22 Versículo de la Biblia sobre Dando a Dios el Hijo
Versículos Más Relevantes
Todas las cosas me son entregadas de mi Padre: y nadie conoció al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoció alguno, sino el Hijo, y aquel á quien el Hijo lo quisiere revelar.
Todas las cosas me son entregadas de mi Padre: y nadie sabe quién sea el Hijo sino el Padre; ni quién sea el Padre, sino el Hijo, y á quien el Hijo lo quisiere revelar.
Sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había salido de Dios, y á Dios iba,
Y llegando Jesús, les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Yo pues os ordeno un reino, como mi Padre me lo ordenó á mí,
Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así dió también al Hijo que tuviese vida en sí mismo:
Y también le dió poder de hacer juicio, en cuanto es el Hijo del hombre.
Mas yo tengo mayor testimonio que el de Juan: porque las obras que el Padre me dió que cumpliese, las mismas obras que yo hago, dan testimonio de mí, que el Padre me haya enviado.
Mi Padre que me las dió, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
Ahora han conocido que todas las cosas que me diste, son de ti;
Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; á los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición; para que la Escritura se cumpliese.
Y yo, la gloria que me diste les he dado; para que sean una cosa, como también nosotros somos una cosa.
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, ellos estén también conmigo; para que vean mi gloria que me has dado: por cuanto me has amado desde antes de la constitución del mundo.
Jesús entonces dijo á Pedro: Mete tu espada en la vaina: el vaso que el Padre me ha dado, ¿no lo tengo de beber?
LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; y la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo,
Todo lo que el Padre me da, vendrá á mí; y al que á mí viene, no le hecho fuera.
Como le has dado la potestad de toda carne, para que dé vida eterna á todos los que le diste.
He manifestado tu nombre á los hombres que del mundo me diste: tuyos eran, y me los diste, y guardaron tu palabra.
Yo ruego por ellos: no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son:
Y esta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que todo lo que me diere, no pierda de ello, sino que lo resucite en el día postrero.
Para que se cumpliese la palabra que había dicho: De los que me diste, ninguno de ellos perdí.
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