559 casos

'Medio' en la Biblia

Porque el Dios celoso, Jehová tu Dios, en medio de ti está; no sea que se encienda el furor de Jehová tu Dios contra ti, y te destruya de sobre la faz de la tierra.

y me dio Jehová las dos tablas de piedra escritas con el dedo de Dios; y en ellas estaba escrito conforme a todas las palabras que os habló Jehová en el monte de en medio del fuego, el día de la asamblea.

Y escribió en las tablas conforme a la primera escritura, los diez mandamientos que Jehová os había hablado en el monte de en medio del fuego, el día de la asamblea; y me las dio Jehová.

y sus señales, y sus obras que hizo en medio de Egipto a Faraón, rey de Egipto, y a toda su tierra;

y lo que hizo con Datán y Abiram, hijos de Eliab hijo de Rubén; cómo abrió la tierra su boca, y se tragó a ellos y a sus casas, y sus tiendas, y toda la hacienda que tenían en pie en medio de todo Israel.

Y el tal profeta o soñador de sueños, ha de ser muerto; por cuanto habló para alejaros de Jehová vuestro Dios (que te sacó de tierra de Egipto, y te rescató de casa de siervos), y de echarte del camino por el que Jehová tu Dios te mandó que anduvieses. Así quitarás el mal de en medio de ti.

Para que todo Israel oiga, y tema, y no tornen a hacer cosa semejante a esta mala cosa en medio de ti.

Hombres, hijos de Belial, han salido de en medio de ti, que han instigado a los moradores de su ciudad, diciendo: Vamos y sirvamos a dioses ajenos, que vosotros no conocisteis;

tú inquirirás, y buscarás, y preguntarás con diligencia; y si pareciere verdad, cosa cierta, que tal abominación se hizo en medio de ti,

Y juntarás todo el despojo de ella en medio de su plaza, y consumirás con fuego la ciudad y todo su despojo, todo ello, a Jehová tu Dios; y será un montón para siempre; nunca más se edificará.

Y te alegrarás delante de Jehová tu Dios, tú, y tu hijo, y tu hija, y tu siervo, y tu sierva, y el levita que estuviere en tus ciudades, y el extranjero, y el huérfano, y la viuda, que estuvieren en medio de ti, en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para hacer habitar allí su nombre.

La mano de los testigos será primero sobre él para matarlo, y después la mano de todo el pueblo: así quitarás el mal de en medio de ti.

para que no se eleve su corazón sobre sus hermanos, ni se aparte del mandamiento a derecha ni a izquierda; a fin que prolongue sus días en su reino, él y sus hijos, en medio de Israel.

te apartarás tres ciudades en medio de tu tierra que Jehová tu Dios te da para que la poseas.

para que no sea derramada sangre inocente en medio de tu tierra que Jehová tu Dios te da por heredad, y sea sobre ti sangre.

entonces haréis a él como él pensó hacer a su hermano; y quitarás el mal de en medio de ti.

Y los que quedaren oirán, y temerán, y no volverán más a hacer una mala cosa como ésta, en medio de ti.

Y tú quitarás la culpa de la sangre inocente de en medio de ti, cuando hicieres lo que es recto a los ojos de Jehová.

Entonces todos los hombres de su ciudad lo apedrearán con piedras, y morirá; así quitarás el mal de en medio de ti; y todo Israel oirá, y temerá.

entonces los sacaréis a ambos a la puerta de aquella ciudad, y los apedrearán con piedras, y morirán; la doncella porque no dio voces en la ciudad, y el hombre porque humilló a la esposa de su prójimo; así quitarás el mal de en medio de ti.

Porque Jehová tu Dios anda en medio de tu campamento, para librarte y entregar a tus enemigos delante de ti; por tanto, será santo tu campamento; para que Él no vea en ti cosa inmunda, y se vuelva de en pos de ti.

Morará contigo, en medio de ti, en el lugar que escogiere en alguna de tus ciudades, donde bien le pareciere; no lo oprimirás.

Si fuere hallado alguno que hubiere hurtado a uno de sus hermanos los hijos de Israel, y hubiere mercadeado con él, o le hubiere vendido, el tal ladrón morirá, y quitarás el mal de en medio de ti.

Y te alegrarás con todo el bien que Jehová tu Dios te hubiere dado a ti y a tu casa, tú y el levita, y el extranjero que está en medio de ti.

El extranjero que esté en medio de ti se elevará sobre ti muy alto, y tú descenderás muy bajo.

El hombre que es tierno y muy delicado en medio de ti, su ojo será maligno para con su hermano, y para con la esposa de su seno, y para con el resto de sus hijos que le quedaren;

vuestros niños, vuestras esposas, y los extranjeros que habitan en medio de tu campamento, desde el que corta tu leña hasta el que saca tu agua;

Y sucederá que cuando te sobrevinieren todas estas cosas, la bendición y la maldición que he puesto delante de ti, y volvieres en sí en medio de todas las naciones a las cuales Jehová tu Dios te hubiere arrojado,

Y Jehová dijo a Moisés: He aquí tú vas a dormir con tus padres, y este pueblo se levantará y fornicará tras los dioses ajenos de la tierra adonde va para estar en medio de ellos; y me dejará, y quebrantará mi pacto que he concertado con él.

Y mi furor se encenderá contra ellos en aquel día; y los abandonaré, y esconderé de ellos mi rostro y serán consumidos; y muchos males y angustias vendrán sobre ellos, y dirán en aquel día: ¿No nos han venido estos males porque no está nuestro Dios en medio de nosotros?

Por cuanto prevaricasteis contra mí en medio de los hijos de Israel en las aguas de Meriba de Cades, en el desierto de Zin; porque no me santificasteis en medio de los hijos de Israel.

Pasad por medio del campamento, y mandad al pueblo, diciendo: Preparaos provisiones; porque dentro de tres días pasaréis el Jordán, para que entréis a poseer la tierra que Jehová vuestro Dios os da para que la poseáis.

Y pasados tres días, los oficiales atravesaron por medio del campamento,

Y añadió Josué: En esto conoceréis que el Dios viviente está en medio de vosotros, y que Él echará de delante de vosotros al cananeo, y al heteo, y al heveo, y al ferezeo, y al gergeseo, y al amorreo, y al jebuseo.

Mas los sacerdotes que llevaban el arca del pacto de Jehová, estuvieron en seco, firmes en medio del Jordán, hasta que todo el pueblo hubo acabado de pasar el Jordán; y todo Israel pasó en seco.

y mandadles, diciendo: Tomaos de aquí del medio del Jordán, del lugar donde están firmes los pies de los sacerdotes, doce piedras, las cuales pasaréis con vosotros, y las asentaréis en el alojamiento donde habéis de pasar la noche.

Y les dijo Josué: Pasad delante del arca de Jehová vuestro Dios al medio del Jordán; y cada uno de vosotros tome una piedra sobre su hombro, conforme al número de las tribus de los hijos de Israel;

Y los hijos de Israel lo hicieron así como Josué les mandó. Tomaron doce piedras del medio del Jordán, como Jehová lo había dicho a Josué, conforme al número de las tribus de los hijos de Israel, y las pasaron consigo al alojamiento, y las asentaron allí.

Josué también levantó doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde estuvieron los pies de los sacerdotes que llevaban el arca del pacto; y han estado allí hasta hoy.

Y los sacerdotes que llevaban el arca se pararon en medio del Jordán, hasta tanto que se hizo todo lo que Jehová había mandado a Josué que hablase al pueblo, conforme a todas las cosas que Moisés había mandado a Josué; y el pueblo se dio prisa y pasó.

Y aconteció que cuando los sacerdotes que llevaban el arca del pacto de Jehová, subieron del medio del Jordán, y las plantas de los pies de los sacerdotes estuvieron en lugar seco, las aguas del Jordán se volvieron a su lugar, corriendo como antes sobre todos sus bordes.

Por esto los hijos de Israel no podrán estar delante de sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda; por cuanto han venido a ser anatema. Ya no seré más con vosotros, al menos que destruyáis el anatema de en medio de vosotros.

Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana, porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás estar delante de tus enemigos, hasta tanto que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros.

