2 Samuel 19:19
Y dijo al rey: No me considere culpable mi señor, ni te acuerdes del mal que tu siervo hizo el día en que mi señor el rey salió de Jerusalén; que el rey {no lo} guarde en su corazón.
1 Samuel 22:15
¿Acaso comencé hoy a consultar a Dios por él? Lejos esté esto de mí. No culpe el rey de nada a su siervo {ni} a ninguno de la casa de mi padre, porque tu siervo no sabe nada de todo este asunto.
Éxodo 10:16-17
Entonces Faraón llamó apresuradamente a Moisés y a Aarón, y dijo: He pecado contra el SEÑOR vuestro Dios y contra vosotros.
1 Samuel 25:25
Ruego a mi señor que no haga caso a este hombre indigno, Nabal, porque conforme a su nombre, así es. Se llama Nabal, y la insensatez está con él; mas yo tu sierva no vi a los jóvenes que tú, mi señor, enviaste.
1 Samuel 26:21
Y Saúl dijo: He pecado. Vuelve, David, hijo mío, porque no volveré a hacerte daño pues mi vida fue muy estimada en tus ojos hoy. He aquí, he actuado neciamente y he cometido un grave error.
2 Samuel 13:20
Su hermano Absalón le dijo: ¿Ha estado contigo tu hermano Amnón? Guarda silencio ahora, hermana mía; tu hermano es; no se angustie tu corazón por este asunto. Tamar, pues, se quedó desconsolada en casa de su hermano Absalón.
2 Samuel 13:33
Ahora pues, no tome en serio mi señor el rey el rumor que dice: ``todos los hijos del rey murieron", porque sólo Amnón ha muerto.
2 Samuel 16:5-14
Al llegar el rey David a Bahurim, he aquí, salió de allí un hombre de la familia de la casa de Saúl que se llamaba Simei, hijo de Gera. Cuando salió, iba maldiciendo;
Salmos 32:2
¿Cuán bienaventurado es el hombre a quien el SEÑOR no culpa de iniquidad, y en cuyo espíritu no hay engaño!
Salmos 79:8
No recuerdes contra nosotros las iniquidades de {nuestros} antepasados; venga pronto a nuestro encuentro tu compasión, porque estamos muy abatidos.
Eclesiastés 10:4
Si la ira del gobernante se levanta contra ti, no abandones tu puesto, porque la serenidad suaviza grandes ofensas.
Isaías 43:25
Yo, yo soy el que borro tus transgresiones por amor a mí mismo, y no recordaré tus pecados.
Jeremías 31:34
Y no tendrán que enseñar más cada uno a su prójimo y cada cual a su hermano, diciendo: ``Conoce al SEÑOR", porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande --declara el SEÑOR-- pues perdonaré su maldad, y no recordaré más su pecado.
Mateo 27:4
diciendo: He pecado entregando sangre inocente. Pero ellos dijeron: A nosotros, ¿qué? ¡Allá tú!
Romanos 4:6-8
Como también David habla de la bendición {que viene} sobre el hombre a quien Dios atribuye justicia aparte de las obras:
2 Corintios 5:19
a saber, que Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando en cuenta a los hombres sus transgresiones, y nos ha encomendado a nosotros la palabra de la reconciliación.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido