Y pondré mi morada en medio de vosotros, y mi alma no os abominará;

¿Cómo tengo de dejarte, oh Efraín? ¿He de entregarte yo, Israel? ¿Cómo podré yo hacerte como Adma, ni ponerte como a Zeboim? Mi corazón se revuelve dentro de mí, se inflama toda mi compasión.

He aquí, Dios no aborrece al perfecto, ni toma la mano de los malignos.

Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos; porque yo el SEÑOR soy su Dios.

Cof : Porque el Señor no desechará para siempre;

Nunca más te llamarán Desamparada, ni tu tierra se dirá más Asolamiento: sino que serás llamada Hefzi-ba, (Mi voluntad en ella ) y tu tierra, Beula (Casada ) porque el querer del SEÑOR será en ti, y tu tierra será casada.

Y les llamarán Pueblo Santo, Redimidos del SEÑOR; y a ti te llamarán Ciudad Buscada, no desamparada.

Porque no dejará el SEÑOR su pueblo, ni desamparará a su heredad;

Y sabrán que yo soy el SEÑOR su Dios, cuando después de haberlos hecho pasar a los gentiles, los juntaré sobre su tierra, sin dejar más allá ninguno de ellos.

Porque no dejarás mi alma en el sepulcro; ni darás tu Misericordioso para que vea corrupción.

El SEÑOR no lo dejará en sus manos, ni lo condenará cuando le juzgaren.

Nun Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su simiente que mendigue pan.

Porque el SEÑOR ama la rectitud, y no desamparará a sus misericordiosos, para siempre serán guardados; mas la simiente de los impíos será talada.

Pues el SEÑOR no desamparará a su pueblo, por su grande nombre; porque el SEÑOR ha querido haceros pueblo suyo.

porque Dios misericordioso es el SEÑOR tu Dios; no te dejará, ni te destruirá, ni se olvidará del pacto de tus padres que les juró.

Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos; que el SEÑOR tu Dios es el que va contigo; no te dejará ni te desamparará.

Y el SEÑOR es el que va delante de ti; él será contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas, ni te intimides.

Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como yo fui con Moisés, seré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.

Dijo más David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y ponlo por obra; no temas, ni desmayes, porque el SEÑOR Dios, mi Dios, será contigo; él no te dejará, ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra del servicio de la casa del SEÑOR.

Sean las costumbres vuestras sin avaricia, contentos de lo presente (porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré.)

Y he aquí, yo soy contigo, y yo te guardaré por dondequiera que fueres, y yo te volveré a esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya hecho lo que te he dicho.

y habitaré en medio de los hijos de Israel, y no dejaré a mi pueblo Israel.

Los pobres y menesterosos buscan las aguas, que no hay ; su lengua se secó de sed; yo, el SEÑOR, los oiré; yo , el Dios de Israel, no los desampararé.

No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

Así dijo el SEÑOR: Si los cielos arriba se pueden medir, y buscarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la simiente de Israel por todo lo que hicieron, dijo el SEÑOR.

Porque siervos éramos; mas en nuestra servidumbre no nos desamparó nuestro Dios, antes inclinó sobre nosotros misericordia delante del rey de Persia, para que se nos diese vida para alzar la Casa de nuestro Dios, y para hacer restaurar sus asolamientos, y para darnos vallado en Judá y en Jerusalén.

Porque Israel y Judá no han enviudado de su Dios, el SEÑOR de los ejércitos, aunque su tierra fue llena de pecado contra el Santo de Israel.

Digo pues: ¿Ha desechado Dios a su pueblo? En ninguna manera. Porque también yo soy Israelita, de la simiente de Abraham, de la tribu de Benjamín.

y no quisieron oír, ni se acordaron de tus maravillas que habías hecho con ellos; antes endurecieron su cerviz, y en su rebelión pensaron poner caudillo para volverse a su servidumbre. Tú empero, eres Dios de perdones, clemente y piadoso, tardo para la ira, y de mucha misericordia, porque no los dejaste.

Tú, con todo, por tus muchas misericordias no los abandonaste en el desierto; la columna de nube no se apartó de ellos de día, para guiarlos por el camino, ni la columna de fuego de noche, para alumbrarles el camino por el cual habían de ir.

Pero por tus muchas misericordias no los consumiste, ni los dejaste; porque eres Dios clemente y misericordioso.

Y en ti confiarán los que conocen tu nombre; por cuanto tú , oh SEÑOR, no desamparaste a los que te buscaron.

padecemos persecución, mas no somos desamparados en ella ; somos abatidos, mas no perecemos;

Porque yo fortificaré la Casa de Judá, y guardaré la Casa de José; y los haré volver, porque de ellos tendré piedad; y serán como si no los hubiera desechado; porque yo soy el SEÑOR su Dios, que los oiré.

No ha desechado Dios a su pueblo, al cual antes conoció. ¿O no sabéis qué dice de Elías la Escritura? Cómo hablando con Dios contra Israel dice: