63 Versículo de la Biblia sobre Ciudad
Versículos Más Relevantes
Y conoció Caín a su mujer, la cual concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad del nombre de su hijo, Enoc.
Y fue la cabecera de su reino Babel, y Erec, y Acad, y Calne, en la tierra de Sinar. De esta tierra salió Assur, el cual edificó a Nínive, y a Rehobot, y a Cala, Y a Resén entre Nínive y Cala; la cual es la ciudad grande.
Y los hijos de Gad edificaron Dibón, Atarot, Aroer, Atarot-sofán, Jazer, Jogbeha, Bet-nimra, y a Bet-arán, ciudades fuertes, y también majadas para ovejas.
Oye, Israel: tú estás hoy para pasar el Jordán, para entrar a heredar lo de gentiles más numerosos y más fuertes que tú, ciudades grandes y encastilladas hasta el cielo,
Y aconteció que cuando Josué y los hijos de Israel acabaron de herirlos con mortandad muy grande, hasta destruirlos, los que quedaron de ellos se metieron en las ciudades fuertes.
Dame, pues, ahora este monte, del cual habló el SEÑOR en aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y grandes y fuertes ciudades. Por ventura el SEÑOR estará conmigo, y los echaré como el SEÑOR ha dicho.
tuvieron gran temor; porque Gabaón era una gran ciudad, como una de las ciudades reales, y mayor que Hai, y todos sus varones fuertes.
Y David dijo a Aquis: Si he hallado ahora gracia en tus ojos, séame dado lugar en algunas de las ciudades de la tierra, donde habite; porque ¿ha de morar tu siervo contigo en la ciudad real?
Y David habitó en la fortaleza, y por esto la llamaron la ciudad de David.
Entonces apartó Moisés tres ciudades de este lado del Jordán al nacimiento del sol, para que huyera allí el homicida que matara a su prójimo por yerro, sin haber tenido enemistad con él desde ayer ni desde anteayer; y que huyendo a una de estas ciudades viviera: A Beser en el desierto, en tierra de la llanura, de los rubenitas; y a Ramot en Galaad, de los gaditas; y a Golán en Basán, de los de Manasés.
Cuando el SEÑOR tu Dios talare los gentiles, cuya tierra el SEÑOR tu Dios te da a ti, y tú los heredares, y habitares en sus ciudades, y en sus casas; te apartarás tres ciudades en medio de tu tierra que el SEÑOR tu Dios te da para que la heredes. Te arreglarás el camino, y dividirás en tres partes el término de tu tierra, que el SEÑOR tu Dios te dará en heredad, y será para que todo homicida huya allí.Leer más.
Y éste es el caso del homicida que ha de huir allí, y vivirá: el que hiriere a su prójimo por yerro, que no le tenía enemistad desde ayer ni anteayer; y el que fue con su prójimo al monte a cortar leña, y poniendo fuerza con su mano en el hacha para cortar algún leño, saltó el hierro del cabo, y dio contra su prójimo, y murió; aquel huirá a una de estas ciudades, y vivirá. Para que el vengador \' Por tanto yo te mando, diciendo: Tres ciudades te apartarás. Y si el SEÑOR tu Dios ensanchare tu término, como lo juró a tus padres, y te diere toda la tierra que dijo a tus padres que había de dar; cuando guardaras todos estos mandamientos, que yo te mando hoy, para ponerlos por obra, que ames al SEÑOR tu Dios y andes en sus caminos todos los días, entonces añadirás otras tres ciudades a más de estas tres; para que no sea derramada sangre inocente en medio de tu tierra, que el SEÑOR tu Dios te da por heredad, y no sea sobre ti la sangre. Mas cuando hubiere alguno que aborreciere a su prójimo, y lo acechare, y se levantare sobre él, y lo hiriere de muerte, y muriere, y huyere a alguna de estas ciudades; entonces los ancianos de su ciudad enviarán y lo sacarán de allí, y lo entregarán en mano del pariente vengador \' No le perdonará tu ojo; y quitarás de Israel la culpa de la sangre inocente, y te irá bien.
¿A dónde subimos? Nuestros hermanos han hecho desfallecer nuestro corazón, diciendo: Este pueblo es mayor y más alto que nosotros, las ciudades grandes y amuralladas hasta el cielo; y también vimos allí hijos de gigantes.
Levántate, y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y predique en ella la predicación que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive, conforme a la palabra del SEÑOR. Y era Nínive ciudad grande a Dios, de tres días de camino.
Y será, cuando el SEÑOR tu Dios te hubiere introducido en la tierra que juró a tus padres Abraham, Isaac, y Jacob, para dártela a ti; ciudades grandes y buenas que tú no edificaste;
Y la ciudad era espaciosa y grande, pero poco pueblo dentro de ella, y no había casas reedificadas.
¿y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil hombres que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?
Todas éstas eran ciudades fortalecidas con alto muro, con puertas y barras; sin contar muchas ciudades sin muro.
Sea notorio al rey, que los judíos que subieron de ti a nosotros, vinieron a Jerusalén; y edifican la ciudad rebelde y mala, y han fundado los muros; y puesto los fundamentos.