Y tomándolo de en medio de la tienda, lo trajeron a Josué y a todos los hijos de Israel, y lo pusieron delante de Jehová.

Entonces Josué los envió; y ellos se fueron a la emboscada, y se pusieron entre Betel y Hai, al occidente de Hai: y Josué se quedó aquella noche en medio del pueblo.

Y habiendo ordenado al pueblo, todo el campamento que estaba en el norte de la ciudad, y su emboscada al occidente de la ciudad, Josué vino aquella noche hasta el medio del valle.

Y los otros salieron de la ciudad a su encuentro: y así fueron encerrados en medio de Israel, los unos de la una parte, y los otros de la otra. Y los hirieron hasta que no quedó ninguno de ellos que escapase.

Y los de Israel respondieron a los heveos: Quizá vosotros habitáis en medio de nosotros, ¿cómo, pues, podremos nosotros hacer alianza con vosotros?

Y sucedió que pasados tres días después que hicieron alianza con ellos, oyeron que eran sus vecinos y que habitaban en medio de ellos.

Y llamándolos Josué, les habló diciendo: ¿Por qué nos habéis engañado, diciendo: Habitamos muy lejos de vosotros, cuando moráis en medio de nosotros?

Y el sol se detuvo y la luna se paró, hasta tanto que la gente se hubo vengado de sus enemigos. ¿No está esto escrito en el libro de Jaser? Y el sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró a ponerse casi un día entero.

Sehón rey de los amorreos, que habitaba en Hesbón, y señoreaba desde Aroer, que está a la ribera del arroyo de Arnón, y desde en medio del arroyo, y la mitad de Galaad, hasta el arroyo Jaboc, el término de los hijos de Amón;

desde Aroer, que está a la orilla del arroyo de Arnón, y la ciudad que está en medio del arroyo, y toda la llanura de Medeba, hasta Dibón;

Y fue el territorio de ellos desde Aroer, que está a la orilla del arroyo de Arnón, y la ciudad que está en medio del valle, y toda la llanura hasta Medeba;

Hubo también ciudades que se apartaron para los hijos de Efraín en medio de la herencia de los hijos de Manasés, todas las ciudades con sus aldeas.

Y no echaron al cananeo que habitaba en Gezer; antes quedó el cananeo en medio de Efraín, hasta hoy, y fue tributario.

De la porción de los hijos de Judá fue sacada la heredad de los hijos de Simeón; porque la porción de los hijos de Judá era excesiva para ellos; así que los hijos de Simeón tuvieron su heredad en medio de la de ellos.

Y después que acabaron de repartir la tierra en heredad por sus términos, dieron los hijos de Israel heredad a Josué hijo de Nun en medio de ellos:

Y todas las ciudades de los levitas en medio de la posesión de los hijos de Israel, fueron cuarenta y ocho ciudades con sus ejidos.

Y yo envié a Moisés y a Aarón, y herí a Egipto, al modo que lo hice en medio de él, y después os saqué.

Ahora pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de en medio los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová.

Tampoco Efraín echó al cananeo que habitaba en Gezer; antes habitó el cananeo en medio de ellos en Gezer.

Tampoco Zabulón echó a los que habitaban en Quitrón ni a los que habitaban en Naalal; mas el cananeo habitó en medio de él, y le fueron tributarios.

Mas Gaal volvió a hablar, y dijo: He allí pueblo que desciende por medio de la tierra, y un escuadrón que viene camino del valle de Meonenim.

En medio de aquella ciudad había una torre fuerte, a la cual se retiraron todos los hombres y mujeres, y todos los señores de la ciudad; y cerrando tras sí las puertas, se subieron al piso alto de la torre.

Y juntando Jefté a todos los varones de Galaad, peleó contra Efraín; y los de Galaad hirieron a Efraín, porque habían dicho: Vosotros sois fugitivos de Efraín, vosotros sois galaaditas en medio de Efraín y en medio de Manasés.

Asió luego Sansón las dos columnas del medio sobre las cuales descansaba la casa, y estribó en ellas, la una con la mano derecha, y la otra con la izquierda;

Volvieron, por tanto, la espalda delante de Israel hacia el camino del desierto; mas el escuadrón los alcanzó, y los que salían de las ciudades los destruían en medio de ellos.

