10 Versículo de la Biblia sobre Accesibilidad
Versículos Más Relevantes
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús,
Pero Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les impidáis que vengan a mí, porque de los que son como éstos es el reino de los cielos.
Y estaba enfermo cierto {hombre llamado} Lázaro, de Betania, la aldea de María y de su hermana Marta. María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con perfume y le secó los pies con sus cabellos. Las hermanas entonces mandaron a decir a Jesús: Señor, mira, el que tú amas está enfermo.
Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.
Para el director del coro. Salmo de David, cuando después que se llegó a Betsabé, el profeta Natán lo visitó.Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a lo inmenso de tu compasión, borra mis transgresiones. Lávame por completo de mi maldad, y límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis transgresiones, y mi pecado está siempre delante de mí.Leer más.
Contra ti, contra ti sólo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos, de manera que eres justo cuando hablas, {y} sin reproche cuando juzgas. He aquí, yo nací en iniquidad, y en pecado me concibió mi madre. He aquí, tú deseas la verdad en lo más íntimo, y en lo secreto me harás conocer sabiduría. Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve.
Vengamos ante su presencia con acción de gracias; aclamémosle con salmos.
Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.
Entonces llegaron* a Jericó. Y cuando salía de Jericó con sus discípulos y una gran multitud, un mendigo ciego {llamado} Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino. Y cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a gritar y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! Y muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!Leer más.
Y Jesús se detuvo y dijo: Llamadle. Y llamaron* al ciego, diciéndole: ¡Anímate! Levántate, {que} te llama. Y arrojando su manto, se levantó de un salto y fue a Jesús. Y dirigiéndose a él, Jesús {le} dijo: ¿Qué deseas que haga por ti? Y el ciego le respondió: Raboní, que recobre la vista. Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha sanado. Y al instante recobró la vista, y le seguía por el camino.
Por tanto, ni aun el primer {pacto} se inauguró sin sangre.
NO QUEBRARA LA CAÑA CASCADA, NI APAGARA LA MECHA QUE HUMEA, HASTA QUE LLEVE A LA VICTORIA LA JUSTICIA.