En Damasco, el capitán de la gente del rey Aretas guardaba la ciudad de los damascenos para prenderme; y fui descolgado del muro por una ventana, y escapé de sus manos.
Y te pondrá cerco en todas tus ciudades, hasta que caigan tus muros altos y encastillados en que tú confías, en toda tu tierra; te cercará, pues, en todas tus ciudades y en toda tu tierra, que el SEÑOR tu Dios te habrá dado.
Entonces ella los hizo descender con una cuerda por la ventana; porque su casa estaba a la pared del muro, y ella vivía en el muro.
Y Salomón hizo parentesco con el Faraón rey de Egipto, porque tomó por mujer a la hija de Faraón, y la trajo a la ciudad de David, entre tanto que acababa de edificar su casa, y la casa del SEÑOR, y los muros de Jerusalén alrededor.
el hijo de Geber, en Ramot de Galaad; éste tenía también las ciudades de Jair hijo de Manasés, las cuales estaban en Galaad; tenía también la provincia de Argob, que estaba en Basán, sesenta grandes ciudades con muro y cerraduras de bronce;
Después de esto edificó el muro de afuera de la ciudad de David, al occidente de Gihón en el valle, y a la entrada de la puerta del pescado, y cercó a Ofel, y lo alzó muy alto; y puso capitanes de ejército en todas las ciudades fuertes por Judá.
y nosotros nos armaremos, e iremos con diligencia delante de los hijos de Israel, hasta que los metamos en su lugar; y nuestros niños quedarán en ciudades fuertes a causa de los moradores de la tierra.
Y habitó Roboam en Jerusalén, y edificó ciudades para fortificar a Judá. Y edificó a Belén, a Etam, a Tecoa, a Bet-sur, a Soco, a Adulam,Leer más.
a Gat, a Maresa, a Zif, a Adoraim, a Laquis, a Azeca, a Zora, a Ajalón, y a Hebrón, que eran en Judá y en Benjamín, ciudades fuertes. Fortificó también las fortalezas, y puso en ellas capitanes, provisiones, vino, y aceite; y en todas las ciudades, escudos y lanzas. Las fortificó, pues, en gran manera, y Judá y Benjamín estuvieron de parte de él.
Y edificó ciudades fuertes en Judá, por cuanto hubo reposo en la tierra, y no había guerra contra él en aquellos tiempos; porque el SEÑOR le había dado reposo.
Y puso ejército en todas las ciudades fuertes de Judá, y colocó gente de guarnición, en tierra de Judá, y asimismo en las ciudades de Efraín que su padre Asa había tomado.
Denunciad en Judá, y haced oír en Jerusalén, y decid: Sonad el shofar en la tierra. Pregonad, juntad, y decid: Reuníos, y entrémonos en las ciudades fuertes.
Pero David tomó la fortaleza de Sion, la cual es la ciudad de David.
Y me dijeron: El remanente, los que quedaron de la cautividad allí en la provincia, están en gran mal y afrenta, y el muro de Jerusalén derribado, y sus puertas quemadas a fuego.
Así dijo el SEÑOR de los ejércitos: El muro ancho de Babilonia será derribado enteramente, y sus altas puertas serán quemadas a fuego; y en vano trabajarán pueblos y naciones en el fuego para salvarla, y se cansarán.
Mas si no hiciere paz contigo, y emprendiere contigo guerra, y la cercares,
Y subió Omri de Gibetón, y con él todo Israel, y cercaron a Tirsa. Mas viendo Zimri tomada la ciudad, se metió en el palacio de la casa real, y prendió fuego a la casa consigo; y murió,
Y aconteció a los nueve años de su reinado, en el mes décimo, a los diez del mes, que Nabucodonosor rey de Babilonia vino con todo su ejército contra Jerusalén, y la cercó; y levantaron contra ella ingenios alrededor. Y estuvo la ciudad cercada hasta el undécimo año del rey Sedequías. A los nueve del mes prevaleció el hambre en la ciudad, y no hubo pan para el pueblo de la tierra.Leer más.
Abierta ya la ciudad, huyeron de noche todos los hombres de guerra por el camino de la puerta que estaba entre los dos muros, junto a los huertos del rey, estando los caldeos alrededor de la ciudad; y se fueron por el camino de la campiña.
Y Babilonia, hermosura de reinos y ornamento de la grandeza de los caldeos, será como Sodoma y Gomorra, a las que trastornó Dios.
He aquí que con arietes han acometido la ciudad para tomarla; y la ciudad es entregada en mano de los caldeos que pelean contra ella, a causa de la espada, y del hambre y de la pestilencia; ha pues, venido, a ser lo que tú dijiste, y he aquí tú lo estás viendo. Y tú Señor DIOS me dijiste a mí: Cómprate la heredad por dinero, y pon testigos; y la ciudad es entregada en manos de los caldeos.
que da esfuerzo al despojador sobre el fuerte, y que el despojador venga contra la fortaleza.