Ellos entonces subieron a la ciudad; y cuando en medio de la ciudad estuvieron, he aquí Samuel que delante de ellos salía para subir al lugar alto.

Y llegando Saúl a Samuel en medio de la puerta, le dijo: Te ruego que me enseñes dónde está la casa del vidente.

Entonces corrieron, y lo trajeron de allí, y puesto en medio del pueblo, desde los hombros arriba era más alto que todo el pueblo.

Y el día siguiente dispuso Saúl el pueblo en tres escuadrones, y entraron en medio del campamento a la vigilia de la mañana, e hirieron a los amonitas hasta que el día calentaba; y los que quedaron fueron dispersos, tal que no quedaron dos de ellos juntos.

Y mientras él hablaba con ellos, he aquí aquel adalid que se ponía en medio de los dos campamentos, que se llamaba Goliat, el filisteo de Gat, salió de los escuadrones de los filisteos, y habló las mismas palabras; y David las oyó.

Otro día aconteció que el espíritu malo de parte de Dios tomó a Saúl, y profetizaba en medio de su casa. Y David tocaba con su mano como los otros días; y tenía Saúl una lanza en su mano.

Bien que alguien se haya levantado a perseguirte y atentar contra tu vida, con todo, el alma de mi señor será ligada en el fajo de los que viven con Jehová tu Dios, y Él arrojará el alma de tus enemigos como de en medio de la palma de una honda.

Entonces Saúl dijo a sus criados: Buscadme una mujer pitonisa, para que yo vaya a ella, y por medio de ella pregunte. Y sus criados le respondieron: He aquí hay una mujer en Endor que tiene espíritu de pitonisa.

Jehová, pues, ha hecho como habló por medio de mí; pues Jehová ha cortado el reino de tu mano, y lo ha dado a tu compañero David.

¡Cómo han caído los valientes en medio de la batalla! ¡Jonatán, muerto en tus alturas!

Y ellos entraron hasta el medio de la casa, como que iban a llevar trigo, y le hirieron en la quinta costilla. Y Recab y Baana su hermano escaparon.

Metieron, pues, el arca de Jehová, y la pusieron en su lugar en medio de una tienda que David le había levantado: y sacrificó David holocaustos y ofrendas de paz delante de Jehová.

Y respondió Joab: No perderé el tiempo contigo. Y tomando tres dardos en su mano, los clavó en el corazón de Absalón, que aún estaba vivo en medio del alcornoque.

Pero él se paró en medio de aquel terreno, y lo defendió, e hirió a los filisteos; y Jehová dio una gran victoria.

Después, Benaía hijo de Joiada, hijo de un varón esforzado, grande en proezas, de Cabseel. Éste mató a dos moabitas, fieros como leones; y él mismo descendió, y mató a un león en medio de un foso en tiempo de la nieve.

Y pasando el Jordán asentaron en Aroer, a la mano derecha de la ciudad que está en medio del valle de Gad y junto a Jazer.

Y tu siervo está en medio de tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande, que no se puede contar ni numerar por su multitud.

El aposento de abajo era de cinco codos de ancho, y el de en medio de seis codos de ancho, y el tercero de siete codos de ancho; porque por fuera había hecho ranuras a la casa en derredor, para no trabar las vigas de las paredes de la casa.

La puerta del aposento de en medio estaba al lado derecho de la casa: y se subía por una escalera de caracol al de en medio, y del aposento de en medio al tercero.

y habitaré en medio de los hijos de Israel, y no abandonaré a mi pueblo Israel.

Y adornó el lugar santísimo por dentro en medio de la casa, para poner allí el arca del pacto de Jehová.

Y la boca de la fuente entraba un codo en el remate que salía para arriba de la base; y era su boca redonda, de la hechura del mismo remate, y éste era de codo y medio. Había también sobre la boca entalladuras con sus tableros, los cuales eran cuadrados, no redondos.

Las cuatro ruedas estaban debajo de los tableros, y los ejes de las ruedas nacían en la misma base. La altura de cada rueda era de un codo y medio.

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