aner, los cuales estaban confederados con Abram.

Sacando solamente lo que comieron los jóvenes, y la parte de los varones que fueron conmigo, Aner, Escol, y Mamre; los cuales tomarán su parte.

y te juramentaré por el SEÑOR, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no has de tomar mujer para mi hijo de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito;

Dame mis mujeres y mis hijos, por las cuales he servido contigo, porque tú sabes el servicio que te he hecho.

Y puso las varas que había mondado en las pilas, en los abrevaderos del agua donde las ovejas venían a beber, delante de las ovejas, las cuales se calentaban viniendo a beber.

Y nacieron a José dos hijos antes que viniera el primer año del hambre, los cuales le dio a luz Asenat, hija de Potifera, sacerdote de On.

Y habló el rey de Egipto a las parteras de las hebreas, una de las cuales se llamaba Sifra, y otra Fúa, y les dijo:

Tenía el sacerdote de Madián siete hijas, las cuales vinieron a sacar agua, para llenar las pilas y dar de beber a las ovejas de su padre.

sino que demandará cada mujer a su vecina y a su huéspeda vasos de plata, vasos de oro, y vestidos, los cuales pondréis sobre vuestros hijos y vuestras hijas, y despojaréis a Egipto.

Este es aquel Aarón y aquel Moisés, a los cuales el SEÑOR dijo: Sacad a los hijos de Israel de la tierra de Egipto por sus ejércitos.

pues echó cada uno su vara, las cuales se volvieron dragones; mas la vara de Aarón tragó las varas de ellos.

Y el río criará ranas, las cuales subirán, y entrarán en tu casa, y en la cámara de tu cama, y sobre tu cama, y en las casas de tus siervos, y en tu pueblo, y en tus hornos, y en tus artesas;

Los cuales juzgarán al pueblo en todo tiempo; y será que todo negocio grave lo traerán a ti, y ellos juzgarán todo negocio pequeño: alivia así la carga de sobre ti, y la llevarán ellos contigo.

Los cuales juzgaban al pueblo en todo tiempo; el negocio arduo lo traían a Moisés, y ellos juzgaban todo negocio pequeño.

Porque mi Angel irá delante de ti, y te introducirá a la tierra del amorreo, y del heteo, y del ferezeo, y del cananeo, y del heveo, y del jebuseo, a los cuales yo haré cortar.

Y envió a los jóvenes de los hijos de Israel, los cuales ofrecieron holocaustos y sacrificaron becerros como sacrificios de paz al SEÑOR.

Y harás unas varas de madera de cedro, las cuales cubrirás de oro.

Y le harás cuatro anillos de oro, los cuales pondrás en las cuatro esquinas que corresponden a sus cuatro pies.

Y le harás siete lámparas, las cuales le pondrás encima para que alumbren hacia su delantera.

Harás también cincuenta corchetes de oro, con los cuales juntarás las cortinas la una con la otra, y se formará un tabernáculo.

Harás asimismo cincuenta corchetes de bronce, los cuales meterás por las lazadas; y juntarás la tienda, y será una.

las cuales se unirán por abajo, y asimismo se juntarán por su alto a un gozne; así será con las otras dos que estarán a las dos esquinas.

Y harás para la cortina cinco columnas de cedro, las cuales cubrirás de oro, con sus capiteles de oro; y harás de fundición cinco basas de bronce para ellas.

Harás también varas para el altar, varas de madera de cedro, las cuales cubrirás de bronce.

Los cuales tomarán oro, y cárdeno, y púrpura, y carmesí, y lino fino,

y dos cadenillas de oro fino; las cuales harás de hechura de trenza; y fijarás las cadenas de hechura de trenza en los engastes.

Y harás en el pectoral dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos extremos del pectoral.

Harás también dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos extremos del pectoral, en su orilla que está al lado del efod de la parte de adentro.

Harás asimismo dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos lados del efod abajo en la parte delantera, delante de su juntura sobre el cinto especial del efod.

y panes sin levadura, y tortas sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite; las cuales harás de flor de harina de trigo;

Y comerán aquellas cosas con las cuales fue hecha la reconciliación, para llenar sus manos para ser santificados; mas el extranjero no comerá, porque son santas.

Acuérdate de Abraham, de Isaac, y de Israel tus siervos, a los cuales has jurado por ti mismo, y les has dicho: Yo multiplicaré vuestra simiente como las estrellas del cielo; y daré a vuestra simiente toda esta tierra que he dicho, y la tomarán por heredad para siempre.

Y después se acercaron todos los hijos de Israel, a los cuales mandó todas las cosas que el SEÑOR le había dicho en el monte de Sinaí.

Y todos los sabios de corazón entre los que hacían la obra, hicieron el tabernáculo de diez cortinas, de lino torcido, y de cárdeno, y de púrpura y carmesí; las cuales hicieron de obra primorosa, con querubines.

Hizo también cincuenta corchetes de oro, con los cuales juntó las cortinas, la una con la otra; y se hizo un tabernáculo.

las cuales se juntaban por abajo, y asimismo por arriba a un gozne; y así hizo a la una y a la otra en las dos esquinas.

Y para él hizo cuatro columnas de cedro; y las cubrió de oro, los capiteles de las cuales eran de oro; e hizo para ellas cuatro basas de plata de fundición.

Delante de la moldura estaban los anillos, por los cuales se metían las varas para llevar la mesa.

E hizo sus cuernos a sus cuatro esquinas, los cuales eran de la misma pieza, y lo recubrió de bronce.

Hicieron además dos anillos de oro, los cuales pusieron en las dos orillas del efod, abajo en la parte delantera, delante de su juntura, sobre el cinto especial del efod.

las cuales porciones mandó El SEÑOR que les dieran, desde el día en que él los ungió de entre los hijos de Israel, por estatuto perpetuo por sus generaciones.

Y mirará la plaga; y si se ve la plaga en las paredes de la casa con manchas verdosas, profundas o bermejas, las cuales parecieren más hundidas que la pared,

Y sacará fuera del campamento el novillo del pecado, y el macho cabrío del pecado, la sangre de los cuales fue metida para hacer la reconciliación en el santuario; y quemarán en el fuego sus pellejos, y sus carnes, y su estiércol.

Y nunca más sacrificarán sus sacrificios a los demonios, tras de los cuales fornican; tendrán esto por estatuto perpetuo por sus edades.

Por tanto mis estatutos y mis derechos guardaréis, los cuales haciendo el hombre, vivirá en ellos. Yo soy el SEÑOR.

Por tanto, vosotros haréis diferencia entre animal limpio e inmundo, y entre ave inmunda y limpia; y no ensuciéis vuestras personas en los animales, ni en las aves, ni en ninguna cosa que se va arrastrando por la tierra, las cuales os he apartado por inmundas.

No contaminarán, pues, las santificaciones de los hijos de Israel, las cuales apartan para el SEÑOR;

Habla a los hijos de Israel, y diles: Las fiestas del SEÑOR, a las cuales haréis convocación general de todo el pueblo, éstas serán mis fiestas.

Estas son las fiestas del SEÑOR, las convocaciones santas, a las cuales convocaréis en sus tiempos determinados.

Y será de Aarón y de sus hijos, los cuales lo comerán en el lugar santo; porque es cosa santísima para él, de las ofrendas encendidas al SEÑOR, por fuero perpetuo.

También compraréis de los hijos de los forasteros que viven entre vosotros, y de los que del linaje de ellos son nacidos en vuestra tierra, que están con vosotros; los cuales tendréis por posesión.

Porque míos son los hijos de Israel; son esclavos míos, a los cuales saqué de la tierra de Egipto. YO SOY el SEÑOR vuestro Dios.

Estos fueron los contados, los cuales contaron Moisés y Aarón y los doce varones príncipes de Israel, un varón por cada casa de sus padres.

Y tomarán todos los vasos del ministerio, con los cuales ministren en el santuario, y los pondrán en el paño cárdeno, y los cubrirán con la cubierta de pieles de tejones, y los pondrán sobre una vara.

y pondrán sobre él todos los vasos con los cuales se ministren: las paletas, los garfios, los braseros, y los tazones, todos los vasos del altar; y extenderán sobre él la cubierta de pieles de tejones, y le pondrán sobre las varas.