Grande es el SEÑOR y digno de ser en gran manera alabado en la ciudad de nuestro Dios, en el monte de su santidad. Hermosa provincia, el gozo de toda la tierra es el monte de Sion, a los lados del aquilón, la ciudad del gran Rey.
y a su hijo daré una tribu, para que mi siervo David tenga lámpara todos los días delante de mi faz en Jerusalén, ciudad que yo me elegí para poner en ella mi nombre.
Y Roboam hijo de Salomón reinó en Judá. De cuarenta y un años era Roboam cuando comenzó a reinar, y diecisiete años reinó en Jerusalén, ciudad que el SEÑOR eligió de todas las tribus de Israel para poner allí su nombre. El nombre de su madre fue Naama, amonita.
Y habitaron los príncipes del pueblo en Jerusalén; mas el resto del pueblo echó suertes para traer uno de diez que morara en Jerusalén, ciudad santa, y las nueve partes en las otras ciudades.
Despiértate, despiértate, vístete tu fortaleza, oh Sion; vístete tus ropas de hermosura, oh Jerusalén, ciudad santa, porque nunca más acontecerá, que venga en ti incircunciso, ni inmundo.
Porque he aquí, que a la ciudad sobre la cual es llamado mi nombre yo comienzo a hacer mal; ¿y solamente vosotros seréis absueltos? No seréis absueltos, porque espada traigo sobre todos los moradores de la tierra, dijo el SEÑOR de los ejércitos.
Oh Señor, según toda tu justicia, apartese ahora tu ira y tu furor de sobre tu ciudad Jerusalén, tu santo monte; porque a causa de nuestros pecados, y por la iniquidad de nuestros padres, Jerusalén y todo tu pueblo es dado en vergüenza a todos nuestros alrededores.
ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
Y el varón que vendiere casa de morada en ciudad cercada, tendrá facultad de redimirla hasta acabarse el año de su venta; un año será el término de poderse redimir. Y si no fuere rescatada dentro de un año entero, la casa que estuviere en la ciudad amurallada quedará para siempre para aquel que la compró, y para sus descendientes; no saldrá en el jubileo.
Porque he aquí que yo te he puesto en este día como ciudad fortalecida, y como columna de hierro, y como muro de bronce sobre toda la tierra, contra los reyes de Judá, contra sus príncipes, contra sus sacerdotes, y contra el pueblo de la tierra.
porque esperaba la ciudad con fundamentos, el artífice y hacedor de la cual es Dios.
mas empero deseaban la mejor, es a saber, la celestial, por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les había aparejado ciudad.
Mas os habéis llegado al monte de Sión, y a la ciudad del Dios viviente, Jerusalén la celestial, y a la compañía de muchos millares de ángeles,
Porque no tenemos aquí ciudad permanente, mas buscamos la por venir.
Y yo Juan vi la santa Ciudad, Jerusalén la nueva, que descendía del cielo, aderezada de Dios, como la esposa ataviada para su marido.
Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. En el medio de la plaza de ella, y de un lado y del otro del río, el árbol de la vida, que lleva doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol son para la sanidad de los gentiles. Y toda cosa maldita no será más; sino el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán.Leer más.
Y verán su rostro; y su Nombre estará en sus frentes. Y allí no habrá más noche; y no tienen necesidad de lumbre de lámpara, ni de lumbre de sol: porque el Señor Dios los alumbrará; y reinarán para siempre jamás.
Tópicos sobre Ciudad
Ai, La Ciudad
Josué 7:2Y Josué envió hombres desde Jericó a Hai, que estaba junto a Bet-avén hacia el oriente de Bet-el; y les habló diciendo: Subid, y reconoced la tierra. Y ellos subieron, y reconocieron a Hai.
Ciudad
1 Samuel 23:7Y fue dicho a Saúl como David había venido a Keila. Entonces dijo Saúl: Dios lo ha traído a mis manos; porque él está encerrado, habiéndose metido en una ciudad con puertas y cerraduras.
Ciudad de David
1 Crónicas 11:5Y los moradores de Jebus dijeron a David: No entrarás acá. Mas David tomó la fortaleza de Sion, que es la ciudad de David.
Ciudad de Dios
Salmos 48:1-3Grande es el SEÑOR y digno de ser en gran manera alabado en la ciudad de nuestro Dios, en el monte de su santidad.
Fuera de la ciudad
Apocalipsis 22:15Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, y los disolutos, y los homicidas, y los idólatras, y cualquiera que ama y hace mentira.
La ciudad de Alejandría
Hechos 6:9Se levantaron entonces unos de la sinagoga que se llama de los libertinos, y cireneos, y alejandrinos, y de los de Cilicia, y de Asia, disputando con Esteban.
la ciudad santa
Nehemías 11:1Y habitaron los príncipes del pueblo en Jerusalén; mas el resto del pueblo echó suertes para traer uno de diez que morara en Jerusalén, ciudad santa, y las nueve partes en las otras ciudades.
la tumba en la ciudad de David
1 Reyes 2:10Y David durmió con sus padres, y fue sepultado en la ciudad de David.
Las puertas de la ciudad
Lamentaciones 5:14Los ancianos cesaron de la puerta, los jóvenes de sus canciones.