20 Versículo de la Biblia sobre Bendecida por Dios
Versículos Más Relevantes
Bienaventurada la nación cuyo Dios es el SEÑOR, el pueblo que El ha escogido como herencia para sí.
Bienaventurado el pueblo a quien así le sucede; bienaventurado el pueblo cuyo Dios es el SEÑOR.
Honrad al Hijo para que no se enoje y perezcáis {en} el camino, pues puede inflamarse de repente su ira. ¿Cuán bienaventurados son todos los que en El se refugian!
Probad y ved que el SEÑOR es bueno. ¿Cuán bienaventurado es el hombre que en El se refugia!
Cuán bienaventurado es el hombre que ha puesto en el SEÑOR su confianza, y no se ha vuelto a los soberbios ni a los que caen en falsedad.
Oh SEÑOR de los ejércitos, ¿cuán bienaventurado es el hombre que en ti confía!
Cuán bienaventurado es el que tú escoges, y acercas {a ti}, {para} que more en tus atrios. Seremos saciados con el bien de tu casa, tu santo templo.
¿Cuán bienaventurados son los que moran en tu casa! Continuamente te alaban. (Selah)
¿Cuán bienaventurado es el pueblo que sabe lo que es la voz de júbilo! Andan, SEÑOR, a la luz de tu rostro.
{Salmo} de David. Masquil. ¿Cuán bienaventurado es aquel cuya transgresión es perdonada, cuyo pecado es cubierto! ¿Cuán bienaventurado es el hombre a quien el SEÑOR no culpa de iniquidad, y en cuyo espíritu no hay engaño!
BIENAVENTURADOS AQUELLOS CUYAS INIQUIDADES HAN SIDO PERDONADAS, Y CUYOS PECADOS HAN SIDO CUBIERTOS.
BIENAVENTURADO EL HOMBRE CUYO PECADO EL SEÑOR NO TOMARA EN CUENTA.
Y Jesús, respondiendo, le dijo: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque {esto} no te {lo} reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Pero dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen.
Cuando uno de los que estaban sentados con El {a la mesa} oyó esto, le dijo: ¡Bienaventurado todo el que coma pan en el reino de Dios!
Y el {ángel} me dijo*: Escribe: ``Bienaventurados los que están invitados a la cena de las bodas del Cordero." Y me dijo*: Estas son palabras verdaderas de Dios.
Bienaventurado y santo es el que tiene parte en la primera resurrección; la muerte segunda no tiene poder sobre éstos sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con El por mil años.
Y oí una voz del cielo que decía: Escribe: ``Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor." Sí --dice el Espíritu-- para que descansen de sus trabajos, porque sus obras van con ellos.
Bienaventurado el hombre a quien corriges, SEÑOR, y lo instruyes en tu ley;