Estos fueron los contados de las familias de Coat, todos los que ministran en el tabernáculo del testimonio, los cuales contaron Moisés y Aarón, como lo mandó el SEÑOR por mano de Moisés.

Estos son los contados de las familias de los hijos de Gersón, todos los que ministran en el tabernáculo del testimonio, los cuales contaron Moisés y Aarón por mandato del SEÑOR.

Estos fueron los contados de las familias de los hijos de Merari, los cuales contaron Moisés y Aarón, según lo mandó el SEÑOR por mano de Moisés.

Como lo mandó el SEÑOR por mano de Moisés fueron contados, cada uno según su ministerio, y según su cargo; los cuales contó Moisés, como le fue mandado.

Así hombres como mujeres echaréis, fuera del campamento los echaréis; para que no contaminen el campamento de aquellos entre los cuales yo habito.

entonces los príncipes de Israel, las cabezas de las casas de sus padres, los cuales eran los príncipes de las tribus, que estaban sobre los contados, ofrecieron;

Hazte dos trompetas de plata; de obra de martillo las harás, las cuales te servirán para convocar la congregación, y para hacer mover el campamento.

Y habían quedado en el campamento dos de los varones, el uno se llamaba Eldad y el otro Medad, sobre los cuales también reposó el espíritu; estaban éstos entre los inscritos, mas no habían salido al tabernáculo; y comenzaron a profetizar en el campamento.

Los nombres de los cuales son éstos: De la tribu de Rubén, Samúa hijo de Zacur.

y dirán los habitantes de esta tierra, los cuales ya han oído que tú, oh SEÑOR, estabas en medio de este pueblo, que ojo a ojo aparecías tú, oh SEÑOR, y que tu nube estaba sobre ellos, y que de día ibas delante de ellos en columna de nube, y de noche en columna de fuego;

En este desierto caerán vuestros cuerpos; todos vuestros contados según toda vuestra cuenta, de veinte años arriba, los cuales habéis murmurado contra mí;

Mas vuestros chiquitos, de los cuales dijisteis que serían por presa, yo los introduciré, y ellos conocerán la tierra que vosotros despreciasteis.

Y os servirá de fleco, para que cuando lo viereis, os acordéis de todos los mandamientos del SEÑOR, para ponerlos por obra; y no miréis en pos de vuestro corazón y de vuestros ojos, en pos de los cuales fornicáis.

Las primicias de todas las cosas de la tierra de ellos, las cuales traerán al SEÑOR, serán tuyas; todo limpio en tu casa comerá de ellas.

Estas son las aguas de Meriba (la rencilla), por las cuales riñeron los hijos de Israel con el SEÑOR, y él se santificó en ellos.

Los cuales vinieron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: Te ruego que no dejes de venir a mí;

las cuales llamaron al pueblo a los sacrificios de sus dioses; y el pueblo comió, y se inclinó a sus dioses.

Que la tierra abrió su boca y tragó a ellos y a Coré, cuando aquella compañía murió, cuando consumió el fuego doscientos cincuenta varones, los cuales fueron por ejemplo.

Estos son los contados por Moisés y Eleazar el sacerdote, los cuales contaron los hijos de Israel en los campos de Moab, junto al Jordán de Jericó.

Y entre éstos ninguno hubo de los contados por Moisés y Aarón el sacerdote, los cuales contaron a los hijos de Israel en el desierto de Sinaí.

Y las hijas de Zelofehad, hijo de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, de las familias de Manasés, hijo de José, los nombres de las cuales eran Maala, y Noa, y Hogla, y Milca, y Tirsa, llegaron;

Y los hijos de Rubén y los hijos de Gad tenían muchísimo ganado; los cuales viendo la tierra de Jazer y de Galaad, les pareció el lugar, lugar de ganado.

Estas son las partidas de los hijos de Israel, los cuales salieron de la tierra de Egipto por sus ejércitos, por mano de Moisés y Aarón.

Y de las ciudades que daréis a los levitas, seis ciudades serán de refugio, las cuales daréis para que el homicida se acoja allá; y además de éstas daréis cuarenta y dos ciudades.

Tres ciudades daréis de este lado del Jordán, y tres ciudades daréis en la tierra de Canaán; las cuales serán ciudades de refugio.

las cuales, si se casaren con algunos de los hijos de las otras tribus de los hijos de Israel, la herencia de ellas será así disminuida de la herencia de nuestros padres, y será añadida a la herencia de la tribu a que serán unidas; y será quitada de la suerte de nuestra heredad.

Y vuestros chiquitos, de los cuales dijisteis: Serán por presa; y vuestros hijos que no saben hoy lo bueno ni lo malo, ellos entrarán allá, y a ellos la daré, y ellos la heredarán.

Y en Seir habitaron antes los horeos, a los cuales heredaron los hijos de Esaú; y los destruyeron de delante de sí, y moraron en lugar de ellos; como hizo Israel en la tierra de su posesión que les dio el SEÑOR.)

(Por tierra de gigantes fue también ella tenida; habitaron en ella gigantes en otro tiempo, a los cuales los amonitas llamaban zomzomeos;

pueblo grande, numeroso, y alto, como los anaceos; a los cuales el SEÑOR destruyó de delante de los amonitas, y ellos les heredaron, y habitaron en su lugar,

Hoy comenzaré a poner tu miedo y tu espanto sobre los pueblos debajo de todo el cielo, los cuales oirán tu fama, y temblarán, y se angustiarán delante de ti.

Mandé también a Josué entonces, diciendo: Tus ojos vieron todo lo que el SEÑOR vuestro Dios ha hecho a aquellos dos reyes; así hará el SEÑOR a todos los reinos a los cuales pasarás tú.

Ahora pues, oh Israel, oye los estatutos y derechos que yo os enseño, haciendo los cuales viviréis, y entraréis, y heredaréis la tierra que el SEÑOR el Dios de vuestros padres os da.

Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque ésta es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia en ojos de los pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos, y dirán: Ciertamente esta nación grande es un pueblo sabio y entendido.

El día que estuviste delante del SEÑOR tu Dios en Horeb, cuando el SEÑOR me dijo: Júntame el pueblo, para que yo les haga oír mis palabras, las cuales aprenderán, para temerme todos los días que vivieren sobre la tierra; y las enseñarán a sus hijos.

Y el SEÑOR os esparcirá entre los pueblos, y quedaréis pocos hombres en número entre los gentiles a los cuales os llevará el SEÑOR.

Estas palabras habló el SEÑOR a toda vuestra congregación en el monte, de en medio del fuego, de la nube y de la oscuridad, a gran voz; y no añadió más. Y las escribió en dos tablas de piedra, las cuales me dio a mí.

un pueblo grande y alto, hijos de gigantes, de los cuales tienes tú conocimiento, y has oído decir: ¿Quién se sostendrá delante de los hijos del Anac?

los cuales están al otro lado del Jordán, tras el camino del occidente en la tierra del cananeo, que habita en la campiña delante de Gilgal, junto a los llanos de More.

Jueces y alcaldes pondrás en todas las puertas de tus ciudades que el SEÑOR tu Dios te dará en tus tribus, los cuales juzgarán al pueblo con juicio de justicia.

Solamente las mujeres y los niños, y los animales, y todo lo que hubiere en la ciudad, todos sus despojos, tomarás para ti; y comerás del despojo de tus enemigos, los cuales el SEÑOR tu Dios te entregó.

y le han de multar en cien ciclos de plata, los cuales darán al padre de la joven, por cuanto esparció mala fama sobre una virgen de Israel; y la ha de tener por mujer, y no podrá despedirla en todos sus días.

Y será que, el día que pasaréis el Jordán a la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, te has de levantar piedras grandes, las cuales revocarás con cal;

El SEÑOR enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas presto a causa de la maldad de tus obras, por las cuales me habrás dejado.

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