19 Versículo de la Biblia sobre Coraje, ejemplos de
Versículos Más Relevantes
Ahora pues, dame esta región montañosa de la cual el SEÑOR habló aquel día, porque tú oíste aquel día que allí {había} anaceos con grandes ciudades fortificadas; tal vez el SEÑOR esté conmigo y los expulsaré como el SEÑOR ha dicho.
Zabulón {era} pueblo que despreció su vida {hasta} la muerte. Y también Neftalí, en las alturas del campo.
Y Jonatán dijo al joven que llevaba su armadura: Ven y pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá el SEÑOR obrará por nosotros, pues el SEÑOR no está limitado a salvar con muchos o con pocos.
Y dijo David a Saúl: No se desaliente el corazón de nadie a causa de él; tu siervo irá y peleará con este filisteo.
Entonces Natán dijo a David: Tú eres aquel hombre. Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: ``Yo te ungí rey sobre Israel y te libré de la mano de Saúl.
Y Acab dijo a Elías: ¿Me has encontrado, enemigo mío? Y él respondió: {Te} he encontrado, porque te has vendido para hacer el mal ante los ojos del SEÑOR.
Pero Micaías dijo: Vive el SEÑOR que lo que el SEÑOR me diga, eso hablaré.
Y Eliseo dijo: Vive el SEÑOR de los ejércitos, ante quien estoy, que si no fuera por respeto a la presencia de Josafat, rey de Judá, no te miraría ni te vería.
Pero yo dije: ¿Huir un hombre como yo? ¿Acaso uno como yo entraría al templo para salvar su vida? No entraré.
Sadrac, Mesac y Abed-nego respondieron y dijeron al rey Nabucodonosor: No necesitamos darte una respuesta acerca de este asunto.
Ciertamente nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiente; y de tu mano, oh rey, nos librará.
Cuando Daniel supo que había sido firmado el documento, entró en su casa (en su aposento superior tenía ventanas abiertas en dirección a Jerusalén), y como lo solía hacer antes, continuó arrodillándose tres veces al día, orando y dando gracias delante de su Dios.
Pilato entonces le dijo*: ¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para soltarte, y que tengo autoridad para crucificarte?
Jesús respondió: Ninguna autoridad tendrías sobre mí si no se te hubiera dado de arriba; por eso el que me entregó a ti tiene mayor pecado.
porque nosotros no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído.
Vosotros, que sois duros de cerviz e incircuncisos de corazón y de oídos, resistís siempre al Espíritu Santo; como hicieron vuestros padres, así también hacéis vosotros.
Por la fe Moisés, cuando nació, fue escondido por sus padres durante tres meses, porque vieron que era un niño hermoso y no temieron el edicto del rey.
Por la fe salió de Egipto sin temer la ira del rey, porque se mantuvo firme como viendo al Invisible.